El Director General reafirma el compromiso de la FAO de apoyar la presidencia brasileña del Grupo de los Veinte (G-20) e insta a adoptar medidas en relación con la seguridad alimentaria y el clima

Roma – En un acto de alto nivel organizado por la Delegación Permanente del Brasil ante los organismos de las Naciones Unidas con sede en Roma (OSR) y el movimiento Global Citizen, el Sr. QU Dongyu, Director General de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), ha puesto hoy de manifiesto la necesidad urgente de dar prioridad a la seguridad alimentaria y la acción por el clima en 2024 y ha reafirmado el apoyo de la FAO a la presidencia del G-20, que ocupa actualmente el Brasil.

En su intervención principal, el Sr. QU subrayó la realidad aciaga del hambre mundial y recordó que 735 millones de personas padecieron hambre crónica en 2022. El Director General puso de relieve la interrelación entre los conflictos, los fenómenos climáticos extremos y las crisis económicas y destacó su repercusión desproporcionada en la seguridad alimentaria y la nutrición para la población pobre y vulnerable.

El acto de alto nivel, celebrado en la Embajada del Brasil en Roma, tuvo como anfitriones al Sr. Renato Mosca, Embajador del Brasil ante Italia; la Sra. Carla Carneiro, Embajadora del Brasil ante los OSR, y la Sra. Friederike Roder, Vicepresidenta de la División de Políticas y Promoción Mundiales de Global Citizen.

El acto contó asimismo con la participación de otros líderes de los OSR, a saber, el Sr. Álvaro Lario, Presidente del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola y el Sr. Carl Skau, Director Ejecutivo Adjunto y Jefe de Operaciones del Programa Mundial de Alimentos.

Una mesa redonda de alto nivel se centró en la forma en que las presidencias del Grupo de los Siete (G-7) y del G-20, Italia y el Brasil respectivamente, otorgaban prioridad a la seguridad alimentaria y la adaptación agrícola, en particular mediante la recién anunciada Alianza Mundial del G-20 contra el Hambre y la Pobreza, que se pondrá en marcha en noviembre.

Entre los panelistas se encontraban el Sr. Stefano Gatti, Director General de Cooperación para el Desarrollo y Enviado Especial para la Seguridad Alimentaria del Ministerio de Relaciones Exteriores de Italia, y la Sra. Nosipho Nausca-Jean Jezile, Representante Permanente de Sudáfrica ante los OSR.

“La FAO celebra la sinergia fructífera y la colaboración eficaz con el Gobierno del Brasil y mantiene su compromiso de brindar todo el apoyo técnico y profesional necesario para el éxito del G-20 bajo la presidencia del Brasil”, declaró el Director General de la FAO.

Además de la relación entre la pobreza y el hambre, el Sr. QU observó también la preocupante conexión entre la desigualdad y varias formas de malnutrición, lo que contribuye a una carga triple. Instó a que se ampliaran los programas de protección social y citó al Brasil como ejemplo de buenos resultados por sus transferencias condicionales de efectivo. No obstante, hizo hincapié en la necesidad de innovación en el ámbito de la protección social, sobre todo en respuesta a las perturbaciones climáticas.

Con miras a soluciones a largo plazo, el Director General señaló la necesidad de realizar inversiones en infraestructura, digitalización, innovación y tecnologías, además de prestar una atención crucial al capital humano mediante la mejora de la educación y los servicios de salud.

“Será necesario aumentar de forma significativa y orientar mejor las inversiones dirigidas a transformar los sistemas agroalimentarios mundiales a fin de reducir el hambre, sacar a las personas de la pobreza y fomentar la producción agrícola sostenible”, explicó, y señaló que para transformar los sistemas agroalimentarios se necesitaría una inversión de 4 billones de USD de aquí a 2030 en los países de ingresos medios y bajos.

El Sr. QU recalcó la importancia de aumentar las inversiones para conseguir un sector agrícola más diverso y productivo que fomente alimentos nutritivos y destacó el papel del sector para abordar todas las dimensiones del desarrollo sostenible, incluida la acción por el clima.

El Director General explicó que, aunque los sistemas agroalimentarios eran responsables de cerca del 30 % de las emisiones de gases de efecto invernadero, su transformación podía mejorar su eficiencia y hacerlos más inclusivos y resilientes.

Mencionó el recién presentado Global Roadmap for Achieving SDG2 without breaching the 1.5C threshold (Plan de actuación mundial para alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible 2 [ODS 2] sin superar el umbral de 1,5 °C) como un plan innovador y un paquete concreto de soluciones para contribuir al logro del Hambre Cero y acelerar las medidas contra el cambio climático.

“El plan de actuación podría también servir de catalizador para aumentar la financiación”, declaró.