FAO.org

“Scaling Out, Scaling Up and Scaling Deep” consiste en una serie de estrategias dirigidas a ayudar a iniciativas brillantes destinadas a resolver los problemas sociales y ecológicos más apremiantes y complejos mediante la expansión de su impacto positivo en los sistemas.

“Scaling up” tiene como objetivo tocar leyes y políticas, “scaling out” busca crear un mayor impacto a través de la replicación y difusión, y finalmente, “scaling deep” se enfoca en el impacto sobre las raíces culturales.[1]

La iniciativa Making Every Voice Count for Adaptive Management (Hacer que cada voz cuente para la gestión adaptativa) (MEV-CAM) está utilizando activamente estos principios, como se puede notar en su capacitación del Módulo C. Este módulo, a diferencia de los dos módulos de capacitación anteriores, se enfoca en extraer y compartir los conocimientos valiosos provenientes directamente de los beneficiarios. Los miembros de la comunidad resaltan las mejores prácticas que se llevan a cabo actualmente dentro de sus contextos y, junto con los aprendices, analizan qué se necesita para mejorarlas. Luego, los resultados se presentan a través de un medio visual para eventualmente expandirse a otras regiones. Este proceso de intercambio de conocimientos tiene como base las habilidades fundamentales adquiridas en los Módulos A y B.

La base

El enfoque de video participativo toma el término “participativo” muy literalmente. Comenzando con el Módulo A, Video participativo para el cambio más significativo, los participantes adquirieron habilidades sobre cómo trabajar con miembros de la comunidad y capturar el cambio más significativo visto como el resultado de las nuevas lecciones aprendidas. Aquí, los participantes aprendieron cómo involucrar a los beneficiarios y otras partes interesadas utilizando guiones gráficos y otros juegos para extraer los cambios más notables observados en sus comunidades. Se ha prestado especial atención a garantizar la participación de las mujeres y su implicación activa en el proceso de empoderamiento. Este enfoque transformador de género generalmente se utiliza para profundizar y evaluar el resultado de un proyecto desde el punto de vista de los miembros de la comunidad, al mismo tiempo que valora y fortalece el papel de las mujeres dentro de las comunidades.

El módulo B, por otro lado, demostró cómo usar el video participativo para la facilitación. Aquí, los participantes aprendieron habilidades sobre cómo empoderar a los miembros de la comunidad, hombres y mujeres por igual, para crear videos participativos con el fin de abogar por una causa y, al mismo tiempo, ampliar sus propios proyectos. Al hacerlo, los miembros de la comunidad identificaron áreas en las que necesitaban sensibilizar al gobierno y mostraron sus desafíos y necesidades a través de estos videos. El video participativo para el enfoque de facilitación también empodera a las mujeres líderes para ilustrar sus prácticas, contribuciones y recomendaciones de políticas que se les alienta a mostrar durante las oportunidades de diálogo sobre políticas a nivel local y más allá. Con el apoyo de los participantes, las partes interesadas pudieron expresarse de manera innovadora.

Para que ambos enfoques rindan al máximo de su potencial, es importante entender lo que los beneficiarios quieren decir y cómo para continuar ampliando sus horizontes. Solo entonces los aprendices pueden trabajar junto a las comunidades para demostrar formas innovadoras de compartir estos mensajes con su público destinatario: ya sea con otras comunidades, equipos, legisladores y otros tomadores de decisiones. Es a través del Módulo C donde los participantes aprenden habilidades sobre cómo guiar a las comunidades, profundizando sobre los distintos contextos y entendiendo cómo y por qué se han adoptado ciertas prácticas.

MEV-CAM y las sinergias entre diferentes contextos

Se ha elegido un puñado de equipos para participar en este módulo, ¡pero la selección de países no fue aleatoria! De hecho, estos equipos demostraron un gran entusiasmo e interés en la metodología de video participativo y encontraron formas creativas de aplicar esta técnica a sus videos base.

Los equipos francófonos seleccionados fueron Burundi, Burkina Faso (FMAM-6 y FMAM-7) y Níger; mientras tanto, para los equipos de cohorte anglófonos de Angola, Malawi (FMAM-6 y FMAM-7), Mongolia, Mozambique, Tanzania (FMAM-6 y FMAM-7) y Uganda. ¡Casi la mitad de los aprendices también eran mujeres!

Los participantes trabajaron con los beneficiarios antes de que comenzara el Módulo C, con los equipos de Malawi y Tanzania ilustrando específicamente cómo es posible crear sinergias entre los proyectos del FMAM-6 Sistemas alimentarios resilientes (RFS) y el Programa de impacto de paisajes sostenibles de tierras áridas (DSL-IP) del FMAM-7. En el caso de estos dos equipos, los participantes de los proyectos del FMAM-7 visitaron a los del FMAM-6 y pudieron aprender no solo sobre las mejores prácticas utilizadas en estos contextos, sino también sobre las lecciones aprendidas que se pueden aplicar y ampliar en futuras actividades a realizar en el contexto del FMAM-7.

El equipo de Malawi visitó el distrito de Machinga, donde los miembros de la comunidad participaron a través del "Teatro para el desarrollo" como una plataforma para que los beneficiarios no solo exploraran su creatividad, sino también para compartir conocimientos importantes sobre problemas sociales complejos y otras prácticas importantes, como la apicultura.

En Tanzania, los participantes destacaron las diferentes técnicas de apicultura que se utilizan actualmente en el distrito de Mkalama, donde estas prácticas se destacaron como una de las principales actividades para diversificar sus fuentes de sustento, mientras que precedentemente no eran bien vistas.

La metodología

Este módulo adoptó un enfoque de "aula invertida" donde los instructores de InsightShare brindaron orientación sobre cómo realizar la edición participativa de videos. Además de los procesos de edición tradicionales, la edición de video participativo asegura que las voces de las comunidades se expresen correctamente. Los participantes aprendieron cómo hacer esto usando ediciones en papel, corrección de subtítulos y, en general, sintiéndose cómodos con el aspecto técnico de esta iniciativa.

Los participantes de Mongolia y Mozambique están finalizando sus videos base, mientras que los participantes de Angola y Malawi están trabajando en sus habilidades de monitoreo y están creando videos de seguimiento a sus videos base. Los equipos de Burundi, Burkina Faso, Níger y Uganda compartirán el cambio más significativo en sus contextos, ilustrando cómo el video participativo es una herramienta efectiva de evaluación.

Pensando en el futuro

El equipo MEV-CAM continuará trabajando de cerca con cada país para extraer las mejores prácticas y lecciones aprendidas. Junto con las oficinas de país y los socios de la FAO, se trabajará mucho para evidenciar las condiciones de referencia y acompañar las acciones de los proyectos, al mismo tiempo que se monitorean los cambios reales definidos por los beneficiarios.

Pronto no solo se compartirán los videos, sino que también se definirá documentación interesante sobre las experiencias desde el terreno y la mejor manera de mejorarlas en diferentes paisajes que enfrentan desafíos similares. Las voces desde el suelo tendrán una plataforma para ser escuchadas, reconocidas y aprovechadas al máximo.