El 30 de diciembre, el Gobierno aprobó nuevas desgravaciones a la exportación de un gran número de productos agrícolas. La cuantía de las deducciones varía en función de la etapa de la cadena productiva, con mayores descuentos para aquellos productos más elaborados o con mayor valor añadido. En el caso de la harina de trigo, las deducciones pasaron del 0 al 3 por ciento, y al 4 por ciento en envases con un peso igual o inferior a 2,5 kg. Para la harina de maíz, las desgravaciones se incrementaron en un 0,5 por ciento, mientras que para el arroz subieron a un 3 por ciento. Las deducciones para la carne de vacuno pasaron del 0 al 2,5/4 por ciento dependiendo de las modalidades de envío, mientras que para los productos lácteos subieron del 1,2 al 4 por ciento. La medida pretende ayudar a las economías rurales, impulsar la producción y promover las exportaciones.