FAO en Panamá

FAO y la Cooperación Belga promueven el fortalecimiento de la resiliencia en el Corredor Seco Centroamericano

13/05/2016
  • El programa FAO-Bélgica trabajará en la protección, recuperación y diversificación de los medios de vida basados en la agricultura, así como en mecanismos financieros comunitarios de transferencia de riesgo para agricultores familiares, como los planes mutuos de contingencia.
  • El uso sostenible de los recursos naturales, la adaptación al cambio climático y la gestión de riesgo de desastres es una de las prioridades de FAO en América Latina para erradicar el hambre y la pobreza.

Panamá, 15 de mayo de 2016. – La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Cooperación Belga darán apoyo inmediato a los agricultores familiares del Corredor Seco Centroamericano para proteger, recuperar y diversificar los modos de vida que dependen de la agricultura y los activos para la seguridad alimentaria.

El Corredor Seco está constituido por la eco-región de los bosques tropicales secos de El Salvador, Guatemala y Honduras hacia la costa del Pacífico.

Esta área se ve afectada frecuentemente por amenazas naturales, especialmente por sequías recurrentes exacerbadas recientemente por los efectos del cambio climático y el fenómeno de El Niño que se vive desde abril del 2014 y durará hasta junio del 2016.

La producción de granos básicos por parte de la agricultura familiar, que constituye la fuente de alimento y recursos de casi el 80% de los hogares rurales (cerca de 4.5 millones de personas) en esta región de Centroamérica, se ha visto seriamente afectada por la sequía. Los medios de vida rurales también sufren el impacto de la reducción de los empleos en la producción de café, debido a los efectos del brote de la roya del café desde 2013. Además, un gran número de agricultores ha sufrido la pérdida parcial o total de sus cultivos desde el 2014 y 2 millones de hogares necesitan asistencia debido a que padecen inseguridad alimentaria severa.

El programa FAO-Bélgica, en coordinación con los gobiernos de los países de la región, dará apoyo inmediato para proteger, recuperar y diversificar los medios de vida dependientes de la agricultura y los activos para la seguridad alimentaria, claves para evitar la dependencia de asistencia externa a largo plazo y para promover la autonomía, dignidad y resiliencia.

El programa apoyará directamente a 4,000 hogares rurales en El Salvador y Guatemala al brindarles insumos, tecnologías y apoyo técnico agrícola de alta calidad para aumentar rápidamente el acceso y la disponibilidad de alimentos de estas familias, al reducir las estrategias negativas de enfrentamiento y al prevenir daños posteriores y pérdidas irreversibles en sus medios de vida.

Las asociaciones de agricultores recibirán ayuda con el establecimiento de los “Fondos Mutuos de Contingencia”, que son un mecanismo innovador de financiamiento comunitario ya probado por FAO en Centroamérica, para incrementar la resiliencia y brindar apoyo rápido a familias vulnerables en caso de crisis económicas o agroclimáticas repentinas.

La metodología de este programa de FAO está basada en la prueba y evaluación de prácticas de resiliencia buenas y replicables, que las instituciones locales pueden ampliar rápidamente. Un componente importante del proyecto es el intercambio de experiencias entre las instituciones de Centroamérica, para promover lecciones aprendidas y la cooperación Sur-Sur.

Uso sostenible de recursos naturales, adaptación al cambio climático y gestión de riesgo de desastres

Durante la Conferencia Regional, la FAO y los países de América Latina establecieron como una prioridad regional el uso sostenible de los recursos naturales, la adaptación al cambio climático y la gestión de riesgo de desastres para alcanzar la meta de erradicar el hambre y la pobreza.

La FAO – en colaboración con sus aliados y contrapartes – promoverá acciones para apoyar la transición del sector agrícola de la región hacia el desarrollo sostenible y el uso sostenible de los recursos naturales y la agricultura climáticamente inteligente.