¿Qué son los productos forestales no madereros?
Los productos forestales no madereros (PFNM) consisten en bienes de origen biológico distintos de la madera, procedentes de los bosques, de otros terrenos arbolados y de árboles situados fuera de los bosques. Ejemplos de PFNM son alimentos y aditivos alimentarios (como nueces comestibles, hongos, frutos, bayas, carne de animales silvestres, hierbas, especias y condimentos, plantas aromáticas e insectos), fibras (como bambú y ratán) y medicamentos, cosméticos y productos culturales (como resinas, gomas y tintes). En el siguiente cuadro se ofrecen más ejemplos de varias categorías de PFNM.
Categorías de PFNM
Categoría | Ejemplos de material | Ejemplos de utilización final |
Productos alimenticios de origen vegetal | Frutas, hojas, vegetales, hongos, nueces y semillas, bayas | Alimentos, aceites, bebidas,colorantes y tintes |
Productos alimenticios de origen animal | Carne de animales silvestres, animales de caza silvestre, insectos, miel, caracoles | Alimentos, trofeos |
Medicinales | Plantas medicinales, hierbas, especias | Medicinas, condimentos, perfumes |
Forrajes para animales | Hojas, ramillas | Forraje |
Fibras | Construcción, artesanía, papel, prendas para vestir | |
Materias primas para la industria química |
PFNM y GFS
PFNM y GFS
Varios millones de hogares de todo el mundo utilizan PFNM y dependen de ellos, fundamentalmente para satisfacer necesidades nutricionales, sanitarias y económicas. Se calcula que el 80 por ciento de la población de los países en desarrollo utiliza los PFNM de alguna manera para responder a esas necesidades (FAO, 1997).
La mayoría de estos usuarios de PFNM son mujeres ya que se encargan de su recolección y manejo en la mayoría de casos, incluso teniendo en cuenta el producto, el contexto y el país.
En muchos países, los PFNM son parte importante de los productos de exportación forestales. No obstante, a pesar de su valor real y potencial, la mayor parte de PFNM se suelen clasificar como productos forestales “secundarios”. Los PFNM a menudo son asociados a usos tradicionales que no son muy conocidos, o con la pobreza y la subsistencia. Las transacciones relacionadas con dichos productos tienen lugar en buena parte en empresas familiares y de pequeña escala, y la mayoría están fuera de los canales de comercialización, por lo que forman parte de un sector informal. Por estos motivos, los PFNM no se suelen tener en cuenta en la planificación de la gestión forestal, dando lugar a conflictos en torno a la utilización de los recursos, por ejemplo, en los casos en que la extracción de madera interfiere con la producción local y la recolección de PFNM.
La gestión sostenible de los PFNM, especialmente los que se presentan en los bosques naturales, puede ser compleja. Sin embargo, el desarrollo de empresas basadas en PFNM puede ayudar a incrementar la sostenibilidad de la gestión forestal gracias al aumento de los beneficios forestales que favorecen a las comunidades locales, quienes a menudo pueden realizar el aprovechamiento y las actividades de elaboración por sí mismas y, en consecuencia, mantener un mayor porcentaje del valor de los productos finales, lo cual supone un incentivo adicional para realizar una gestión forestal sostenible. No obstante, hay también ejemplos en los que el crecimiento de los mercados de PFNM ha dado lugar a la degradación de los recursos forestales o en los que no se ha conseguido mitigar la pobreza o mejorar la conservación de los bosques (véanse los Casos).
Los esfuerzos para realizar una gestión sostenible de los bosques se seguirán viendo obstaculizados si en los planes y las prácticas de gestión forestal y en los reglamentos que rigen su uso no se tienen en cuenta los PFNM. Es preciso que los responsables de la gestión forestal entiendan la importancia de dichos productos para los medios de vida de las comunidades locales y trabajen con ellas a fin de promover su gestión sostenible.
La gestión sostenible de los PFNM debería tener en cuenta los intereses de las diversas partes interesadas –como las comunidades locales, el sector privado, los gobiernos, los comerciantes y los consumidores– y garantizar su participación en la adopción de decisiones.
Tal es, sobre todo, el caso cuando se habla de la participación de las mujeres. Ellas a menudo quedan excluidas de los procesos decisorios sobre la gestión de los PFNM, incluso si en general son ellas las más afectadas por dichas decisiones.