Un primer paso fundamental para la observancia efectiva de la legislación forestal es definir, utilizando un enfoque que integre los múltiples grupos interesados, lo que se entiende por legalidad en el sector forestal. Se deben identificar todos los componentes de la legalidad forestal, teniendo en cuenta las normas internacionales y las leyes y circunstancias nacionales y locales. La definición debe ser sencilla e inequívoca. Asimismo, debe basarse en enfoques probados y procedimientos claros de control con funciones y responsabilidades definidas, y conllevar unas mínimas facultades discrecionales (subjetividad).

La definición de legalidad debe identificar los requisitos que  han de cumplirse para garantizar el cumplimiento de las leyes existentes. Los principales elementos que se han de incluir en la definición de legalidad son los siguientes:

• principios (una manera útil de agrupar los objetivos de las diferentes leyes);
• requisitos (a menudo denominados indicadores);
• verificadores del cumplimiento (documentos, informes o actividades que demuestren el cumplimiento de un requisito determinado), y
• referencias jurídicas (textos legislativos que justifiquen cada requisito).

La mayor parte de las jurisdicciones dispone de más de un organismo encargado de hacer cumplir las leyes. Por lo que respecta a la observancia de la legislación forestal, es importante definir y asignar claramente las funciones y responsabilidades de los diversos organismos, establecer enlaces entre éstos a nivel nacional, subnacional y local y garantizar que cuenten con una capacitación y personal adecuados. A fin de disminuir las posibilidades de sobornos y otras formas de corrupción, los salarios de los funcionarios encargados de la observancia de las leyes deben ser proporcionales a sus responsabilidades y a su volumen de trabajo. Asimismo, dichos funcionarios deben poder llevar a cabo investigaciones, entrevistar a testigos y sospechosos, entrar en locales, incautar activos y efectuar arrestos. Han de establecerse procesos y códigos para garantizar la integridad de los funcionarios y sus departamentos y para que éstos rindan cuentas de sus decisiones.

Las organizaciones internacionales pueden ayudar a crear la capacidad institucional necesaria para hacer cumplir la legislación forestal. Por ejemplo, la Organización Mundial de Aduanas ha puesto en marcha el proyecto GAPIN (Great Apes and Integrity – Grandes Simios e Integridad) para ayudar a las administraciones aduaneras de África a luchar contrar el tráfico ilícito de especies de fauna y flora silvestres protegidas por la Convención sobre el comercio internacional de especies amenazadas de fauna y flora silvestres (CITES).

Información. Disponer de información precisa y actualizada –lo que comporta la recogida, la verificación, el análisis y la difusión de datos– es esencial para detectar, vigilar, notificar, investigar, desalentar y eliminar actividades forestales ilegales. Los encargados de aplicar las leyes forestales, así como otras partes interesadas como las comunidades locales, deben conocer esas leyes y estar en condiciones de acceder y utilizar la información para luchar contra las actividades forestales ilegales. En muchos países, se ha demostrado que el establecimiento de mecanismos independientes en los que participen las comunidades locales (con el apoyo, en caso necesario, de organizaciones no gubernamentales (ONG)) es eficaz para realizar un seguimiento de los bosques y detectar actividades ilegales (véase casos).

La cooperación transfronteriza es fundamental para asegurar que se lleva a cabo una investigación y persecución adecuadas de los delitos relacionados con el comercio internacional de productos forestales. Organizaciones como la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito e Interpol pueden ofrecer capacitación específica, apoyo especializado en materia de investigación, datos pertinentes y canales de comunicación seguros.

Interpol facilita la observancia transfronteriza de las leyes y ayuda a los países a recabar pruebas y a  localizar a los delicuentes y sus activos. Está constituida por 188 Estados Miembros, de los cuales la mayor parte ha establecido “oficinas centrales nacionales” que actúan como centros de coordinación para la cooperación con Interpol y otras oficinas centrales nacionales. Asimismo, actúan como puntos de enlace entre las unidades nacionales de observancia de la legislación sobre bosques y flora y fauna silvestres e Interpol.

Acuerdos comerciales y convenios internacionales. Existen varios instrumentos internacionales para ayudar a los países a hacer cumplir sus leyes. Algunos ejemplos son:

• Los acuerdos de asociación voluntaria (AAV) son acuerdos comerciales jurídicamente vinculantes entre la Unión Europea (UE) y algunos países productores de madera fuera de la UE. Su objetivo es garantizar que la madera y los productos madereros que se exportan a la UE procedan de fuentes legales. A marzo de 2014, seis países habían firmado AAV con la UE y estaban desarrollando los sistemas necesarios para controlar, verificar y certificar la madera legal, mientras que otros nueve países estaban negociando con la UE el establecimiento de AAV.
• La CITES constituye el principal instrumento internacional para controlar y reglamentar el comercio internacional de especies protegidas y garantizar que el comercio internacional de dichas especies no represente una amenaza para su supervivencia.

Para la observancia satisfactoria de la legislación forestal es preciso que exista un sistema judicial eficaz en el que se adopten decisiones imparciales y transparentes y quienes infrinjan las leyes sean condenados a sentencias justas. Las sanciones deben ser suficientes para alentar la observancia de la ley. Las intervenciones judiciales suelen ser el aspecto más débil de la observancia de la legislación forestal, en parte debido a la falta de comprensión por los jueces y otros miembros del sistema judicial de la importancia de las cuestiones ambientales.

Se pueden adoptar medidas para asegurar que el sistema judicial favorezca la observancia de la legislación forestal. Por ejemplo, LAGA en el Camerún y Conservation Justice en Gabón llevan a cabo investigaciones sobre actividades ilegales forestales, en estrecha colaboración con sus gobiernos y ayudan a recabar la información necesaria para arrestar a los traficantes de productos forestales ilegales y a presentar pruebas concretas en los tribunales.

Participación del sector público. Es probable que los intentos de los gobiernos para hacer cumplir las leyes forestales no sean eficaces sin la participación de otras partes interesadas. Las ONG independientes pueden actuar como vigilantes, a menudo en estrecha colaboración con los medios de comunicación y ser útiles para descubrir actividades ilegales y garantizar que se adoptan las medidas de corrección adecuadas. Las comunidades locales y el público en general deben participar también en la lucha contra los delitos forestales.