FAO en Ecuador

FAO diseña proyecto para asistir al Gobierno en la reinserción de los pequeños productores y pescadores afectados por el terremoto

25/04/2016

Quinientas cuarenta y dos mil personas de la población rural asentada en las provincias de Esmeraldas y Manabí se encuentran en zonas de alta afectación por el terremoto del 16 de abril. Así lo determina el Primer Informe de Situación elaborado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Ecuador y el Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (MAGAP). 

En el documento, enviado a la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas (OCHA), se considera crítica la situación de los pequeños pescadores artesanales en varias zonas y de las industrias camaronera y acuícola. “Esmeraldas y Manabí cuentan con 309 camaroneras que debido al terremoto requieren atención inmediata por ser una fuente de ingresos y empleos importante para sus habitantes”, se detalla. 

Se reportan grandes pérdidas de herramientas de pesca, botes y otros insumos básicos para el restablecimiento de la actividad acuícola y pesquera. Los pescadores no están zarpando pues están atendiendo a sus familias, además de que no tienen seguridad del transporte y comercialización de su producción. 

Adicionalmente, se alerta sobre la situación de aves y cerdos al carecer de electricidad y agua. Ciento veintiún avícolas y 138 porcícolas deben ser evaluadas de manera urgente para evitar la pérdida de especies menores. 

Pedro Pablo Peña, Representante de la FAO en Ecuador, indicó que esta semana seguirán enviando ayuda a las zonas afectadas por el sismo. “Hicimos una primera entrega de vituallas con alimentos e implementos de aseo para los damnificados. Ahora estamos diseñando un proyecto para asistir al Gobierno en la reinserción de los pequeños productores afectados por el terremoto, dotándoles de paquetes de insumos agrícolas y asistencia técnica indispensables para la reactivación de la actividad agropecuaria de la zona”, dijo. 

Agregó que entre las prioridades también está garantizar la seguridad alimentaria de las poblaciones vulnerables que viven en las zonas costeras afectadas por el terremoto y recuperar la capacidad productiva de los pescadores artesanales por medio de la restauración de sus pescaderías, botes, y facilidades de almacenamiento.