Cada grupo está formado por alrededor de 30 actores influyentes, procedentes de distintos sectores del gobierno y la sociedad, quienes definen una agenda basada en los contextos nacionales, debates públicos, el espacio de la política y las oportunidades. Los esfuerzos realizados se traducen en propuestas dirigidas a los responsables políticos. Uno de los expertos del FIDA en esta misión, afirmó que los GDR han permitido “acercarse a esta región fundamentalmente de países de renta media y con una importante capacidad propia de movilización de recursos, donde uno de los principales desafíos es poner temas en las agendas de políticas públicas, como el de desarrollo rural y desarrollo territorial”. En ese sentido, agregó que el método de diálogo de participación política ha sido un instrumento muy útil, ya que ha contribuido a mejorar estos asuntos de carácter estructural, que “en general son relegados a una segunda posición, y con los GDR han logrado elevar su nivel su prioridad y convocar a actores que de manera natural no siempre  conversan”.