Centro de inversiones de la FAO

Mejora de la calidad del aceite de oliva, del campo al estante

Mejora de la calidad del aceite de oliva, del campo al estante
06/07/2022

Para afianzarse en un mercado mundial tan concurrido como el del aceite de oliva, es necesario mejorar los estándares de calidad, la productividad –del campo al estante– y el marketing. En estos últimos años, la FAO y el BERD han estado apoyando las industrias del aceite de oliva de Jordania, Marruecos, Túnez, la Ribera Occidental y la Franja de Gaza para conseguir precisamente eso. La Unión Europea aportó financiación para las iniciativas en Jordania, Marruecos y Túnez.

Actividades que van desde cursos sobre mejores prácticas agronómicas, estudios de mercado y desarrollo de las exportaciones hasta el diálogo sobre las políticas, viajes internacionales de estudios y catas de aceites están ayudando a los países a aumentar la eficiencia del sector y a mejorar el perfil de sus aceites de oliva tanto en el ámbito nacional como en el extranjero. Está previsto que esta labor cobre impulso gracias a un nuevo acuerdo firmado entre la Organización y el Consejo Oleícola Internacional en 2021 que formaliza la cooperación de ambos.

En Marruecos, con sus buenas condiciones de cultivo y variedades de aceituna locales como la Picholine marocaine, se ha puesto el foco en mejorar la calidad, el etiquetado y los sistemas de rastreabilidad. La FAO y el BERD han apoyado a Interprolive, la federación interprofesional de la aceituna del país, en diálogos sobre las políticas y mediante cursos sobre técnicas de poda de los olivos y prácticas agronómicas para árboles más sanos y el aumento de la productividad. También se está tratando de aumentar la sensibilización de los consumidores acerca de comprar aceite marroquí de mejor calidad que esté envasado, sellado y etiquetado.

En Túnez, la Organización y el BERD ayudaron a las partes interesadas de la industria del aceite de oliva a preparar una visión, una estrategia y un plan de acción compartidos. Esto es decisivo para alcanzar consensos entre el sector público y el privado en cualquier materia, desde el endurecimiento de las normas de calidad hasta el acceso a nuevos mercados. Túnez tiene un buen potencial para penetrar en los mercados internacionales del aceite de oliva con aceites virgen extra embotellados, con valor añadido y orgánicos. Este país ya es uno de los principales exportadores mundiales de aceite de oliva, pero el producto se ha vendido en su mayor parte a granel. En lo que es una novedad para Túnez, las pequeñas y medianas empresas exportadoras están recibiendo apoyo para conseguir las certificaciones de máximo nivel de inocuidad alimentaria, valiéndose de las normas de calidad e inocuidad alimentaria para promover exportaciones de más valor añadido y abrir nuevos mercados.

La FAO y el BERD han realizado extensos análisis de las respectivas industrias del aceite de oliva de Jordania, la Ribera Occidental y la Franja de Gaza para hallar las limitaciones y las oportunidades. El análisis señala déficits de conocimientos, experiencia y financiación, así como los impactos medioambientales de la producción de aceite de oliva. Esto informará de los tipos de inversión pública y privada y de capacitación necesarios para mejorar el rendimiento y la sostenibilidad de la industria.