Oficina de Emergencias y Resiliencia de la FAO

Conocer las necesidades de los hogares y comerciantes de Nigeria para comprender las dificultades a las que se enfrentan

Los encuestadores son un componente esencial de la respuesta humanitaria, ya que pueden obtener directamente de los hogares información acerca de sus necesidades, contribuyendo así a la toma de decisiones y a la programación.

©FAO

28/09/2023

Durante los últimos 13 años, algunas zonas del noreste de Nigeria han sufrido una prolongada insurgencia. Los estados de Adamawa, Borno y Yobe han sido los más afectados. Más de dos millones de personas han sido desplazadas y las vidas de muchas más se han visto afectadas. Para comprender las repercusiones de estas crisis en los medios de vida y la seguridad alimentaria, los encuestadores, como Deborah Bwala, viajan por la región para realizar entrevistas cara a cara.

Deborah, que nació y creció en el estado de Borno y estudió agricultura en la Universidad de Maiduguri, trabaja para la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) desde 2018. Antes de incorporarse a la FAO, Deborah trabajó como encuestadora en la comunidad de la asistencia humanitaria realizando evaluaciones por todo el estado de Borno.


Encuestadores como Deborah Bwala viajan por Nigeria para evaluar las repercusiones de las crisis en los medios de vida agrícolas mediante entrevistas cara a cara. © FAO

A Deborah le atrajeron las encuestas por su interés en obtener información sobre el terreno y conocer las dificultades a las que se enfrentan los miembros de los hogares a través de sus propios relatos. Realiza entrevistas tanto en la zona de Borno, de donde proviene, como en estados y comunidades vecinos. Esto supone grandes ventajas porque Deborah entiende la cultura de los miembros de los hogares y habla el idioma local. Este conocimiento de primera mano le permite tener “una perspectiva más amplia, más allá de las preguntas que se hacen sobre el terreno”.

Datos en emergencias (DIEM)

Deborah acaba de realizar entrevistas para una evaluación del sistema DIEM-Seguimiento, en el estado de Yobe. El sistema se creó en 2020 para comprender mejor las repercusiones de las crisis en los medios de vida agrícolas de los países que hacen frente a crisis alimentarias. El sistema DIEM-Seguimiento ofrece una imagen actualizada periódicamente y muy accesible de los medios de vida agrícolas y la inseguridad alimentaria mediante la recopilación de datos en más de 25 países. La evaluación en la que participó Deborah se llevó a cabo en los estados de Adamawa, Borno y Yobe y se centró en los comerciantes de insumos agrícolas para comprender el suministro y el acceso a los insumos. Los datos prácticos obtenidos por Deborah y los demás encuestadores servirán de base para las intervenciones de la FAO tanto en contextos de emergencia como en otras situaciones.

Como encuestadora, Deborah tiene que ser adaptable y poder pensar con rapidez. A menudo tiene que “sondear a los encuestados para entender por qué algo se ha convertido en un reto para su negocio”. Deborah también nota las ventajas que tiene como mujer y encuestadora. En el estado de Borno, las mujeres no siempre se sienten a gusto hablando con hombres. Deborah puede realizar entrevistas en hogares encabezados por mujeres con facilidad, asegurándose de que la encuestada se sienta segura y cómoda al abrirse. Por otra parte, algunos hombres no se sienten cómodos hablando con mujeres. A menudo, Deborah tendrá que realizar las entrevistas a través de un intermediario, un reto único al que se enfrentan las encuestadoras en esta parte del mundo.

A medida que la tecnología sigue avanzando, con la introducción de nuevos métodos de recopilación de datos, Deborah espera que las futuras generaciones de trabajadores humanitarios se ciñan a un enfoque integrado. A Deborah le atrae la conexión humana que proporcionan las entrevistas cara a cara porque “puedes leer el lenguaje corporal y verificar algunas de las respuestas observando físicamente a tu alrededor”. Aunque esta conexión humana es necesaria, Deborah recomienda que se introduzca tecnología en el terreno para lograr un equilibrio con el trabajo realizado cara a cara. Trabajar con la FAO la puso en contacto con gente nueva y la ayudó a hacer nuevos amigos. Deborah señala: este trabajo “me ha dado la oportunidad de influir en la vida de otras personas y también ha mejorado mi capacidad de comunicación”.

Pase lo que pase

Cuando los responsables de la toma de decisiones disponen de los datos necesarios, pueden adoptar decisiones beneficiosas para las comunidades a las que presta servicios la FAO. © FAO

Deborah se siente motivada para hacer su trabajo porque se dedica a proporcionar los valiosos datos que recopila. Estos datos “fundamentan la adopción de decisiones y muchos otros aspectos del trabajo que hacemos en la FAO”. Su motivación radica en su interés por obtener información de primera mano y comprender tanto las necesidades de los encuestados como los retos a los que se enfrentan. Es consciente de que, cuando los responsables de la toma de decisiones disponen de los datos necesarios, pueden adoptar decisiones beneficiosas para las comunidades a las que presta servicios la FAO. Dice que esto es “lo que me impulsa a salir al terreno, pase lo que pase”.