Valorando la salud de los suelos en sistemas agrícola-ganaderos de Uruguay
Una iniciativa apoyada por la FAO busca informar y sensibilizar sobre la importancia de la salud de los suelos, tanto a los productores como a la población
“Salud de los suelos en sistemas agrícola-ganaderos del departamento de Soriano” fue el título de una charla para explicar el alcance y las experiencias recogidas en una iniciativa realizada junto a productores de la zona para evaluar la salud de sus suelos.
La actividad fue realizada por el Instituto de Investigaciones Biológicas Clemente Estable (IIBCE) y el programa Conciencia Agropecuaria, el miércoles 15 de marzo, en el stand del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) de la Expoactiva.
Durante el evento se realizó un repaso de los resultados de convenio para la “Capacitación y sensibilización sobre la salud del suelo en sistemas agrícolas ganaderos del departamento de Soriano”, incluyendo la presentación de algunos resultados comparativos alcanzados en el trabajo con productores asociados.
Uno de los resultados fue que se comprobó que en los predios en los cuales no se usaron químicos, la respiración del suelo era mayor que en los que sí y, a su vez, que en los predios en los que se realizó una rotación del uso (introduciendo ganadería, por ejemplo), la captura de carbono fue mayor que en los predios en los que no se varió dicho uso.
Esto fue comprobado a través de la recolección de muestras de suelo en predios seleccionados por sus diferentes prácticas agrícolas. Una vez analizadas dichas muestras en los laboratorios del IIBCE, los resultados fueron entregados a los productores y vecinos de la zona, en instancias conjuntas de intercambio y sensibilización sobre la importancia del diagnóstico del estado de salud del suelo (incluyendo aspectos físicos, químicos y biológicos).
La voz de quienes producen
“Es importante entender mejor cómo funcionan los mecanismos de la naturaleza, y que un suelo vivo, produce mejor. Yo hago seguimiento de cultivos y lo que siempre me cuestiono es cómo podemos mejorar y ser más amigables con el ambiente”, dijo luego de la actividad Gustavo Paz, uno de los productores participantes del proyecto, que además enfatizó en que “este es el comienzo de un proceso y que gracias a esta iniciativa seguirán investigando el tema”.
Justamente, el objetivo general de la iniciativa es informar y sensibilizar sobre la importancia de la salud de los suelos, tanto a los productores como a los habitantes de las zonas de influencia.
“Nos dejan la puerta abierta para buscar más información y seguir aprendiendo. Creo que sería bueno seguir haciéndolo”, agregó Paz, para quien la experiencia fue muy enriquecedora debido a que se hizo un especial énfasis en la vida del suelo, una dimensión que le resultó novedosa.
Por otro lado, Felipe Bruzzone, otro productor participante del proyecto, recalcó que la técnica utilizada “es complementaria a otras y se puede integrar muy bien” y agregó “que se debe dar más importancia a los microrganismos del suelo”, porque agregan valor.
En efecto, el convenio también busca proporcionar a los productores la posibilidad de evaluar la salud de sus suelos y el impacto de su producción en ellos, mediante análisis de cromatografía, indicadores de actividad microbiológica, como respiración y contenido de carbono orgánico.
“Me gustaría seguir con este tipo de experiencias y ojalá se pueda difundir para que muchos otros productores agarren este tipo de herramientas”, manifestó Bruzzone.
La iniciativa apunta además a informar a la población en general sobre la realización de estas investigaciones y la importancia que dan las instituciones y partes involucradas, al suelo como recurso.
Esos talleres con productores/ras e integrantes de la comunidad local para transmitir los resultados de los análisis y las herramientas para evaluar la salud del suelo han sido instancias clave de intercambio, acercamiento y conocimiento mutuo que tienden puentes entre los diversos actores intervinientes.
Conciencia Agropecuaria
El programa Conciencia Agropecuaria del MGAP tiene como objetivo promoviendo una visión integradora del desarrollo de Uruguay en base al fomento de los sistemas agroalimentarios sostenibles. La implementación del proyecto cuenta con el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) junto con la Fundación de Apoyo al Instituto de Investigaciones Biológicas Clemente Estable (FAICE – IIBCE), la Asociación Rural de Soriano y la Asociación Uruguaya Pro Siembra Directa.