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Bioinsumos: Trazando el futuro de la agricultura sostenible en América Latina y el Caribe

24/05/2023

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), a través de su Centro de Inversiones y en colaboración con su Oficina Regional para América Latina y el Caribe, está impulsando, junto con sus socios estratégicos, un intercambio de conocimientos sobre el uso y el potencial de los bioinsumos en la región.

Con ello espera responder, desde una mirada integral, a las demandas de los gobiernos, productores agrícolas y empresas en un área de inversiones emergente con alto potencial de impacto en la región.

Esta iniciativa se suma a los esfuerzos de la FAO por promover sistemas agroalimentarios sostenibles, que sean capaces de alimentar a la creciente población mundial sin comprometer la salud del planeta. La FAO ha marcado la sostenibilidad como prioritaria en su agenda, y este estudio espera aportar recomendaciones específicas para avanzar en este camino.

El papel de los bioinsumos en la sostenibilidad agrícola

Los bioinsumos son componentes cruciales en la transición hacia sistemas agroalimentarios sostenibles. Al invertir en ellos, se logra una contribución significativa a los enfoques estratégicos prioritarios para el desarrollo sostenible a nivel global, como los Objetivos de Desarrollo Sostenible, las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC, por su sigla en inglés), el Convenio sobre la Diversidad Biológica y el plan de acción "Una sola salud". Además, la adopción de bioinsumos genera beneficios directos e indirectos en materia ambiental, productiva y socioeconómica.

En términos específicos, los bioinsumos pueden contribuir a la reducción de la dependencia agrícola de los agroquímicos sintéticos, bajar los costos de insumos en un contexto de precios altos y volátiles, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y la contaminación del agua y el suelo, aumentar la biodiversidad y la resistencia de los sistemas agrícolas al cambio climático. Además, puede generar beneficios económicos al abrir nuevas oportunidades de mercado para los productores agrícolas y mejorar la calidad y la seguridad alimentarias.

Desafíos y riesgos

Sin embargo, la adopción de bioinsumos no está exenta de retos. Los productores agrícolas aún perciben la reducción de la productividad y la contaminación con organismos perjudiciales como riesgos principales. Además, existen limitantes como el relativo desconocimiento sobre tecnologías o prácticas con insumos biológicos, así como la falta de asistencia técnica específica.

Uno de los principales obstáculos para la adopción de bioinsumos es la falta de información para los productores. Para superar este obstáculo se hace necesario invertir en su capacitación, abriendo la puerta a la transición hacia sistemas agroalimentarios más sostenibles. Con ello se abriría la puerta a la generación de información basada en evidencias, que arroje luz sobre la eficacia de estos productos.

La inversión pública y la reducción de riesgos de adopción

Para superar estos desafíos y limitantes son necesarias medidas como la inversión en asistencia técnica adecuada, el fortalecimiento de organizaciones de productores y el establecimiento de políticas públicas que incentiven y faciliten la transición hacia prácticas agrícolas más sostenibles. En este sentido, el papel de la inversión pública resulta crucial, ya que puede contribuir a reducir los riesgos asociados a la adopción de bioinsumos y facilitar el acceso a estos por parte de los productores.

Además, se hace necesario construir y fortalecer cadenas de valor de bioinsumos que sean más inclusivas y equitativas, que permitan a los pequeños productores acceder a estos productos a precios asequibles, y que promuevan la distribución equitativa de los beneficios que generen. La FAO está trabajando para facilitar la conexión entre los productores y los mercados, para promover modelos de negocio inclusivos y sostenibles e incentivar el intercambio de conocimientos en esta área emergente.

Un llamado a la acción a nivel regional

Esta investigación es también un llamado a la acción para los gobiernos, productores y empresas de América Latina y el Caribe. La región tiene un enorme potencial para liderar la transición hacia sistemas agroalimentarios sostenibles, en buena parte gracias a su biodiversidad y a sus tradiciones agrícolas. Sin embargo, para aprovechar este potencial, se hace necesaria una acción coordinada y un compromiso firme de todas las partes implicadas.

En este sentido, se espera que se activen políticas públicas que promuevan la adopción y producción de bioinsumos, instando a los productores a incorporar prácticas agrícolas más sustentables.

Pero es importante no limitarse a ello, y trabajar en abordajes integrales que  promuevan también el crecimiento y la diversificación de la oferta, que fortalezcan las capacidades de investigación y desarrollo de los institutos nacionales de tecnología agropecuaria, financien esfuerzos privados de desarrollo tecnológico y escalamiento productivo, y contemplen la adecuación de los marcos regulatorios para la producción y comercialización de bioinsumos, incluyendo un control inteligente de la producción para autoconsumo, entre otros.

Próximos pasos y expectativas

Los hallazgos no solo resaltarán el potencial de los bioinsumos para mejorar la productividad y sostenibilidad de la agricultura en la región, sino que también supondrán una hoja de ruta detallada para aprovechar las oportunidades de inversión en este ámbito. 

Dicha hoja de ruta también podrá incluir recomendaciones prácticas y específicas para gobiernos, productores agrícolas y empresas. Recomendaciones que favorezcan la incorporación progresiva de este tema en las agendas de desarrollo agrícola de la región, y contribuyan con ello a orientar el diseño de sus políticas.

Los bioinsumos representan una oportunidad para apuntalar la cooperación sur-sur en cuestiones regulatorias y de investigación y desarrollo, impactando en el comercio intraregional de insumos agrícolas y sentando las bases para unos sistemas agroalimentarios más resistentes y sostenibles para el futuro.