Uno de los aspectos que ha evolucionado mucho técnico e industrialmente han sido las instalaciones, referido a diseños y equipamientos – En este marco, la evolución mundial de a robótica, la ingeniería industrial, la ingeniería electrónica, la ingeniería hidráulica, la parición de sensores, la existencia de chips y poder contar con softwares adaptables a la necesidad en cada empresa y bioambiente, han abierto un sin número de variables que bien aplicados acilitan las tareas y tienden a elevar la productividad de la mano con la capacitación del personal y la adaptación del animal. Seguramente podríamos considerar a la actual producción porcina como una producción moderna, en una suerte de etapa intermedia, que sin duda seguirá evolucionando de la mano de la ingeniería genética y tecnológica, así como de la ingeniería nutricional, reproductiva y sanitaria, disciplinas que seguirán aportando conocimientos, no solamente para elevar la producción de carne sino para producir fármacos y órganos utilizables en la medicina humana. Todavía queda mucho por crecer – No obstante, al día de hoy hay una gran variedad de diseños, equipamientos y tecnologías disponibles acorde a la necesidad y capacidad de inversión de cada empresa, como también hay posibilidades de generar tecnologías adaptables al pequeño productor de cerdos en respuestas a situaciones particulares sea de la zona o escala de producción. Al existir agua, tierra, granos y conveniencia de rentabilidad, seguramente seguirá creciendo la producción de cerdos en cada rincón de nuestro país.

Es importante no dejar de mencionar que al tratarse de producir comida y generar renta, se seguirá en la senda de la producción y transformación del cereal en carne. Sin duda en esta evolución tecnológica lo ideal es pensar que debe existir un cambio radical en el perfil del productor y el personal auxiliar, se orienta a un productor empresario, alejado de aquel productor tradicional, clásico y orientado a productores “modernos” amigado al cambio, abierto a la informática y a la adopción de tecnologías de cambio y adaptable a los nuevos procesos tanto productivos como industriales en favor del consumidor en un esquema altamente globalizado donde prima la competitividad, la gestión ambiental, la salud animal y el confort de los rodeos. Un consumidor cada vez más exigente en calidad, confianza, servicios y precios.

La tendencia es la modernización que muchas veces compite con la inclusión de mano de obra. La tendencia es la reducción de las horas hombre, la no dependencia constante del personal y la opción por la autonomía animal y tecnologías de autosustento. También es cierto, que lo que no se invierte en instalaciones confortables y tecnologías de avanzada, se invierte en mano de obra, servicios y salarios. La tendencia es el confort y autonomía de todas las partes sin alterar los índices de producción, respetando la salud del medio ambiente. El presente material es una guía y está orientado a satisfacer consultas y sugerir visiones para el pequeño y mediano productor de cerdos del Norte Argentino, donde tiene mucha importancia la temperatura, la humedad y topografía del terreno, quedando supeditado al asesor técnico de la granja la adopción o modificación de los criterios aquí planteados en respuesta a cada caso en particular.