El sobrepeso y la  obesidad han aumentado a lo largo de América Latina y el Caribe, salvo Haití, Paraguay y Nicaragua presentan los índices más bajos de la región.

América Latina y el Caribe registraron un preocupante aumento del sobrepeso, un problema que afecta a casi el 60 por ciento de los habitantes de la región, lo que equivale a unas 360 millones de personas.

A excepción de Haití (38,5 %), Paraguay (48,5 %) y Nicaragua (49,4 %) que presentan los marcadores más bajos en comparación con el resto de los países de la región.

Sin embargo, Paraguay lidera con Barbados y Argentina, el mayor porcentaje de sobrepeso en menores de 5 años. La tendencia del sobrepeso y la obesidad infantil es un problema que afecta al 7,2% (3,9 millones), de los cuales 2,5 millones de niños se encuentran en Sudamérica.

Estos datos fueron presentados en el informe Panorama de la Seguridad Alimentaria y Nutricional en América Latina y el Caribe, difundido por la FAO y la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

La obesidad, en tanto, afecta a 140 millones de personas, el 23% de la población latinoamericana, donde las mayores tasas se observan en países del Caribe: Bahamas (36,2%), Barbados (31,3%), Trinidad y Tobago (31,1%).

El informe evidencia que el aumento desproporcionado de la obesidad afecta principalmente a las mujeres, superando por 10 puntos porcentuales a los hombres.

La región ha logrado reducir considerablemente el hambre y hoy sólo un 5,5% de la población vive subalimentada, siendo el Caribe la subregión con la mayor prevalencia (19,8 %), en gran parte debido al hecho que Haití posee la prevalencia de subalimentación más alta del planeta: 53,4%.

A pesar del avance, actualmente 6,1 millones de niños aún viven con desnutrición crónica: 3,3 millones en Sudamérica, 2,6 millones en Centroamérica y 200 mil del Caribe. 700 mil niños y niñas sufren desnutrición aguda, el 1,3% de los menores de 5 años.

Según la Representante Regional de la FAO, Eve Crowley, “América Latina y el Caribe debe enfrentar todas las formas del hambre y la malnutrición para poder cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible, vinculando seguridad alimentaria, sostenibilidad, agricultura, nutrición y salud.”

La clave para avanzar

Uno de los factores que explican el aumento de la obesidad y el sobrepeso es el cambio en los patrones de alimentación en la región, se redujo el consumo de preparaciones tradicionales, lo que provocó un mayor consumo de productos ultra procesados.

La FAO y la OPS llaman a promover sistemas alimentarios saludables y sostenibles que liguen agricultura, alimentación y nutrición y salud. Para ello, los Estados deben fomentar la producción sostenible de alimentos frescos, seguros y nutritivos, asegurando su oferta, diversidad y el acceso a los mismos, especialmente para los sectores más vulnerables. Esto debe ser complementado con educación nutricional y advertencias para los consumidores sobre la composición nutricional de alimentos altos en azúcar, grasas y sal.