La concurrencia de diversos factores que afectan la sustentabilidad del sistema productivo predominantemente agrícola de la región núcleo, tales como la alta proporción del monocultivo de soja, la complejización del manejo agrícola por la aparición de malezas resistentes, las altas tasas de extracción de nutrientes de los suelos, el cambio climático, y consecuentemente las problemáticas relativas al impacto de los sistemas productivos sobre el ambiente, son variables que en conjunto alientan la consideración, por parte de algunos productores agrícolas, de incorporar o reincorporar planteos ganaderos a los sistemas de producción. A este escenario se suma el efecto sobre los precios de la hacienda, provocado por un aumento de la demanda externa de carne, traccionada fundamentalmente por el mercado asiático. Si bien existen distintas alternativas para adoptar, un rasgo común a destacar es el efecto sinérgico aportado por la combinación de la agricultura con la ganadería en sistemas de producción mixtos, que contribuyen a fortalecer el medio ambiente y la producción familiar.