Programa Especial para la Seguridad Alimentaria (PESA) Centroamérica

La sociedad centroamericana y su esfuerzo en la reducción del hambre

21/11/2014

Artículo redactado por Carmelo Gallardo, Coordinador Componente Regional de los PESA en Centroamérica y Oficial de Seguridad Alimentaria, Oficina Subregional de FAO para Mesoamérica.

La distinción que realizó la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en 2013 a 38 países en el mundo –entre ellos Honduras, Nicaragua y Panamá- por reducir a la mitad el porcentaje de personas que padecen hambre, ha despertado en la sociedad un proceso de reflexión y discusión sobre la situación de la seguridad alimentaria u nutricional en América Central.

La mayoría de los gobiernos del mundo han suscrito dos compromisos internacionales para reducir el hambre. En el primero, durante la Cumbre Mundial de la Alimentación de 1996, 180 países, incluidos los tres arriba mencionados, se comprometieron a reducir a la mitad el número de personas que padecen hambre, y en el segundo, en el año 2000, como parte de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, 191 países, acordaron reducir a la mitad el porcentaje (no el número) de personas que padecen hambre.

En ambos casos, uno de los criterios utilizados para conocer el avance en la reducción del hambre es el de la subnutrición, elaborado por la FAO sobre la base de datos proporcionados por los mismos países miembros y otros organismos internacionales, y publicado cada año en su informe de “El Estado de la inseguridad alimentaria en el mundo” .

La subnutrición supone un consumo de alimentos insuficiente para satisfacer las necesidades de energía alimentaria de manera continua, y por otro lado la desnutrición es un estado patológico resultante de una dieta deficiente en uno o varios nutrientes esenciales (no sólo energía), o de una mala asimilación de los mismos.

Utilizando el indicador de subnutrición, 38 países del mundo (12 de ellos en América Latina), han reducido a la mitad el porcentaje de personas que padecen hambre a lo largo de las últimas dos décadas. Coincidiendo con la celebración de la Conferencia de la FAO, en el mes de junio esta Organización hizo un reconocimiento especial a estos 38 países entre ellos a Honduras, Nicaragua y Panamá, por haber reducido su prevalencia de subnutrición.

¿Significa esto que en Honduras, Nicaragua y Panamá ya no existe un problema de seguridad alimentaria? Por supuesto que no. Se ha reconocido a estos países por estar cumpliendo con las metas que se ha propuesto como sociedad ante la comunidad internacional. Todos los países de Centroamérica, incluidos los galardonados, deben seguir esforzándose para erradicar completamente el hambre. La seguridad alimentaria no sólo se alcanza con acceso a suficientes calorías, es decir, que no sólo hay que seguir reduciendo el indicador de subnutrición, sino considerar todos los aspectos sociales, económicos y medioambientales que influyen en la disponibilidad, acceso, estabilidad y consumo de los alimentos necesarios de forma permanente para toda la población.

Erradicar el hambre es una tarea de toda la sociedad, no sólo de los Gobiernos, y es de todos los países, no sólo de los que padecen hambre.