FAO en México

La Ciudad de México facilita la donación de alimentos y reduce el desperdicio

17/02/2017

 

  • Una nueva Ley busca satisfacer las necesidades alimentarias de la población menos favorecida, con carencia alimentaria o dificultad para acceder a alimentos.

Ciudad de México, 17 de febrero de 2017. Con el objetivo de promover, orientar y regular donación de alimentos aptas para consumo humano y evitar el desperdicio injustificado de alimentos, fue promulgada la Ley de Donación Altruista de Alimentos.

Con la nueva norma se busca generar una cultura de aprovechamiento y donación altruista de alimentos por medio de esquema de corresponsabilidad en el que  los sectores públicos, sociales y privados sumen esfuerzos con la meta de satisfacer las necesidades alimentarias de la población vulnerable.

El marco regulatorio, una de las primeras iniciativas impulsadas por el recién formado Frente Parlamentario contra el Hambre en la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México, queda prohibido el desperdicio de alimentos y pone sanciones para quienes tiren o destruyan alimentos aptos para el consumo humano.

Será la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESO), la encargada de formular, coordinar y conducir la política general relativa a la nueva legislación, que impulsa la creación y fortalecimiento de Bancos de Alimentos y otorgará estímulos a los donantes a través de la firma de convenios con el Gobierno de la Ciudad.

Durante el evento de promulgación de la Ley, Miguel Ángel Mancera Espinosa, Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, anunció la implementación de un comedor central, en la Central de Abasto, en donde se prevé repartir diariamente mil 800 raciones diarias. “En la Central de Abasto tenemos un gran banco de alimentos. Ahí está demostrado cómo si se puede crear un banco de alimentos, cómo lo podemos operar y cómo desde ahí podemos también atender las necesidades de la Ciudad de México”, expuso.

Por su parte, Fernando Soto Baquero, Representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO),aseguró que redistribuir los excedentes de alimentos inocuos a los necesitados representa la mejor opción para tratar y reducir los residuos de alimentos en las ciudades. “La cantidad de alimentos redistribuidos a organizaciones benéficas siguen siendo una pequeña fracción en el mundo porque hay muchas barreras, para que lleguen a quienes lo necesitan, la Ley promulgada hoy elimina esas barreras”.

El Secretario de Desarrollo Social de la Ciudad de México, José Ramón Amieva Gálvez, afirmó que es necesario romper la inercia de habitabilidad en las ciudades a través de potenciar la alimentación de quienes más lo necesitan. “Si no cambiamos esto, no podremos alcanzar el reto que tiene la Ciudad de que para 2030 ninguna persona tenga hambre en la capital”.