La etapa posterior a la cosecha y de paso el cambio de estación son generalmente el momento en que apicultores ven un aumento en las labores productivas y de comercialización, pero también es importante no descuidar la preparación de las colmenas para entrar a la etapa de invernada, preparando de buena forma las abejas más longevas, especialmente en las zonas donde los periodos de escases de alimento y las condiciones climáticas adversas son prolongadas y no permiten a las abejas desarrollar su funcionamiento normal fuera de la colmena. La proporción de las medidas preventivas y recursos en la medida adecuada son factores importantes que llevan al éxito para tener una buena invernada.