FAO en México

Pesca y acuacultura contribuyen en la seguridad alimentaria, reducción de pobreza y erradicación del hambre

06/07/2015

FAO reconoce las acciones del Senado para enfrentar el desafío de legislar a favor de la soberanía alimentaria y combate a la pobreza.

México D.F.- Capacitar y actualizar a legisladores, asesores y personal del Senado, así como a funcionarios públicos, representantes del sector, organizaciones civiles y estudiantes en temas relevantes de la agenda pública para la actividad pesquera y acuícola del país, fue el objetivo del Seminario “Hacia la Pesca y Acuacultura Sustentables”. Contribuyendo en un mecanismo de intercambio de experiencias legislativas y de acuerdos en relación al aumento de la contribución de la pesca y la acuacultura en la erradicación del hambre.

Se calcula que la pesca y la acuicultura constituyen el medio de subsistencia para 540 millones de personas en el mundo, el 8% de la población mundial. Los mares de América Latina y el Caribe suponen una fuente de alimentación sana y una fuente de recursos para miles de familias. La contribución de la acuicultura a la economía regional ha crecido sustancialmente en los últimos 10 años. Da empleo a más de 200,000 personas directamente, y a cerca de 500 mil de manera indirecta.

Fernando Soto Baquero, Representante de la FAO en México, destacó la importancia que el sector tiene mucho que aportar en lo que significa alimentar a 9 600 mil millones de personas que van a habitar esta tierra en el año 2050, son 5 000 mil millones más de  toneladas de alimento que se requieren para alimentar esta población.

“Ahora bien, yo quisiera señalar que aunque hay suficientes alimentos y aunque se está produciendo suficientes alimentos, también hay que considerar que hay sectores de la población que no tienen acceso a estos alimentos, y ahí la FAO ha venido reconociendo al gobierno de México y a las instituciones y a la sociedad mexicana por estar enfrentando el problema que tienen un sector de mexicanas y mexicanos que todavía no logran tener una alimentación adecuada y la FAO ha reconocido los esfuerzos que el gobierno y la sociedad mexicana hacen a través de la Cruzada Nacional contra el Hambre”.

Consideró un éxito importante que aumente el consumo anual de pescados y mariscos en México, en 2.5 kilogramos por habitante, al pasar de 8.9 a 11.4 kilogramos por persona el año.

FAO celebra el compromiso del Senado y del trabajo conjunto con el Ejecutivo y de distintos actores del sector de la pesca y acuacultura para impulsar su desarrollo sostenible. Este compromiso se refleja también en la realización de un primer foro de parlamentarios en el sector pesquero de América Latina que fue realizado en la Cuidad de México el año pasado y que fue liderado por el Senador Salvador López Brito y por la Cámara de Diputados.

El trabajo realizado en el Seminario será un aporte y una contribución a los enormes esfuerzos que el Senado y el Ejecutivo están realizado hacia la sustentabilidad con los recursos pesqueros y acuícolas del país.

Asistieron a dicho evento el presidente nacional de la Confederación Nacional de Cooperativas Pesqueras (CONACOOP), Armando Castro Real, el presidente Nacional de la Cámara Nacional de la Industria Pesquera (CANAINPESCA), Alejandro Flores Oficial Superior de Pesca y Acuicultura de la Oficina Regional de la FAO para América Latina y el Caribe, Fernando Medrano Freeman, y en representación del presidente de la Confederación Mexicana de Confederaciones Pesqueras y Acuícolas (CONMECOOP), Jesús Camacho Osuna, acudió Raúl Leal Félix, entre otros.

Iniciativa Crecimiento Azul

Hoy en día, el sector pesquero genera miles de millones de dólares y desempeña un papel vital en relación con alimentos y nutrición,  empleo,  comercio y bienestar económico.

La finalidad de esta iniciativa consiste en restablecer el potencial de los océanos y humedales mediante la adopción de enfoques responsables y sostenibles para compaginar el crecimiento económico y la seguridad alimentaria con la conservación de los recursos acuáticos. Tiene por objeto crear un entorno favorable para los trabajadores del sector pesquero y acuícola con el fin de que actúen no solo como usuarios de los recursos, sino también como sus administradores.

La pesca y la acuicultura contribuyen de manera notable a la seguridad alimentaria y a los medios de vida de millones de personas. Asimismo, la cadena de valor brinda unos 200 millones de oportunidades de empleo directo e indirecto, desde la recolección hasta la distribución, lo que hace que los medios de vida de alrededor de 880 millones de personas dependan de estos sectores.