Se prevé que la inseguridad alimentaria aguda provocada por la crisis actual en el Sudán se agrave en los próximos meses

La FAO necesita urgentemente 95,4 millones de USD para ampliar la respuesta y salvar vidas, permitir el acceso a los alimentos y proteger los medios de subsistencia esenciales

@FAO/Eilaf Abdelbasit

©FAO/Eilaf Abdelbasit

19/06/2023

Roma/Jartum. La actual crisis en el Sudán ha empeorado una situación de inseguridad alimentaria ya de por sí grave y se prevé que el hambre aumente sustancialmente en todo el país a medida que se acerca el usual período de escasez, de junio a septiembre.

 

Para ampliar su respuesta, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) necesita urgentemente 95,4 millones de USD para llegar a 15 millones de personas a través de múltiples intervenciones destinadas a salvar vidas, como el suministro de semillas y equipos agrícolas a los agricultores y la protección y repoblación de los rebaños de los pastores.

 

El plan inmediato de la FAO consiste en ayudar a más de un millón de agricultores vulnerables y sus familias (cinco millones de personas en total) de aquí a finales de julio con semillas de cereales (sorgo y mijo) y gombo para su siembra entre junio y julio de 2023 en los 14 estados del país. Además, desde julio y hasta finales de año, la FAO tiene intención de llegar a 1,3 millones de pastores con servicios e insumos ganaderos destinados a reforzar la seguridad alimentaria y la nutrición de 6,5 millones de personas.

 

La distribución de semillas de emergencia por parte de la Organización, con un total de 9 600 toneladas para los hogares agrícolas más vulnerables en junio y julio, permitirá a los agricultores vulnerables plantar y producir alimentos suficientes (hasta 3 millones de toneladas de cereales) en noviembre y diciembre de 2023 a fin de cubrir las necesidades de cereales de entre 13 y 19 millones de personas.

 

“Estamos haciendo todo lo posible para aprovechar las condiciones de relativa calma en las zonas rurales y la actual temporada de siembra para incrementar rápidamente la producción y disponibilidad local de alimentos, salvar vidas y evitar que más personas caigan en una situación de inseguridad alimentaria aguda”, aseguró el Sr. Adam Yao, Representante interino de la FAO en el Sudán.

 

La FAO mantiene sus operaciones en las oficinas de los 14 estados del país. Las autoridades estatales y los líderes de las comunidades locales, así como 40 asociados en la ejecución nacionales, siguen confirmando su disposición a reanudar las operaciones y apoyar la distribución de semillas de emergencia de la FAO.

 

La situación de la seguridad alimentaria sigue siendo grave

 

En 2022, se estimó que el número de personas que experimentaban situaciones de inseguridad alimentaria aguda en nivel de crisis o superior (fase 3 y superiores de la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases [CIF]) durante el período de escasez ascendía a 11,7 millones de personas. Habida cuenta de los probables efectos en cadena de los desplazamientos, las perturbaciones del comercio y las subidas de los precios de los alimentos y el combustible, el número de personas sujetas a un alto grado de inseguridad alimentaria en el país durante el período de escasez de este año podría superar la cifra del año pasado.

 

Además, según el último análisis de la CIF, se estima que en el período posterior a la cosecha, entre octubre de 2022 y febrero de 2023, casi ocho millones de personas padecían inseguridad alimentaria aguda, una cifra que ya es un 30 % superior en comparación con el mismo período del año anterior.

 

“La crisis actual llega en un momento crítico para millones de personas que dependen de la alimentación y la agricultura”, aseguró el Sr. Rein Paulsen, Director de la Oficina de Emergencias y Resiliencia de la FAO. “Disponemos ahora de una ventana breve pero crucial para apoyar la producción local de alimentos, teniendo en cuenta las amenazas directas a otras formas de asistencia para salvar vidas y las dificultades para garantizar el paso rápido y seguro de bienes humanitarios a través de las fronteras internacionales. Impulsar la producción local de alimentos y salvaguardar los medios de vida no solo reducirá la inseguridad alimentaria y el sufrimiento humano en el país, sino que, en última instancia, disminuirá el probable aumento del número de casos humanitarios en los próximos meses”, explicó.

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