Familias afectadas por la sequía de 2015 en los departamentos de Usulután, San Miguel y Morazán participaron en el proyecto “Respuesta Humanitaria a Personas Afectadas por la Sequía de 2015” ejecutado por  la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

 En esta respuesta humanitaria se han invertido US$ 2.71 millones provenientes del Fondo Central de Respuesta a Emergencias (CERF), un fondo global establecido por las Naciones Unidas, que se ejecuta con los agentes humanitarios de cada país, contribuye a una mejor coordinación y facilita una respuesta estratégica y eficaz. 

 Con el objetivo de conocer los avances realizados, el ministro de Relaciones Exteriores,  Hugo Martínez; el Coordinador Residente de las Naciones Unidas, Christian Salazar; y la Jefa de Oficina Regional de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCHA), Wendy Cue, visitaron el departamento de Usulután.

 El proyecto instaló 300 tanques comunitarios con los que 6,000 familias podrán disponer de agua segura en cantidad y calidad para  su  consumo, dado que en la mayoría de comunidades los pozos y fuentes de agua se secaron.

 Asimismo, se han distribuido los insumos y proporcionado asistencia técnica necesaria para que 5,000 familias participantes puedan establecer huertos familiares, y se han entregado 450 sistemas de cosecha de agua y 425 sistemas de riego por goteo para una mejor producción y para el uso eficiente del agua en sus huertos.

La familia Díaz Mendoza es una de las favorecidas por estos huertos. “Es una bendición de Dios. Estamos muy contentos”, fueron las palabras de don Saúl Díaz al ser consultado y dijo que aproximadamente nueve personas de su grupo familiar se beneficiarán  con ello.

 Por su parte, el Ministro de Relaciones Exteriores dijo sentirse sorprendido de como las familias se han apropiado del proyecto. “Estoy gratamente sorprendido de como las comunidades se han apropiado de estas iniciativas y como están avanzando en la sostenibilidad de los mismos”, dijo durante la visita.

El Proyecto se está ejecutando en los municipios de Cacaopera, Chilanga, Guatajiagua, Lolotiquillo, San Francisco Gotera y San Simón; del departamento  de Morazán. En San Miguel en los municipios de Ciudad Barrios, Lolotique y San Miguel, mientras que en Usulután en los municipios de Berlín, Concepción Batres, Jiquilisco, Jucuapa, Jucuarán y Usulután.

En el marco de este proyecto; también 6,523 familias recibieron un bono a través de una tarjeta dotada con $61.50 mensuales para la compra exclusiva de alimentos en un comercio de la localidad.

Adicionalmente, se orientó a las personas en aspectos como su uso correcto, economía familiar y buenas prácticas de alimentación e higiene. Esto permitió a las y los participantes la selección de sus alimentos y la diversificación de su dieta, y generó un ahorro del 15% en el almacenaje, manejo y distribución de alimentos, que se transfirió a las personas beneficiarias

“Las familias están haciendo buen uso de las tarjetas están comprando leche carne legumbres, realmente cosas que las familias, niños que las abuelas, abuelos necesitan”, mencionó el Coordinador Residente de las Naciones Unidas, Christian Salazar.

Otro aspecto relacionado al proyecto, es la vigilancia nutricional que se ha proporcionado a  15,000 niñas y niños menores de nueve años y la dotación de insumos necesarios a siete hospitales para que se atiendan casos de desnutrición moderada y severa.

“Para nosotros, como Naciones Unidas, es importante señalar que la sequía no solo tienen un impacto profundo en la agricultura del país y las cosechas sino que tiene también un rostro humano”, expresó el Coordinador Residente del Sistema.

Todo este proyecto, se ha hecho con un fuerte espíritu solidario y de colaboración entre las diferentes agencias de Naciones Unidas, los distintos niveles de gobierno: nacional, departamental y local, los socios implementadores, las comunidades y las familias participantes.