Entramos en 2023 conscientes del hecho de que nuestro mundo todavía enfrenta múltiples desafíos y peligros. Sin embargo, tenemos razones para ser cautelosamente optimistas, e incluso para celebrar. Aunque la pandemia de COVID-19 aún persiste y todavía representa importantes amenazas económicas y para la salud, hay motivos para la esperanza. Aunque muchos lugares están y continúan estando asediados por tragedias, conflictos, pérdidas y desigualdades, y los impactos de la pérdida de biodiversidad y los desastres climáticos aún abundan, hay motivos para la esperanza.

Los últimos dos años se han sentido como una realidad virtual, donde la ciencia ficción se convirtió en vida "real" y la interacción humana solo fue posible desde la seguridad de nuestras burbujas de aislamiento a través de las pantallas de nuestras computadoras. Y, sin embargo, 2022 también será recordado por el regreso gradual de la humanidad al mundo real y el reinicio de las interacciones en persona.

Para el Tratado Internacional, el retorno a una relativa normalidad culminó en la novena reunión del Órgano Rector (GB-9)^[1] del Tratado Internacional, que fue gentilmente acogida por el Gobierno de la India en Nueva Delhi, y reunió a más de 600 participantes, en su mayoría en persona.

La novena reunión del Órgano Rector concluyó con una serie de resultados dignos de mención, incluido un acuerdo unánime sobre el camino a seguir en cuestiones clave del Tratado, como reiniciar las discusiones sobre la mejora del Sistema multilateral de acceso y distribución de los beneficios (SML), el mayor desarrollo del Sistema mundial de información (GLIS), la realización de los Derechos de los agricultores, y la continuación del trabajo en estrecha colaboración con el Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB), particularmente en relación con el Marco mundial de la diversidad biológica, que fue adoptado posteriormente por la 15ª Conferencia de las Partes^[2] en diciembre de 2022, y sobre información digital sobre secuencias.

De hecho, 2023 promete ser excepcionalmente ocupado con la decisión de convocar la próxima sesión del Órgano rector (GB-10), a mediados de noviembre de 2023, para restablecer el ciclo normal de dos años del Órgano rector y volver a alinearlo con los ciclos regulares de la Conferencia de la FAO.

El personal de la Secretaría ya está ocupado con el plan de trabajo anual y la planificación de varias reuniones y actividades relacionadas, incluido el Comité permanente sobre la Estrategia de financiación, el Grupo de trabajo sobre la mejora del Sistema multilateral, la finalización del quinto ciclo del Fondo de distribución de beneficios (BSF-5), el Comité técnico especial sobre la conservación y la utilización sostenible de los recursos fitogenéticos para la alimentación y la agricultura, el Comité de Verificación de la Observancia, el Comité asesor científico del Sistema mundial de información (además del Simposio mundial sobre los derechos de los agricultores en India y, por supuesto, los preparativos para la décima reunión del Órgano Rector (GB-10).

Estamos aquí, trabajando y deseando interactuar con ustedes, nuestra comunidad de Tratados Internacionales, por el bien común de todos en lo que esperamos sea un nuevo año productivo de guardar, compartir y cuidar las semillas y otros materiales vegetales que alimentan el mundo.

Le saluda atentamente,

Kent