Valor sin derroche
Uruguay llama a iniciativas circulares para reducir pérdidas y desperdicios de alimentos con participación de FAO.
A nivel global, la FAO promueve un Código Internacional de Conducta para la Prevención y Reducción de Pérdidas y Desperdicios de Alimentos, destacó Vicente Plata, oficial a Cargo de la Representación de ese organismo internacional en Uruguay, durante el primer el evento de Inspiración Circular que realizó el miércoles 9 de mayo en la ciudad de Paysandú.
Esta agencia de Naciones Unidas especializada en Alimentación y Agricultura impulsa el Grupo de Trabajo Interinstitucional para la Disminución de Pérdidas y Desperdicios de Alimentos (PDA) de Uruguay, que brindó asesoramiento durante la redacción del proyecto de Ley de Gestión Integral de Residuos, que está en trámite en el Poder Legislativo.
Así lo recordó la ingeniera ambiental María José González, coordinadora Proyecto Biovalor, que invitó a la Representación de la FAO a participar de esa instancia, titulada "Pérdidas y desperdicios en la producción y distribución de alimentos".
La actividad contó con un público diverso y nutrido, parte del cual concurrió en un ómnibus que viajó especialmente desde Montevideo.
En ese marco la FAO presentó el informe sobre pérdidas y desperdicios en Uruguay, realizado por iniciativa del Grupo de Trabajo que impulsa.
La presentación de ese trabajo estuvo a cargo de Patricia Lema, ingeniera química, doctora y Profesora Titular de la Facultad de Ingeniería y la acompañó Vicente Plata.
El estudio servirá además de insumo para el próximo Reporte Nacional Voluntario sobre Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que presentará Uruguay.
En el mismo panel que la FAO expuso el bioquímico argentino Gustavo Polenta, del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, quién hizo un repaso de las pérdidas y desperdicios de alimentos en Argentina y a nivel mundial.
Llamado
La actividad del miércoles también fue la oportunidad para Biovalor y la Agencia Nacional de Desarrollo (Ande) de presentar en el marco del Programa Oportunidades Circulares, una convocatoria a empresas, asociaciones y emprendedores a presentar ideas e implementación de proyectos que puedan contribuir a la reducción de las PDA.
Para eso existen dos categorías en las cuales se pueden presentar propuestas hasta el 30 de agosto 2018: una para los proyectos que necesiten apoyo para ser implementados y otra para los que necesiten recursos para validar la posibilidad de implementarlos.
Con el ejemplo
En otro panel se expusieron cuatro iniciativas, con diversos grados de avance, relativas a la recuperación de desperdicios.
La Universidad Tecnológica de Paysandú presentó un proyecto que podría ser candidato al apoyo de su validación, destinado a fabricar raciones para el ganado, utilizando insectos para procesar residuos.
De la Universidad Católica de Montevideo, se presentó un proyecto más avanzado, pero también destinado a ser evaluado, que prevé comercializar un aditivo para premezclas de postres saludables, a base de desechos de manzana que surgen de la fabricación de jugo.
Dos otros ejemplos ya son realidad: la empresa salteña F3 Agroinsumos, incubada por la Agencia Nacional de Investigación e Innovación, que realiza complementos alimenticios para el ganado a base de naranjas invendidas y Foodie Hour, un emprendimiento destinado a quienes desean comprar comida a buen precio, poniéndolos en contacto con empresas que desean colocar productos aptos al consumo, pero están a punto de vencer o corren el riesgo de ser invendidos por algún otro motivo.