Centro de inversiones de la FAO

¿Cómo están respondiendo los gobiernos locales a la pandemia de COVID-19?

Durante esta emergencia de salud, Lo Valledor, el principal mercado mayorista de Chile, continúa brindando al público todas las medidas de protección para sus colaboradores y la comunidad.
29/04/2020

James Tefft, Economista Principal del Centro de Inversiones de la FAO, habla sobre el liderazgo de gobernadores, alcaldes y otros funcionarios locales para mantener el funcionamiento de los sistemas alimentarios mientras dura la pandemia del COVID-19.

¿Cuáles son los mayores desafíos para los sistemas alimentarios?

La naturaleza de la pandemia está dando lugar a nuevos desafíos para los participantes del sistema alimentario en todos los niveles. Vemos interrupciones en las cadenas de suministro de alimentos y en el área de logística, cambios rápidos en los patrones alimentarios de los consumidores, se necesitan más medidas de seguridad para los trabajadores. Hay una necesidad de redes de seguridad públicas, privadas y comunitarias más fuertes para alimentar al creciente número de personas que han perdido empleos o ingresos. En muchos países de bajos ingresos, los hogares pobres gastan hasta el 70 por ciento de lo que ganan en alimentos.

¿Cómo están respondiendo los funcionarios locales?

Los funcionarios locales tienen un papel fundamental que desempeñar en la adaptación y apoyo a los sistemas alimentarios para cumplir con las directivas de salud derivadas del COVID-19 y, al mismo tiempo, garantizar la seguridad alimentaria de la ciudadanía. 

Los gobernadores, alcaldes y autoridades locales están cerca de las poblaciones a las que sirven. Comprenden sus necesidades. Después del cierre de escuelas en la República de Corea, junto al innovador Programa Ecológico de Comida Escolar Gratuita, numerosos gobernadores y alcaldes se volcaron en las redes sociales. Trabajaron con agencias de promoción agroalimentaria y colaboraron con asociaciones de productores y compañías de alimentos para adaptar los planes de comercialización, o facilitar la venta directa de excedentes de patatas, frutas frescas, verduras y pescado.

En Italia el gobierno local trabajó con agricultores y empresas alimentarias para abordar cuestiones de vivienda y salud de los trabajadores migrantes, que son necesarios para cosechar frutas y verduras. En América del Norte y Europa, los funcionarios del gobierno local han ayudado a bancos de alimentos, cocinas comunitarias y a la agricultura de comunidad a responder a la gran demanda de sus alimentos.

Los grupos locales de la industria alimentaria dentro del sector privado, las asociaciones de productores y participantes del sector informal de la alimentación, las organizaciones de la sociedad civil y grupos ciudadanos están desempeñando papeles igualmente importantes para garantizar el funcionamiento de las cadenas de suministro. Se están asegurando de que los trabajadores estén protegidos y se llegue a las poblaciones vulnerables. Los residentes de los bloques de apartamentos en China e Italia, por ejemplo, usan aplicaciones de chat grupal para compras conjuntas de alimentos y entregas espaciadas a domicilio.

¿Qué pasa con los mercados de alimentos?

El funcionamiento de los mercados de alimentos es esencial para satisfacer las necesidades alimentarias de las poblaciones locales, proporcionando empleos e ingresos fiscales. Los gobiernos locales de la provincia china de Hubei trabajaron con funcionarios del mercado mayorista de alimentos en el desarrollo de medidas que garanticen la seguridad de los trabajadores, transportistas, operaciones mercantiles y suministros locales de comida.

En India, las asambleas tradicionales del gobierno local y los funcionarios de sanidad y del mercado agroalimentario trabajaron con los funcionarios estatales de agricultura para desarrollar medidas de contención, y así mantener el funcionamiento de la agricultura y los mercados. Pintaron los suelos en espacios comerciales para garantizar la separación de seguridad, establecieron horarios comerciales, emitieron pases electrónicos a comerciantes, trabajadores y transportistas del mercado, controlaron entregas de camiones y tráfico de vehículos, montaron puestos de venta de agricultor a consumidor en las ciudades, permitieron las ventas de agricultor a comerciante fuera de los mercados para evitar la congestión, e hicieron obligatorio el uso de máscaras, desinfección de manos y empleo regular de aerosoles desinfectantes en el mercado.

¿Qué ve como acciones cruicales para los gobiernos locales?

Identificamos cinco acciones clave que pueden ayudar a los gobiernos locales a abordar los problemas del sistema alimentario en esta era del COVID-19. Obviamente, el contexto diferirá entre países y localidades; las acciones gubernamentales en un área rural o en una comunidad suburbana de bajos ingresos diferirán de las de una gran capital o una ciudad secundaria de rápido crecimiento en Asia y África subsahariana. El liderazgo es el hilo conductor que vincula la acción del gobierno local, desde la priorización, planificación y supervisión de acciones, hasta enlazar con el sector privado y las redes de la sociedad civil, o comunicarse clara y regularmente con el público.

Uno, priorizar los sistemas alimentarios como un servicio esencial que continuará operando durante los períodos de confinamiento, emergencia u otras medidas de contención sanitaria.

Dos, establecer un comité de coordinación del sistema alimentario dentro del gobierno local y un mecanismo funcional de gobernanza para priorizar, planificar y supervisar las operaciones.

Tres, disponer de liderazgo para activar o desarrollar rápidamente un plan de respuesta del sistema alimentario del COVID-19.

Cuatro, generar datos e información de diagnóstico rápido para fundamentar la toma de decisiones.  

Cinco, encontrar formas innovadoras para que todos los canales esenciales del sistema alimentario cumplan con las medidas de contención de virus y continúen sirviendo a sus diversos clientes.

Las acciones tomadas a nivel local complementan el liderazgo del sistema alimentario proporcionado por los gobiernos nacionales y los líderes mundiales. Diversas medidas contribuyen a garantizar que el comercio global e intrarregional de alimentos e insumos agrícolas no se vea interrumpido, los suministros de alimentos sean adecuados, los precios sean estables, los principales cuellos de botella se aborden rápidamente y todos sigan confiando en el sistema alimentario.

¿Cómo pueden ayudar organizaciones como la FAO?

Los gobiernos locales y sus contrapartes en el sistema alimentario del sector privado y de la sociedad civil necesitan apoyo financiero y técnico. Podemos ayudar a construir capacidades de los actores locales clave. También podemos priorizar las inversiones ahora para fortalecer la capacidad de resupuesta del sistema alimentario en un mundo más allá del COVID-19. Y debemos asegurarnos de que los actores locales se beneficien de las experiencias, capacidades y pericia de las diversas coaliciones entre actores locales en el sector alimentario, redes mundiales de ciudades alimentarias (el Pacto de Política Alimentaria Urbana de Milán sería un buen ejemplo), y socios financieros y de desarrollo.

 

Lea el artículo completo en Food Tank aquí (en inglés).