La Mesa Nacional de Restauración del Paisaje Forestal fortalece las capacidades técnicas en la planificación, aplicación y evaluación de prácticas de restauración del paisaje forestal.

Este fortalecimiento de capacidades se realizó a través del IV Curso Nacional Nacional de Restauración del Paisaje Forestal, el cual se realizó en modalidad virtual durante de cinco semanas que concluyó el 13 de noviembre. En esta formación virtual fueron instruidos 50 técnicos de instituciones públicas, organizaciones no gubernamentales, municipalidades, sector privado, organizaciones de productores y academia de Guatemala y algunas regiones de México y Honduras.

Este curso virtual fue estructurado para abordar cinco ejes temáticos principales: políticas públicas aplicables a la restauración forestal; introducción a los conceptos de restauración y degradación forestal; planificación e implementación de la restauración; economía y evaluación de los procesos de restauración; monitoreo, seguimiento y aprendizaje.

Además, durante el desarrollo del curso se realizó una sesión para la presentación de casos exitosos de experiencias de procesos de restauración, las cuales han permitido evidenciar el desarrollo exitoso de la recuperación de la estructura y funcionalidad de las áreas que han sido priorizadas.

Entre las instituciones que formaron parte se encuentra el Instituto Nacional de Bosques (INAB); la Agencia Alemana de Cooperación (GIZ); la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), el World Resources Institute (WRI); la Facultad de Agronomía de la Universidad de San Carlos de Guatemala (FAUSAC); el Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza (CATIE); el Servicio Forestal de los Estados Unidos y Rainforest Alliance (RA).

El IV Curso Nacional de Restauración del Paisaje Forestal se desarrolló con el apoyo técnico y financiero de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Agencia de Cooperación Internacional de Corea (KOICA) a través del proyecto Adaptación de comunidades rurales, a la variabilidad y cambio climático para mejorar su resiliencia y medios de vida, en Guatemala.