Expertos de FAO, INIA y agricultores algodoneros intercambiaron experiencias a fin de fortalecer la cadena productiva del algodón y mejorar la competitividad del sector peruano.

Chincha – FAO e INIA llevaron a cabo un primer día de campo con agricultores y expertos del sector algodonero en la unidad técnica demostrativa (UTD) de la Estación Experimental Agraria del INIA en Chincha. La actividad se realizó en el marco del proyecto regional “Apoyo al fortalecimiento del sector algodonero peruano mediante la mejora de la competitividad de los sistemas de producción de la agricultura familiar” con el fin de capacitar a productores algodoneros y proveedores de asistencia técnica (PAT).

Este proyecto busca contribuir a elevar los niveles de productividad y a elevar los ingresos de los pequeños productores de algodón.

En el marco de este proyecto que durará tres años, se están organizando cuatro días de campo con los agricultores algodonados en Chincha, Pisco, Lambayeque y Piura.

En el primer día de campo en Chincha participaron más de 50 agricultores algodoneros invitados a compartir sus propias experiencias sobre los desafíos y la problemática del sector. Durante el taller los agricultores buscaron resolver problemas a fin de desarrollar capacidades en temas relacionados con el manejo de suelos compactados, el mejoramiento del riego de machaco y el nivel de fertilización, y el uso de semilla certificada. Los agricultores discutieron estas temáticas con expertos del Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA) en temas de algodón, riego tecnificado, certificación de semilla y fertilización.

“El objetivo de este día ha sido sensibilizar a los pequeños productores de algodón. Les damos herramientas para que ellos mismos, con su experiencia, reconozcan los problemas y planteen soluciones eficientes y realizables”, explicó Karina Soledad Zuñiga Sarango, Ingeniera Agrónoma del INIA, durante este primer día de campo.

Eduardo, agricultor algodonero de la zona de intervención, agradeció la organización de este primer día de campo y reconoció la importancia de generar estos espacios de trabajo especializado. “Nosotros tenemos el mejor algodón del mundo, y no debemos dejar que se pierda este recurso que tiene el Perú. Hoy, hemos podido compartir conocimientos e intercambiar experiencias para mejorar y ser más productivos. Por ejemplo, hemos visto cómo aprovechar mejor el agua porque aquí no hay la cantidad necesaria de agua, el recurso hídrico es muy poco, y es un reto saber aprovecharlo bien”.

Eduardo destacó también la importancia de “no solo coordinar con los agricultores sino también con quienes nos compran nuestros productos”. En este sentido, la FAO busca conectar a los productores con las empresas que compran el algodón para fortalecer la cadena productiva. La FAO está desarrollando instrumentos para orientar las políticas, estrategias y acciones gubernamentales de apoyo a la competitividad de los pequeños productores algodoneros.

María Elena Rojas, Representante Asistente de la FAO, destacó la importancia del sector en el Perú y la necesidad de dar capacitación y  asistencia técnica a los productores de algodón para mejorar y dar más impulso a este producto. “FAO acompaña el proceso, facilita las actividades y apoya al gobierno a fin de poder mejorar la producción local”, comentó María Elena Rojas.

Sobre el proyecto

En el Perú se cultiva algodón desde hace más de 3000 años. Sin embargo, el área de cultivo se ha reducido drásticamente de 275,000 hectáreas en 1972 a poco menos de 25,000 en el 2015. Esta reducción obedece a la pérdida de competitividad del algodón peruano, frente a la producción en otros países y a la concurrencia de otras fibras de origen sintético, así como a la competencia con otros cultivos más rentables.

Esta actividad es parte de las actividades del proyecto llevado a cabo por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO), el Gobierno de Brasil, representado por la Agencia Brasileña de Cooperación (ABC) y el Gobierno de Perú.