Implementación de un enfoque de nexo humanitario-desarrollo-paz
Explorando, fortaleciendo y reactivando ecosistemas de tierras áridas
Actualmente, las zonas áridas albergan alrededor del 25 % de la población mundial, contienen el 50 % del ganado mundial, el 27 % de los bosques del mundo (FAO, 2019), almacenan el 30 % del carbono orgánico del suelo del mundo y suministran alrededor del 60 % de la producción mundial de alimentos (IUCN.2008). Sin embargo, por muy importantes que sean las zonas áridas para la seguridad alimentaria y la mitigación del cambio climático, también se caracterizan por precipitaciones inestables, variabilidad climática y escasez de agua. Los efectos del cambio climático están exacerbando estas condiciones con períodos más largos de sequía, desertificación acelerada e impactando la biodiversidad y la cubierta vegetal que reducen la fertilidad del suelo, todo lo cual debilita la seguridad alimentaria y nutricional. El crecimiento de la población, junto con la expansión de las zonas áridas debido al cambio climático, podrían aumentar la cantidad de personas que viven en condiciones difíciles hasta en un 70 % para 2030 (Banco Mundial, 2017). Por lo tanto, el cambio climático puede actuar como un multiplicador de amenazas de conflicto, donde los ecosistemas ya frágiles y las comunidades locales se ven empujadas más allá de la capacidad de respuesta, lo que resulta en un aumento de las tensiones relacionadas con el acceso y uso de los recursos naturales (IPCC, 2019). Los grupos vulnerables clave en los ecosistemas de las zonas áridas incluyen pastores y hogares agropastoriles, así como desplazados internos, refugiados y migrantes resultado de los impactos del cambio climático y los conflictos, con mujeres y niños particularmente en riesgo.
La interconectividad que caracteriza las anomalías de temperatura y el desplazamiento interno de poblaciones en los bosques de zonas áridas y otras tierras boscosas y áreas agrosilvopastoriles asociadas.
La interconectividad que caracteriza las anomalías de temperatura y el desplazamiento interno de poblaciones en los bosques de zonas áridas y otras tierras boscosas y áreas agrosilvopastoriles asociadas.
- Source: United Nations Geospatial (2021), modified with data from ESA (2017); IDMC (2020); GISTEMP Team (2021). Modified
Perspectivas desde el terreno: Aprendiendo de los estudios de caso
Perspectivas desde el terreno: Aprendiendo de los estudios de caso
Dada la importancia de los ecosistemas de las zonas áridas, los crecientes impactos del cambio climático y los conflictos en estas regiones, así como el renovado enfoque en facilitar la restauración de los paisajes a largo plazo. La FAO, CGIAR y CARE reunieron 18 casos en contextos que confrontan la naturaleza multidimensional de los impactos relacionados con el clima y los conflictos en las zonas áridas para arrojar luz sobre los elementos que respaldan el enfoque de nexo HDP para minimizar el multiplicador de amenazas de conflicto del cambio climático en los ecosistemas de las zonas áridas, donde el conflicto es posible, presente o latente.
Las lecciones que surgen de los estudios de caso se pueden clasificar en cuatro temas clave, que son útiles para que los responsables de la toma de decisiones los consideren y así brindar soluciones efectivas a largo plazo. Todos los temas están interrelacionados y son esenciales en cualquier contexto humanitario o de desarrollo. Sin embargo, nuestro análisis se enfoca en por qué es particularmente crucial abordar estos temas en situaciones de conflicto en los ecosistemas de zonas áridas. Estos temas son:
- Inclusión: Adaptar las intervenciones a las necesidades e intereses específicos de los más vulnerables [ej. desplazados internos (IDP), mujeres, pueblos indígenas, jóvenes] e involucrarlos de manera significativa en los procesos y estructuras de gobernanza
- Sensibilidad al conflicto: Integrar enfoques de sensibilidad al conflicto (basados en el análisis del contexto/conflicto) para evitar exacerbar o crear conflicto
- Clima/seguridad alimentaria: Integrar la adaptación al cambio climático y medidas de seguridad alimentaria y nutricional para garantizar la sostenibilidad ambiental y la seguridad humana en general
- Monitoreo: monitorear el cambio climático para reducir y planificar con anticipación los impactos relacionados con éste.