Una plataforma nacional de múltiples partes interesadas en torno a las Directrices voluntarias ha contribuido a agilizar los esfuerzos orientados a lograr un acceso más equitativo a los recursos naturales. Tras sus inicios en la década de 1990, ha culminado con el documento de la nueva Política nacional de tierras.

Las Directrices voluntarias respaldan tanto a la Comisión Nacional de Reforma de la Tenencia como a la sociedad civil y proporcionan un marco para consolidar los diversos intereses en torno a la gobernanza de la tenencia. La divulgación y la aplicación de las Directrices voluntarias se ven fortalecidas gracias al apoyo que se brinda al proceso de reforma. El diálogo inclusivo en múltiples niveles se ha interesado en los procesos de gobernanza local, también en las actividades experimentales que están marcando la diferencia sobre el terreno.

Antes del primer taller nacional de 2014, un comité de múltiples partes interesadas, compuesto por representantes de la sociedad civil, organizaciones de agricultores, el Gobierno, el sector privado e instituciones de investigación, se dedicó a la labor previa de definir el contenido y la estructura del taller. Los debates mantenidos durante el taller fueron animados y abarcaron temas como la seguridad de la tenencia de la tierra para la agricultura familiar y los agronegocios. Los participantes subrayaron la necesidad de continuar este diálogo entre los actores, quienes raramente habían tenido la oportunidad de intercambiar sus opiniones.

Las organizaciones de la sociedad civil se valieron de un programa de aprendizaje para formular un plan de acción que utilizara las Directrices voluntarias en el proceso nacional de reforma. Un participante observó que, como resultado de la capacitación, se había establecido un marco consultivo con la sociedad civil, de manera tal que la próxima ley que se sometiera a consideración del Parlamento pudiera analizarse con el apoyo de la sociedad civil y a la luz de las Directrices voluntarias”.

El nuevo documento de la Política nacional de tierras, preparado en 2016 y presentado al Presidente de la República para su consideración, refleja la visión, el enfoque y los objetivos de las Directrices voluntarias.

La FAO proporciona asistencia técnica al Senegal desde 2014, gracias al apoyo financiero de Bélgica, Francia e Italia.