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Canadá
· Se espera que la industria del papel y pasta de papel de Quebec tenga que gastar durante los próximos cinco años una cantidad alrededor de 1 millón de dólares EE.UU. para reducir en un 50 por ciento la contaminación del agua. Ello es consecuencia de una orden del Gobierno provincial en la que se dispone que a finales de 1969 las aguas residuales de las fábricas no deberán contener más de 3 por ciento de sólidos en suspensión. También se pide a las fábricas que estudien y aprueben para finales de 1970 un programa de nuevo equipo.
La orden del Gobierno provincial fue consecuencia de un estudio sobre la contaminación del agua y del aire en 62 fábricas efectuado por la Asociación de Quebec de la Pasta y el Papel a solicitud de la Junta de Recursos Hídricos de la provincia.
China (Taiwán)
· La Isla de Taiwán, situada a 100 km de la costa de China continental, ha obtenido reputación mundial por el elevado nivel cualitativo y cuantitativo de su producción agrícola. Una prueba de ello es que cada vez se pide más a los chinos que vayan a otros países y continentes para demostrar y enseñar sus métodos de cultivo del arroz y las legumbres. Sería difícil encontrar un mejor ejemplo de lo que puede lograrse combinando la destreza y la inteligencia de un pueblo campesino muy trabajador con los resultados de muchos años de difíciles y complicados trabajos científicos sobre la mejora de las plantas. Sería deseable registrar una influencia semejante de la mejora de los árboles en los importantes programas forestales que se llevan a cabo en China (Taiwán); pero, como muchos otros países, la mejora de los árboles forestales está muy atrasada con respecto a la de las plantas de cultivo. Sin embargo, este hecho mismo - que la industria forestal esté atrasada en relación con la industria hermana de la agricultura - no sólo es un estímulo para los forestales de China (Taiwán), sino que constituye también una oportunidad estimulante para los especialistas en genética forestal y los silvicultores de otros países que buscan tal vez un medio ambiente nuevo e interesante donde poder desarrollar sus actividades y adquirir mayor experiencia. A este respecto China (Taiwán) está abierta a todos.
No obstante, se ha iniciado ya un programa de mejora arbórea. Desde hace unos 3,5 años, aproximadamente, se halla en marcha un proyecto patrocinado y financiado conjuntamente por China (Taiwán) y el PNUD destinado al desarrollo a largo plazo de los montes y las industrias forestales, y desde hace 2,5 años una parte relativamente pequeña de este amplio proyecto se refiere al planeamiento de un programa de mejora arbórea y a la iniciación de las primeras medidas para aplicarlo. No era fácil decidir dónde empezar y cómo orientar las actividades. Consideraciones importantes eran las dificultades prácticas que presenta un país abrupto y montañoso con pocas carreteras de acceso, incluso para localizar las mejores masas de especies indígenas, así como la necesidad de elegír técnicas susceptibles de poderse enseñar fácilmente y que den rápidamente resultado para los trabajadores y técnicos forestales de China. Se decidió seleccionar fenotipos superiores de cinco especies indígenas, a saber: Pinus taiwanensis, Cunninghamia konishii, Chamaecyparis formosensis, C. taiwanensis y Taiwania cryptomerioides, y de dos especies exóticas: Pinus luchuensis de las Islas Ryukyu, y el P. elliottii, de los Estados Unidos, y crear huertos de semillas o áreas de producción vegetativa de semillas, injertando retoños en patrones especialmente cultivados. A fines de la primavera de 1969 se habían establecido huertos de semillas de Pinus taiwanensis, P. elliottii y Cunninghamia konishii con una superficie de 7 ha, y a principios de 1969 se hicieron injertos que habrán de facilitar plantas para otras 5 ha de huertos de semillas de esas especies.
Ello constituye un buen resultado, pero el éxito no ha sido constante. Los injertos han fracasado; se ha dado con excesiva frecuencia la topófisis en la Cunninghamia konishii, se produjo un crecimiento inesperado de moho en los soportes de bambú de los injertos del último año de Pinus taiwanensis y en menos de una semana este moho destruyó 40 por ciento de los injertos sanos. Pero se ha aprendido de estos mismos fracasos y, a posar de ellos, existen ahora huertos de semillas densos que constituyen un verdadero estímulo para la continuación de esas actividades en lo futuro.
Por supuesto, si no se hace nada más, estos huertos de semillas deberán cultivarse cuidadosamente pues, de lo contrario, podrá perderse todo el trabajo realizado hasta la fecha, pero los forestales chinos tienen plena conciencia de lo que es necesario y están muy interesados en que dichos huertos se desarrollen adecuadamente. Pero lo que es importante para lo futuro es que el programa a largo plazo que se ha preparado se aplique metódica y permanentemente, con suficiente flexibilidad para modificarlo a la luz de la experiencia de China (Taiwán) y de los últimos acontecimientos que se produzcan en los demás países. Aunque los forestales y los investigadores chinos han iniciado bien la adquisición de las técnicas necesarias y pueden estar al tanto de la literatura técnica mundial, no cabe duda de que recibirían gran ayuda si pudieran establecer un enlace firme con un instituto de investigación o una universidad de otro país que se ocupen especialmente en investigaciones aplicadas relativas a este sector. La finalidad sería emprender conjuntamente el programa de mejora forestal de China (Taiwán), intercambiar personal, conceder becas, organizar seminarios, etc.
La importancia de la mejora forestal puede juzgarse si se considera el programa forestal en general. Los montes de China (Taiwán), que cubren más del 50 por ciento de la superficie del país, están en su mayoría nacionalizados y son explotados por la Oficina Forestal de Taiwán. Aunque los montes nacionales cubren aproximadamente 2,2 millones de ha, sólo 800 000 pueden considerarse actualmente adecuadas para la explotación comercial el resto se halla en tierras tan pendientes y alejadas que no es susceptible de explotación. Pero incluso explotar estas 800 000 ha hasta el máximo de sus posibilidades es mucha tarea. Hoy día estos montes producen, con viejas coníferas espontáneas y frondosas tropicales mixtas, tal vez la quinta parte de lo que podrían y el objetivo a largo plazo es convertirlas en plantaciones y aumentar su productividad.
El ritmo actual de repoblación forestal en los montes nacionales asciende a unas 12 000 ha al año, ritmo que deberá aumentarse continuamente en los próximos años. Hasta ahora se ha hecho poco para determinar cuáles son las especies más adecuadas para este programa de plantación, es decir, las mejores desde los puntos de vista silvícola y comercial. ¿Deben preferirse frondosas y coníferas indígenas a las especies exóticas? ¿ Cabe mejorar las especies indígenas? ¿Qué estirpes de especies exóticas son más adecuadas para Taiwán? ¿Cómo puede garantizarse el abastecimiento de semillas de estirpes selectas? Estos y otros muchos problemas silvícolas y genéticos se plantean a las administraciones forestales. No debe pensarse que no se han efectuado investigaciones y experimentos de campo. En el Instituto de Investigaciones Forestales de Taiwán y en las dos universidades donde se enseña la ciencia forestal hay investigadores competentes, pero es necesario un ímpetu y una inspiración nuevos a fin de que la investigación adquiera el dinamismo y el carácter práctico precisos que permitan convertirla en el cimiento en que debe basarse, pero en el que aún no se basa, todo el programa forestal. La colaboración entre la investigación de China (Taiwán) y un instituto o facultad más avanzados de otro país permitiría alcanzar estos objetivos.
España
· El programa de repoblación forestal de España, que ha permitido aumentar en 20 por ciento, aproximadamente, la superficie arbórea del país en los últimos 30 años, se ve amenazado por el incremento de las pérdidas provocadas por los incendios forestales. La gravedad de la situación queda demostrada por el hecho de que en los últimos 6 años los incendios forestales han destruido 1 ha de cada 4 repobladas.
El gobierno ha adoptado medidas para resolver el problema mediante la aprobación de amplias disposiciones legislativas referentes no sólo a la prevención y la extinción de los incendios forestales, sino también a la compensación de las pérdidas registradas.
El desarrollo general de los servicios contra incendios forestales irá acompañado de la investigación y el análisis de las causas, el establecimiento de normas de seguridad para todas las actividades forestales, la determinación de indicadores de riesgo de incendio que regulen las limitaciones de los trabajos forestales que puedan efectuarse en cada situación atmosférica, la determinación de las necesidades en cuanto a cortafuegos y normas de higiene forestal, la fabricación de equipo de lucha contra incendios y la educación del público. Se efectuarán estudios para identificar las zonas de riesgo elevado donde será obligatorio adoptar medidas preventivas especiales, ya sean los montes del Estado o de propiedad privada.
Las nuevas disposiciones especifican los deberes y obligaciones de los ciudadanos privados y de las autoridades locales en cuanto a la lucha y extinción de los incendios forestales. Define claramente los escalones del mando y las atribuciones y facultades de que disponen las diversas autoridades, entre las que figuran la movilización de ciudadanos para luchar-contra los incendios, la requisa de material y el derecho a abrir cortafuegos o a hacer contrafuegos en tierras privadas.
A fin de disponer de los medios para compensar las pérdidas, se ha creado el Fondo de Compensación por Incendios Forestales, financiado por el Servicio Forestal del Estado las autoridades públicas, las corporaciones que posean tierras forestales y los propietarios de montes privados. Aparte de compensar al propietario por la pérdida de existencias y otros daños sufridos, el Fondo servirá también para pagar el costo de la extinción de los incendios y cubrir las pérdidas ocasionadas por el personal dedicado a la extinción y otras personas que hayan participado en ella. Se presta especial importancia a la regeneración de los montes destruidos, y a estos efectos los propietarios privados recibirán material y asistencia técnica del Servicio Forestal.
Estados Unidos de América
· El Presidente de la Unión Internacional de Organizaciones de Investigación Forestal (IUFRO), George M. Jemison, ha anunciado que el 15° Congreso de la IUFRO se celebrará en la Universidad de Florida, Gainesville (Florida), del 14 al 20 de marzo de 1971. Las reuniones estarán precedidas de una gira especial a Florida y se proyectan, para después del Congreso, seis viajes técnicos, cada uno de una semana aproximadamente de duración.
Haití
· Se reciben con muy poca frecuencia noticias sobre las actividades forestales en Haití, aunque a todos los visitantes del país les resulta evidente la necesidad de programas de repoblación forestal y de lucha contra la erosión, especialmente si se tienen en cuenta las destrucciones causadas en los últimos ocho años por tres ciclones. Hay un proyecto del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (Fondo Especial) sobre reconocimientos y extensión agrícolas con base en Los Cayos, al sudoeste del país, de cuyo equipo forma parte un forestal de la FAO contratado en Luxemburgo, que ha ayudado a crear un vivero y a interesar a la población local en la plantación de árboles.
El Programa Mundial de Alimentos presta ayuda alimentaria a los participantes en las actividades de repoblación forestal y de lucha contra la erosión, y el Comité francés de la Campaña Mundial contra el Hambre ha donado 16 000 dólares para la compra de semillas y herramientas manuales forestales sencillas. Los periódicos publican artículos donde se resalta la necesidad de impedir la erosión mediante la protección de los recursos forestales naturales y el Presidente de la República anunció en el mes de enero la formación de un Comité Nacional de Repoblación Forestal con representantes de los Ministerios de Agricultura, Educación, Planificación y Desarrollo, a quien corresponderá planear y coordinar una cruzada nacional de repoblación.
Marruecos
· La Real Escuela Forestal de Salé, creada en 1948 para formar guardas y ayudantes forestales, va a ampliarse para formar los ingenieros forestales de grado intermedio necesarios para aplicar los programas nacionales de repoblación forestal y de conservación de suelos y aguas.
La organización de los servicios y de los planes de estudio se efectúa con ayuda del PNUD (Fondo Especial) con arreglo a un proyecto recientemente iniciado para el cual la FAO actúa de organismo ejecutivo. El PNUD facilita cerca de 1 millón de dólares EE.UU. para la contratación de profesores, concesión de becas y adquisición de equipo, durante un período de cinco años, después del cual todas las actividades docentes serán desempeñadas por personal de contrapartida marroquí.
Los nuevos cursos de ingeniería forestal de nivel intermedio tendrán una duración de 2 años y podrán absorber unos 30 alumnos al año. Los estudiantes marroquíes se elegirán entre los que hayan seguido con provecho 2 años de estudios en la Escuela Nacional Agrícola de Mequinez y podrán participar también en los cursos de estudiantes con calificaciones semejantes de Argelia y de Túnez. El director del proyecto de la FAO OS M. Badra (Túnez).
Reino Unido
· Va a desaparecer la tradicional unidad inglesa de volumen de madera que se usaba ya comúnmente en el siglo XVI y se denominó después pie Hoppus. La Comisión Forestal ha decidido que la silvicultura británica adopte el sistema métrico en febrero de 1971, año en que se introducirá el sistema monetario decimal en Gran Bretaña. El pie Hoppus se sustituirá por el metro cúbico.
La vieja unidad inglesa se ideó para estimar el volumen de madera útil de un árbol una vez suprimidos los desperdicios. La fórmula para calcular tal volumen es la siguiente: medir la circunferencia del árbol en pulgadas a la mitad de la altura del mismo, dividir la cifra por 4 elevar al cuadrado el resultado, multiplicar por la longitud útil del tronco expresada en pies y dividir después por 144; el resultado viene dado en pies Hoppus. El pie Hoppus tomó este nombre de Edward Hoppus, agente de seguros, que publicó en 1738 una serie de tablas para tratar de aclarar el problema de la cubicación de la madera en pie.
