Abril terminó siendo un mes con pocas precipitaciones (casi seco) y mayo está terminando con las mismas características, lo cual significa que se tienen acumulados mensuales de lluvia similares a los históricos, pero un menor número de días lluviosos. Es necesario evaluar para cada cultivo la respuesta a la presencia de lluvias y mayor luminosidad. De otro lado, El Niño es inminente y es muy probable que la temperatura del aire aumente en los próximos meses. Eventos lluviosos de alta intensidad generan problemas sobre la infraestructura vial al interior y exterior de las fincas. Además, durante los siguientes meses se propiciarán condiciones para el incremento de enfermedades y plagas.