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Actualmente, Angela trabaja con actores no estatales en Nakuru, Kenia, y realiza su LLM de forma remota en la Universidad de Nairobi. Anteriormente obtuvo su LLB de la Universidad de Moi gracias a su experiencia como voluntaria con actores no estatales, que comenzó en 2009.

Angela comenzó en varias organizaciones de la sociedad civil, principalmente ayudando a los refugiados con los que se reunía a diario, escribía informes sobre ellos y los ayudaba en su asilo. Trabajaba en un bufete de abogados y acudía a los tribunales casi a diario, pero esto no era lo que Angela quería hacer, para usar sus propias palabras, "era lo mismo día tras día". Sin embargo, ahora, trabajando con actores no estatales en Nakuru , Angela dice “sientes que haces un cambio”.

Entonces, ¿qué implica ahora el trabajo de Ángela?

Bueno, parte del trabajo requiere que ella ayude a las comunidades a comprender las leyes, políticas y disposiciones constitucionales para que puedan participar de manera efectiva en los procesos de gobernanza de los recursos naturales; elabora propuestas, memorandos de entendimiento y políticas institucionales; revisa y analiza políticas, legislaciones y materiales de orientación constitucional en las áreas de la tierra, el medio ambiente, la pesca, los bosques, la agricultura y el pastoreo; interactúa con diferentes departamentos dentro de la organización para comprender lo que hacen con el fin de integrar políticas y leyes en sus proyectos/programas; escribe informes mensuales; y asume la coordinación de los eventos de campo.

El día que hablamos, se suponía que Angela viajaría a Kajiado, una comunidad local, para organizar una reunión para el día siguiente. La reunión involucraría a los miembros de la comunidad y al gobierno local para registrar a todos en la tierra comunal. La tierra es un tema complejo en Kenia: una gran parte de la población de Kenia depende de la agricultura como su principal fuente de ingresos, por lo que la poseción segura de la tierra es crucial para muchos. La Política Nacional de Tierras de 2009 cambió la forma en que se dividía y poseía la tierra en Kenia. Anteriormente, la tierra se designaba como gubernamental, fiduciaria o privada, mientras que después, la tierra se convirtió en comunitaria, pública o privada. En 2016, cincuenta y tres años después de la independencia de Kenia, entró en vigor la Ley de Tierras Comunitarias que reconoce la propiedad comunitaria de la tierra, lo que significa que las comunidades pueden asegurar un único título colectivo sobre la tierra. La comunidad debe estar registrada, al igual que la tierra comunitaria, por lo que se elige un Comité de Gestión de Tierras Comunitarias para supervisar el registro en nombre de la comunidad. Esta ley tiene como objetivo permitir que las comunidades tengan un mayor control sobre la tierra y sus recursos naturales, lo que desempeña un papel vital para asegurar los medios de subsistencia basados ​​en la tierra; promover la gestión sostenible; mitigar conflictos; fortalecer la resiliencia; y facilitar la adaptación al cambio climático. Ayudar a las comunidades a registrar tierras es parte del trabajo de Ángela.

Primero, las comunidades se reúnen y acuerdan que sus tierras deben registrarse; todos los grupos dentro de la comunidad deben estar representados, por ejemplo, las minorías, las personas con discapacidad, las mujeres y los jóvenes no pueden olvidarse. Se debe alentar a los miembros de la comunidad a conocer todo lo relacionado con la Ley de Tierras Comunitarias para garantizar que tanto el contenido como el proceso se hayan entendido correctamente. Durante la reunión, la Asamblea Comunitaria, se eligen de siete a quince miembros (teniendo en cuenta la regla de los dos tercios de género, lo que significa que no más de dos tercios de los miembros electos son del mismo género) para el Comité de Administración de Tierras Comunitarias (CLMC por sus siglas en inglés). También nombrarán un Presidente, un Vicepresidente, un Secretario y un Tesorero del Comité Ejecutivo.

El propósito del CLMC es llevar a cabo el registro de la comunidad 1) inventando el nombre de la comunidad 2) compilando el registro de miembros 3) redactando la constitución de la comunidad y 4) solicitando el registro al registrador. Tal es el proceso en pocas palabras.

Cuando se le pregunta cuáles son las partes más difíciles del trabajo, Angela responde que las sociedades civiles terminan compitiendo por los mismos donadores, por lo que a veces puede surgir hostilidad. Angela afirma que "debes poder recuperarte para trabajar juntos, de lo contrario no podrás trabajar". Sin embargo, la parte del trabajo que a Angela le encanta, además de sentir que está marcando una diferencia real, es la parte de la defensa, “tienes que construir conocimiento; adoptar habilidades de defensa”. Le deseamos a Angela todo lo mejor en sus esfuerzos y su próximo LLM.

Lectura recomendada: consulte este artículo sobre el registro de derechos de tierras comunitarias y las mujeres en Kenia, coescrito por nuestra campeona de WeCaN aquí