El derecho de importación sobre el trigo, que en principio debía dejar de aplicarse el 31 de marzo, ha sido prorrogado hasta el 30 de junio de 2016. El Gobierno de la India había establecido inicialmente un derecho del 10 por ciento para las importaciones en agosto de 2015, que luego aumentó al 25 por ciento en octubre. Pese a la inquietud a causa del impacto de la prolongada sequía sobre la cosecha de trigo de 2016, la decisión fue tomada en vista de las todavía elevadas existencias de trigo en manos del gobierno, en un esfuerzo por proteger el mercado interno y fomentar el consumo de trigo producido en el país. En general, la India no depende de las importaciones para cubrir sus necesidades de consumo, sin embargo, en la campaña comercial 2015/16 (abril/marzo), las importaciones aumentaron notablemente en respuesta a la gran demanda de trigo de calidad, después de que las lluvias torrenciales afectaran a la cosecha de trigo nacional de 2015.