"La igualdad de género es un factor central para combatir las desigualdades de la región", declaró la oficial de Asuntos Sociales de la CEPAL, María Nieves Rico, quien aseguró que "ningún país va a poder superar la pobreza" si no logra la equidad entre hombres y mujeres.

Con motivo de la conferencia internacional "En el camino de la igualdad: logros y nuevos desafíos para la región", celebrada en Montevideo, Rico presentó la publicación "Panorama Social de América Latina 2014", que recoge la evolución de la pobreza y la indigencia en la región desde 1990.

En este sentido, la alta funcionaria apuntó un estancamiento en los avances a partir de 2008, tras una década de grandes progresos, gracias a las políticas sociales impulsadas en ese período.

Es más, el informe de la CEPAL refleja que los pobres extremos aumentaron en cinco millones en América Latina y el Caribe y que los diversos gobiernos no supieron aprovechar la situación positiva macroeconómica previa".

Por tanto, determinó que el objetivo actual es consolidar el gasto público social como instrumento de política fiscal que alivie los efectos de los ciclos económicos de decrecimiento.

La región se encuentra "ante una encrucijada", producto de la "desaceleración económica de 2014", por lo que debe diseñar "una nueva generación de políticas sociales intersectoriales asociadas a la inversión social", reza el documento de la CEPAL.

Otro de los problemas clave para frenar la desigualdad regional es trabajar en la inclusión social de carácter laboral de la juventud latinoamericana, que cuentan con los niveles más altos de escolarización de la historia, destacó Rico.

A pesar de que casi el 94 % de los jóvenes cuenta con estudios primarios, aún enfrentan más problemas que los adultos para encontrar un empleo, incidió al respecto la oficial de la CEPAL.

La ministra de Salud Pública de Uruguay, Susana Muñiz, añadió, por su parte, la necesidad de hacer llegar las políticas sociales a la población rural de América Latina.