FAO en Uruguay

Mujeres rurales, autonomía económica y seguridad alimentaria

08/12/2016

Durante la XIII Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe celebrada en Uruguay, se llevó a cabo el evento paralelo: “Mujeres Rurales, autonomía económica y seguridad alimentaria”, que fue moderado por Claudia Brito, Oficial de Género de la Oficina Regional de la FAO para América Latina y el Caribe.

El objetivo del evento fue reflexionar en torno al lugar de las mujeres rurales en la agricultura familiar y la relevancia de su autonomía con acceso a recursos productivos, a ingresos propios y a tiempo en las políticas regionales, subregionales y nacionales activas para el logro de la seguridad alimentaria y nutricional.

Al inicio de la actividad se presentaron los resultados de la campaña regional: “17 días de activismo por el empoderamiento de las mujeres rurales y sus comunidades”.

La Directora Nacional de Economía Social e Integración Laboral del Ministerio de Desarrollo Social (MIDES), Mariela Fodde, expresó que en Uruguay se está impulsando la perspectiva de género en todos los programas que desarrolla el MIDES, y destacó la importancia de contar con datos desde la perspectiva de igualdad de género que den cuenta de los procesos de trabajo que se desarrollan, así como de las necesidades de las mujeres para que las políticas y programas puedan actuar enfocadas a las mismas. 

La participación de las comisiones técnicas del Consejo Nacional de Género, la articulación estrecha entre equipos técnicos de la Dirección General de Desarrollo Rural (DGDR) del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) y la Dirección de Economía Social  del MIDES, el seguimiento y apoyo a las familias rurales para promover el acceso a derechos y prestaciones sociales, la promoción de la agricultura familiar y marcos legales como la ley de agricultura  familiar, que es un medio vital para enfrentar la pobreza, la facilitación de micro créditos y acompañamiento técnico a emprendimientos desarrollados a través del  MIDES y del MGAP, son algunas de las líneas de trabajo que se están realizando en forma conjunta para la institucionalización de las políticas públicas con enfoques de igualdad de género.

Fodde señaló que “cuando llegamos a esos micro territorios donde estamos trabajando, nos encontramos muchas veces con que ni siquiera tienen resuelto el tema de la identidad. Por lo tanto llegamos con un abanico de programas e instrumentos para poner a la orden de estas situaciones”. Agregó que llegan a poblaciones con emprendimientos que tengan relación con micro o macro túneles de auto sustento, que puedan ser facilitación de comercios donde puedan venderle a organismos públicos a través de su mano de obra.

Por su parte José Olascuaga, Director General de Desarrollo Rural (DGDR-MGAP), destacó como fundamental la participación de las mujeres rurales no solo en el hacer sino también en el diseño de las políticas, en la ejecución y en la evaluación de las mismas.

Agregó que la Red Especializada de la Agricultura Familiar (REAF), órgano asesor del MERCOSUR para temas de agricultura familiar, es uno de los órganos del MERCOSUR que ha logrado los mayores avances.  Las mujeres rurales han tenido una participación activa y protagónica,  no solo en el grupo temático de género, sino en el de tierra, cambio climático, comercio, registro, juventud. “La mujer rural es una protagonista activa e imprescindible para lograr los resultados que se han logrado hasta el momento a nivel regional”, sostuvo.

Olascuaga indicó que a nivel de la REAF, con el apoyo de dos programas regionales con cooperación de AECID y FAO, se impulsó el diagnóstico para la caracterización del acceso a la tierra, la asistencia técnica al crédito, apoyos a la producción y registros, y se constataron desigualdades importantes a nivel regional y muchas brechas en el acceso de las mujeres a estos instrumentos.  En función de esto, en Uruguay se ha generado una serie de intervenciones tratando de revertir esa situación de desigualdad, como por ejemplo la revisión del registro de producción familiar, permitiendo la cotitularidad y eliminando la referencia del varón como la única “cabeza” de familia. Se generó también la posibilidad de establecer la co-titularidad de la tierra de colonización, lo cual significa un gran avance.

La DGDR, en forma conjunta con el Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES), desarrolló una herramienta específica de política diferenciada hacia las mujeres rurales, “Somos Mujeres Rurales”, fondo concursable para financiar distintos proyectos y propuestas emanados de organizaciones y grupos de mujeres.  Este fondo concursable se internalizó más aún en el Presupuesto Nacional al ser incluido “La línea presupuestal 121”, presupuesto sensible al género.

Olascuaga manifestó que “a nivel nacional, hemos impulsado un modelo de desarrollo que basa su trabajo en la descentralización y la participación de actores sociales, y se ha generado un proceso de capacitación y sensibilización en temas de género a nivel de nuestros propios cuadros técnicos. Hoy se ha hecho un esfuerzo importante que es parte de ese cambio cultural que todos tenemos que ir generando”.

También hicieron uso de la palabra Alicia Roldán, Representante de Sociedad Civil del Mercosur, productora familiar de la región, e integrante de las organizaciones de mujeres rurales vinculadas a la REAF-MERCOSUR, quien habló sobre las mujeres de la agricultura familiar, cultura, mandatos y lenguaje, y Maddelin Brizuela, Directora de Grupos Poblacionales del Ministerio de Relaciones Exteriores de El Salvador, y representante del grupo de trabajo para el Adelanto de las Mujeres de la CELAC, quien disertó sobre los avances en el diseño de la estrategia de género en la implementación del Plan SAN CELAC.

Antes de finalizar distintas mujeres presentes plantearon sus inquietudes y las diferentes realidades de sus países, inquietudes que fueron respondidas y registradas para ser tenidas en cuenta.