FAO en Honduras

Honduras: la FAO y la OEA presentan herramienta de evaluación rápida de bioenergía y seguridad alimentaria

14/08/2014

Tegucigalpa.- La Organización de los Estados Americanos (OEA), la FAO con el apoyo de la Secretaría General de Coordinación del Gobierno la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG), la Secretaría de Desarrollo Económico y la Unidad de Biocombustibles presentaron hoy en Honduras, la Herramienta de Evaluación Rápida de Bioenergía y Seguridad Alimentaria (BEFS RA) por sus siglas en inglés a los productores de bioenergía y autoridades gubernamentales.

La FAO colabora con la OEA que está impulsando las capacidades de los países para abordar el desarrollo sostenible de bioenergía en la región, a través de un entrenamiento en el manejo de la BEFS.

Ericka Félix, Oficial de Recursos Naturales de la FAO, explicó que esta herramienta permite a los países obtener resultados iniciales que contribuye a tomar decisiones en los países que están comenzando a desarrollar sus políticas bioenergéticas para asegurar que estas sean sostenibles y que no tengan impactos negativos en la seguridad alimentaria.

En los últimos años, el tema de la bioenergía se ha convertido en un tema prioritario, producto de la alta volatilidad en los precios del petróleo, el problema del cambio climático en razón de la emisión de gases de efecto invernadero y la necesidad de los países en controlar la dependencia de su matriz energética, en este contexto Honduras también está generando bioenergía, razón por la cual es de suma importancia el uso de esta herramienta para obtener  las indicaciones iniciales de su potencial de bioenergía sostenible, así como de sus oportunidades, riesgos y compromisos asociados.

El aumento de la demanda de bioenergía crea riesgos y oportunidades, por un lado estimula el desarrollo agrícola rural mediante el aumento de la productividad agrícola, la creación de nuevas oportunidades de empleo y generación de ingresos y mejorar el acceso a servicios energéticos modernos, por otro lado, si no se gestiona adecuadamente el desarrollo de la bioenergía moderna puede desencadenar una serie de impactos ambientales y socioeconómicos negativos.

En este contexto, la relación entre la bioenergía y la seguridad alimentaria es un tema complejo y multifacético, que requiere de un planeamiento integrado que permita promover tanto la seguridad alimentaria como la seguridad energética y asegurando que la bioenergía contribuya a un desarrollo sostenible.

El planteamiento BEFS apoya a los países en el diseño y aplicación de políticas y estrategias bioenergéticas sostenibles e incluye seis componentes: evaluación de alcance; diálogo con los interesados y fomento de la capacidad; evaluación de bioenergía sostenible; apoyo a la formulación de políticas; monitoreo de impactos, evaluación y respuestas; y prevención de riesgos, administración y selección de la inversión.

De este modo, se contribuye a garantizar que el desarrollo de la bioenergía fomenta tanto la seguridad alimentaria y energética, y que contribuye al desarrollo agrícola y rural.