China es uno de los principales productores de jengibre del mundo: según cifras de 2019, concentra el 42,5 % de la superficie mundial de plantación de jengibre y el 74,5 % de la producción mundial de jengibre. La población de Tongling cultiva desde hace mucho tiempo una especie autóctona: el jengibre blanco. Sobre la base de las diferencias de las características y los entornos de cultivo entre el jengibre y el arroz, la población local ha desarrollado un modelo de plantación ecológico para el cultivo de jengibre blanco. Gracias a ese modelo es posible mejorar la utilización de los recursos hídricos y de la tierra y optimizar la eficacia del control de las enfermedades de las plantas. Se han inventado métodos únicos de cultivo del jengibre, como los “pabellones para conservar las semillas y acelerar la germinación”, las “plantaciones en crestas y parcelas elevadas”, los “cobijos de sombra”, etc. Se ha fomentado una cultura propia del jengibre como, por ejemplo, la plantación de jengibre, la comida de jengibre, los regalos de jengibre, la creencia en el Dios del Jengibre, el Zen del Jengibre, etc. Estos elementos constituyen un sistema particular de patrimonio agrícola: el sistema de cultivo de jengibre blanco de Tongling en la provincia de Anhui.

El registro más antiguo sobre la existencia del jengibre blanco de Tongling se remonta a la dinastía Han occidental (202 a. C. 8 d. C., aproximadamente), es decir, se trata de una plantación con más de 2 000 años de historia. Ya en la dinastía Song del norte (960 1127) prevalecían en la región de Tongling las técnicas de rotación entre jengibre y arroz, jengibre y trigo, y jengibre y hortalizas, así como las técnicas de elaboración de jengibre confitado o cristalizado y de pabellones de jengibre para conservar las semillas y acelerar la germinación. El jengibre de Tongling tuvo su apogeo durante la dinastía Qing (1644 1911), cuando las técnicas de cultivo del jengibre, como los “cobijos de sombra de bamao (Miscanthus floridulus)”, se detallaban en los libros; los productos derivados del jengibre como, entre otros, los caramelos, el vinagre, la salsa y la sal, eran populares en toda China y el sudeste asiático.