Este espacio de intercambio aportó posibles lineamientos para la construcción de acciones publicas y privadas vinculadas a la inserción laboral del sector joven.

El Primer Encuentro Nacional reunió a unos 80 jóvenes rurales para debatir sobre su situación y proponer programas de trabajo interinstitucionales dirigidos a lograr la inserción laboral y el arraigo en el medio rural.

De acuerdo a cifras del Fondo de Población de las Naciones Unidas -  UNFPA*, el número de personas jóvenes en el Paraguay alcanza actualmente cifras nunca vistas antes: 56% de la población tiene menos de 30 años.

Paraguay está pasando por una oportunidad única e irrepetible, denominada “bono demográfico”, en el que el porcentaje de población en edad de trabajar y producir es mucho mayor al porcentaje de población que es considerada dependiente (niños y niñas, adultos mayores).  

En este sentido, Marcos Medina, viceministro de Ganadería del Ministerio de Agricultura y Ganadería consideró que la participación de la juventud rural es fundamental para reducir la pobreza y el desarrollo rural del país. “A Paraguay le pertenece un destino de prosperidad y está en manos de los jóvenes”, señaló el viceministro.

Durante las jornadas del Encuentro, los líderes juveniles de ocho departamentos del país analizaron temas referentes a la educación, la pobreza, el desarrollo humano y social en pos de su inserción como ciudadanos productivos en sus propios territorios.

Rolf Hackbart, Representante Permanente de la FAO en Paraguay afirmó que es importante implementar políticas y programas que fomenten la creación de oportunidades de empleo agrícola y no agrícola decente  para ellos.

“Comprender a los jóvenes como sujetos de derecho implica de modo extensivo, el derecho a la propia voz, al reconocimiento, a participar, a ser parte en la toma de decisiones”, finalizó el Representante de la FAO en Paraguay. 

Cuando las posibilidades de trabajo en el medio rural son escasas o no generan suficiente ingreso, el trabajo no se constituye en un vehículo para el empoderamiento ni para sostener los medios de vida.

Para paliar esta situación es necesario crear condiciones que permitan a las poblaciones rurales, especialmente a los jóvenes, permanecer en sus hogares cuando sientan que es seguro hacerlo y tener medios de vida más resilientes.

“Organización, participación y políticas públicas van de la mano”, enfatizó Sara, estudiante agrícola y participante del Encuentro.

Jóvenes actores claves para el desarrollo rural

Este Primer Encuentro propiciado por la Mesa de Emprendedurismo Juvenil Rural, con el apoyo de la FAO y del IICA, buscó motivar la participación, el espíritu crítico y la expresión de los jóvenes rurales en forma positiva, dinámica y respetuosa para lograr consensuar propuestas de acción. 

Asimismo, los jóvenes rurales trabajaron en la propuesta de alternativas de programas encaminados a lograr una mejor inserción de los jóvenes en el contexto socio-productivo rural; de tal manera a instalar la temática en el sector público y sentar las bases para la elaboración de políticas públicas que los beneficien a futuro.

La FAO apoya a la Mesa de Emprendedurismo Juvenil Rural para  institucionalizar acciones públicas y privadas vinculadas a la inserción laboral de los jóvenes rurales y el fortalecimiento de espacios para el desarrollo de políticas e instrumentos para este sector de la población. 

En este contexto, se realizaron 3 talleres regionales y propició un espacio de intercambio de experiencias de jóvenes rurales de la región.