El pescado es una fuente de proteína de alta calidad y nutrientes esenciales que favorece la salud y contribuye a mejorar la condición nutricional de grupos vulnerables, a generar hábitos alimentarios saludables y a disminuir la morbilidad por malnutrición.

Con el objetivo de facilitar el intercambio de experiencias para incentivar el consumo de pescado en el marco de patrones alimentarios saludables, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), realizó el Seminario Virtual “Estrategias de Estimulación del Consumo de Pescado con Enfoque de salud y Nutrición”.

“El perfil nutricional de una amplia gama de especies acuáticas de precio asequible es de alta calidad y puede superar la concentración de micronutrientes esenciales de especies de alto valor comercial, por lo que es recomendable promover el consumo, incrementando con ello la disponibilidad de alimentos de buena calidad y accesibles a todos los estratos de la población”, explicó Alejandro Flores, Oficial de Pesca y Acuicultura de la FAO.

En el encuentro, participaron autoridades nacionales de pesca y acuicultura de países de América Latina y el Caribe, quienes profundizaron sus conocimientos sobre los aportes del pescado y el marisco a la salud.  Asimismo, expositores de Brasil, Honduras, México, Perú y Uruguay, intercambiaron experiencias y buenas prácticas para incentivar el consumo de pescados y mariscos con programas como ‘A comer pescado’ de Perú, ‘Semana do Peixe’ de Brasil, el Programa Omega3-Nutrición para Todos, del Gobierno de Tamaulipas, México, y los programas apoyados por Infopesca en Uruguay.

Además, se presentaron los resultados de un programa piloto para la inclusión del pescado en el programa de alimentación escolar de Honduras, que se implementa con asistencia de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura.

“Promover la inclusión del pescado en las políticas y programas de alimentación escolar permite un mejoramiento de la condición nutricional de los niños y niñas en edad escolar y la adopción de hábitos alimentarios saludables que se transmiten a las familias”, agregó Alejandro Flores.

El impulso al consumo de pescado debe abordarse de forma balanceada, previendo que el crecimiento de la demanda no supere la capacidad de incremento, en igual o mayor proporción, que la oferta local o nacional, para atenderla y con participación de los actores locales, por lo que demanda enmarcar este proceso en la cultura local.

Del mismo modo, se abordaron algunas alternativas para el aprovechamiento del pescado, empleando tecnologías de bajo costo ya disponibles, para la plena utilización de las porciones que hoy son consideradas desechos y que permitirían reducir las pérdidas y desperdicios en el sistema alimentario de la pesca y la acuicultura.

Este encuentro atiende las prioridades establecidas por la 36º Conferencia Regional de la FAO, relacionadas con la necesidad de promover dietas más saludables, a partir de sistemas alimentarios inclusivos.