El Ministerio de la Niñez y la Adolescencia (MINNA) culminó el curso virtual de prevención de la violencia y protección en el contexto de la pandemia. El curso se desarrolló en el marco del Proyecto "Paraguay protege a mujeres, niñas, niños y adolescente contra la violencia basada en género, por la emergencia sanitaria", con el financiamiento del Fondo Global del PNUD para respuesta rápida a la crisis por COVID-19.

El proyecto fue ejecutado en un esfuerzo conjunto entre el Programa de la Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), la Organización Panamericana/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), y el Fondo de las Naciones Unidas para el Ambiente (PNUMA).

Los módulos abordados en el curso, que tuvo una duración de siete semanas, fueron: i) normas, esferas y protección de la infancia en la respuesta al coronavirus, ii) mecanismos, protocolos y rutas de intervención para la prevención y atención a la violencia, y iii) salud mental y apoyo psicosocial. Con el curso se buscó asegurar la continuidad y calidad de los servicios provistos por el MINNA en materia de protección contra la violencia de la niñez, la adolescencia y la basada en el género.

“El trabajo articulado hizo que todos seamos responsables en la reducción de los abusos contra los derechos de niños, niñas y adolescentes”, expresó Teresa Martínez, Ministra de la Niñez y Adolescencia durante el cierre del curso virtual. “Mi agradecimiento a todas las agencias de Naciones Unidas por el esfuerzo conjunto. El MINNA se sintió acompañado durante todo este proceso, especialmente en un momento tan difícil como lo es esta pandemia. Este es el camino correcto para ir logrando, poco a poco, que los derechos de niñas, niños y adolescentes sean protegidos y de que vayamos más allá del discurso”, agregó.

Mirka Hraste, quien tuvo a cargo el desarrollo de la capacitación destacó el éxito del trabajo conjunto para el fortalecimiento de las instancias de articulación en la respuesta humanitaria en contextos de emergencia. “Las sesiones virtuales contaron con asignaciones en línea y foros de discusión. Hoy, los participantes cuentan con un documento de estudio de 17 casos que reúne conocimientos teóricos y que servirán de insumo y guía para el día a día de sus trabajos”, indicó.

En ese sentido, Laura Aquino y Wilfrido Vera, participantes del curso, resaltaron la importancia de la información obtenida en las sesiones, ya que los datos permitieron una reflexión y análisis sobre diferentes problemáticas, que posteriormente servirán de ejemplos para la resolución de casos.

Por su parte, Alfonso Fernandez, Representante Residente Adjunto de PNUD en Paraguay, agradeció la confianza del MINNA en el Sistema de Naciones Unidas y resaltó que la capacitación es la primera línea de defensa para mejorar la aplicación de procedimientos para mejores abordajes de los casos recibidos y brindar mejor respuesta. “Detrás de las cifras de violencia existen personas, niñas, niños, adolescentes y mujeres que tienen situaciones muy concretas de sufrimiento profundo, que dejan cicatrices para su desarrollo personal y para los siguientes pasos en su vida”, enfatizó.

Rocío Galiano, Representante Nacional de UNFPA, destacó la importancia de la implementación de acciones estratégicas para mitigar los casos de abusos que aumentaron durante la pandemia, teniendo en cuenta que, según datos del UNFPA, el 85% de los casos de violencia cometidos tuvieron lugar en el entorno familiar provocando consecuencias devastadoras y pérdida de oportunidades.

Continuando con el evento de cierre del curso virtual, Jorge Meza, Representante de la FAO, aprovechó la ocasión para resaltar que el desarrollo rural global no se basa únicamente en la producción de alimentos, sino que también debe sentar las bases para la protección y la igualdad de género. “Hoy, más que nunca, debemos preocuparnos por eso. Y trabajar la educación como pilar fundamental. Con esta pandemia aprendimos lo importante que es transformar el sector rural apuntando al fortalecimiento de los sistemas de información y la transferencia de conocimiento a través de la conectividad, para que los sectores más vulnerables también conozcan otra realidad que hoy desconocen”, agregó.

Finalmente, Rafael Obregón, Representante de UNICEF, recordó que el fortalecimiento de competencias y capacidades de equipos son prioridad para el MINNA, por lo que la presencia y acompañamiento de la ONU para dar cumplimiento a ese objetivo es fundamental. “Estos instrumentos y herramientas deben impactar de forma positiva en el trabajo a nivel local y garantizar su llegada a la comunidad, involucrando a las familias y vecinos porque estos procesos requieren un abordaje integral”, concluyó.

Los datos estadísticos corroboran el aumento de casos de violencia doméstica: en marzo de 2019, el Ministerio de la Mujer reportó 417 llamadas denunciando agresiones al número de atención a violencia de mujeres (SOS Mujer 137); en marzo de 2020, cuando inició la cuarentena obligatoria, la cantidad de llamadas de auxilio escaló a 626, y solo en la primera quincena de abril se reportaron 325 casos. Al día de hoy, estos números siguen creciendo. Mientras en agosto de 2019 se reportaron 235 llamadas, en agosto de 2020 la cantidad de llamadas de auxilio ascendió a 428.