Tradicionalmente, la investigación se ha centrado en el mijo perla, que es la variedad más importante. La adaptación es un problema de mayor envergadura en el mijo que en muchos otros cultivos. El mijo perla procede del Africa occidental, donde evolucionó en un medio muy difícil en asociación con una serie de enfermedades y plagas de insectos. Las variedades locales desarrolladas a través de la selección natural y humana daban escasos rendimientos pero mostraban una tolerancia notable a muchos de esos peligros. Generalmente, las variedades mejoradas introducidas desde Asia, Africa oriental o los Estados Unidos, donde esos problemas están menos extendidos, no han mostrado en el Africa occidental superioridad alguna sobre las variedades locales. De hecho, en la mayor parte de los casos han sufrido graves problemas de adaptación como consecuencia de la falta de tolerancia a las elevadas temperaturas del suelo y a las tormentas de arena en la fase de plántulas, así como una mayor susceptibilidad que las variedades locales a las enfermedades y plagas de insectos.
También es difícil el mejoramiento para desarrollar la tolerancia a la sequía, grave problema en todos los lugares de cultivo del mijo, porque resulta difícil simular adecuadamente las condiciones de sequía y porque manipular un carácter de la planta para mejorar la tolerancia a una grave situación de sequía en una fase del crecimiento puede traducirse en una mayor vulnerabilidad a la sequía en otra fase.
A pesar de todas estas dificultades, los programas nacionales e internacionales de investigación han conseguido progresos notables y en los países en desarrollo, principalmente en la India, se ha conseguido mejorar el rendimiento del mijo perla gracias al desarrollo, distribución y multiplicación de cultivares mejorados de polinización libre e híbridos. Debido a la baja tasa de utilización de semillas en la siembra (3-4 kg/ha de semillas) y a la elevada tasa de multiplicación (de 200 a 500 por cien por cada generación), estos cultivares mejorados se han difundido extensamente incluso entre agricultores de subsistencia en entornos específicos, relativamente favorables, como el Gujarat, Haryana y Maharashtra en la India.
En Africa, los híbridos no tienen todavía una presencia significativa por la falta de tierras y porque la industria de semillas no está suficientemente desarrollada. No obstante, en Sudáfrica se han introducido algunas variedades mejoradas de polinización libre que permiten obtener un rendimiento algo mayor que las variedades tradicionales y que son menos propensas a la sequía del final de la campaña porque maduran antes, con lo cual se reduce el riesgo de pérdida total de la cosecha.
El problema de la degradación ambiental es común a muchos cultivos, pero especialmente grave en el mijo. El crecimiento demográfico ha obligado a los agricultores a acortar los períodos de barbecho (esto ha causado, a su vez una disminución de la fertilidad del suelo) y a extender el cultivo del mijo hacia tierras más marginales. Este fenómeno es especialmente evidente en Africa, donde la superficie del mijo ha aumentado y los rendimientos han disminuido a lo largo de los últimos 15 años. Este problema es menos grave en Asia, pero en los lugares de condiciones más extremas, en Rajasthan, la expansión del cultivo hacia zonas más marginales hará difícil aumentar la productividad en el futuro.
El principal objetivo de la investigación sobre el mijo sigue siendo aumentar los rendimientos de grano y paja. Actualmente, existen dos líneas principales de investigación:
· reducir el ciclo vital del cultivo a 70-80 días (frente al período normal de 90 días), a fin de que la planta pueda evitar la sequía del final de la campaña;· conseguir una mayor tolerancia a la sequía de mitad de campaña.
Los programas de mejora del cultivo integran ahora a los agricultores más intensamente que antes en el proceso de mejoramiento y difusión para desarrollar tecnologías que estén mejor orientadas a resolver los problemas de los agricultores y, en consecuencia, que tengan más probabilidades de ser adoptadas. Actualmente, se pone el acento en la obtención de variedades con una resistencia duradera al mildiu y a las enfermedades foliares. Otros objetivos importantes de la investigación son:
· identificar fuentes de resistencia a Striga y desarrollar mejores tecnologías de ordenación de los cultivos a fin de reducir las pérdidas ocasionadas por Striga, particularmente en Africa occidental;· desarrollar estrategias de lucha integrada contra las plagas para reducir las pérdidas ocasionadas por el barrenador del tallo del mijo.
Perspectivas a medio plazo5
5. Hace referencia al período comprendido entre los años 1992-94 y 2005. Las proyecciones sobre la oferta se basan en las estimaciones sobre la superficie y los rendimientos realizadas a partir de las tendencias recientes, con algunos ajustes basados en los resultados previsibles de los distintos países, suponiendo que no se produzcan cambios trascendentes en materia de políticas. Las proyecciones sobre la demanda se fundamentan en las proyecciones demográficas de las Naciones Unidas y en la tasa de crecimiento de los ingresos del Banco Mundial.
Según las previsiones, la producción mundial de mijo pasará de 28 millones de toneladas (promedio de 1992-94) a casi 33 millones en el año 2005 (Cuadros 6 y 7). Este aumento se registrará en su mayor parte en los países en desarrollo, donde se estima que la producción crecerá el 1, 4 por ciento anual, para pasar de 27 millones de toneladas en 1992-94 a 31 millones en el año 2005. Previsiblemente, las mayores tasas de crecimiento (el 2, 4 por ciento anual) y el mayor crecimiento en términos absolutos tendrán lugar en Africa.
A nivel mundial, el aumento de la producción procederá principalmente del incremento de los rendimientos (Cuadro 7). En Africa, contribuirán a ello tanto el aumento de la superficie sembrada (1, 1 por ciento anual) como del rendimiento (1, 4 por ciento). Con todo, la producción aumentará menos que la población y el consumo per cápita disminuirá. En Asia, la producción experimentará un ligero aumento, de 15 millones de toneladas en 1992-94 a 16 millones en 2005 y el aumento será consecuencia principalmente de la mayor productividad (se prevé un incremento de los rendimientos de 0, 9 t/ha en 1992-94 a 1,1 t/ha en 2005). El aumento de la producción se registrará en su mayor parte en la India. En China, los rendimientos del mijo figuran ya entre los más elevados del mundo, pero experimentarán un nuevo incremento, especialmente si se obtienen y difunden variedades híbridas, todavía poco extendidas.
Sin embargo, se estima que la producción total disminuirá, ya que están cambiando las pautas de utilización de la tierra en favor de otros productos agrícolas y de otras actividades económicas.
Cuadro 6. Proyección de la producción, demanda y comercio de mijo ('000 toneladas), 1992-94 a 2005.
|
|
Efectivo (promedio de 1992-94) |
Previsto (2005) |
||||||||||
|
Producción |
Utilización total |
Alimentación humana |
Alimentación Pienso |
Déficit comercial1 |
Producción |
Utilización total |
Alimentación humana |
Alimentación Pienso |
Déficit comercial |
|||
|
Países en desarrollo |
26592 |
26509 |
21776 |
966 |
83 |
31394 |
31421 |
25510 |
1542 |
-27 |
||
|
|
Africa |
11358 |
11188 |
8673 |
187 |
170 |
15072 |
15138 |
11705 |
438 |
-66 |
|
|
|
Norte de Africa |
554 |
467 |
365 |
26 |
87 |
765 |
738 |
499 |
136 |
27 |
|
|
Africa occidental |
8986 |
8921 |
6987 |
129 |
65 |
12024 |
12051 |
9430 |
243 |
-27 |
||
|
Africa central |
447 |
435 |
356 |
4 |
12 |
505 |
502 |
437 |
10 |
3 |
||
|
Africa oriental |
1332 |
1326 |
929 |
29 |
6 |
1740 |
1792 |
1289 |
49 |
-52 |
||
|
Africa austral |
39 |
39 |
35 |
0 |
0 |
39 |
55 |
50 |
0 |
-16 |
||
|
Asia |
15171 |
15284 |
13103 |
748 |
-113 |
16229 |
16235 |
13805 |
1104 |
-6 |
||
|
|
Cercano Oriente |
117 |
118 |
75 |
30 |
-1 |
148 |
145 |
79 |
49 |
3 |
|
|
Lejano Oriente |
15054 |
15166 |
13028 |
718 |
-112 |
16081 |
16090 |
13726 |
1055 |
-9 |
||
|
América del Sur |
63 |
37 |
0 |
31 |
26 |
92 |
46 |
0 |
39 |
46 |
||
|
Países desarrollados |
1786 |
1806 |
513 |
970 |
-20 |
1662 |
1595 |
488 |
1009 |
67 |
||
|
Total mundial |
28378 |
28314 |
22289 |
1936 |
64 |
33056 |
33016 |
25998 |
2591 |
40 |
||
1. Producción menos utilización
Fuente: FAO/ICRISAT
Demanda de mijo para la alimentación humana
En las zonas semiáridas del mundo en desarrollo, el mijo seguirá siendo utilizado permanentemente en la alimentación humana y continuará siendo una fuente importante de calorías y un componente vital de la seguridad alimentaria. Con la excepción de la CEI, la utilización del mijo como alimento continuará circunscribiéndose a los países en desarrollo, a los que corresponde en la actualidad el 98 por ciento de este tipo de utilización. Se prevé que la demanda de mijo como alimento crecerá en esos países el 1, 3 por ciento anual entre 1992-94 y 2005, con importantes diferencias entre Asia y Africa. Hoy en día, corresponde a Asia el 59 por ciento del total del mijo utilizado en la alimentación humana y a Africa el 39 por ciento. Para el año 2005, la parte de Asia habrá disminuido al 53 por ciento y la de Africa habrá aumentado al 45 por ciento (Cuadro 6).
En Asia, la utilización del mijo como alimento sólo aumentará, según las estimaciones, el 0, 4 por ciento anual (Cuadro 7), puesto que los consumidores recurrirán a otros productos alimenticios. El aumento será mayor en Africa (el 2, 6 por ciento anual), pero se verá limitado por factores relacionados con la oferta más que con la demanda. Debido a la disminución del consumo per cápita, los hogares africanos deberán conseguir el aporte energético necesario recurriendo a las importaciones o utilizando cereales alimentarios producidos en zonas de mayor potencial dentro de cada país. Una fuente importante de preocupación es la probabilidad de un incremento del déficit de la producción de mijo en muchos países, particularmente en Africa. Se estima que para el año 2005 ese déficit ascenderá a 66 000 toneladas anuales, frente al excedente actual, que se cifra en 170 000 toneladas (Cuadro 6). Ese déficit se cubrirá en parte con importaciones o mediante ayuda alimentaria, pero la disminución de la producción per cápita podría tener graves consecuencias desde el punto de vista de la seguridad alimentaria y de la nutrición en una región que ya se ve aquejada por frecuentes déficit de alimentos. Hay que señalar que esta proyección se basa en una tasa de aumento de la producción relativamente optimista del 2, 4 por ciento anual hasta el año 2005.
Demanda de mijo para alimentación animal
La demanda mundial de mijo para la alimentación animal fue de 1, 9 millones de toneladas en 1992-94, que previsiblemente aumentará a 2, 6 millones de toneladas en el año 2005 (Cuadro 6). Una vez más, el cumplimiento de ese objetivo dependerá en gran parte de los países en desarrollo, en los que se espera que la utilización del mijo como pienso aumente un 60 por ciento para el año 2005, en función de la evolución en la India, Nigeria y Sudán. Se estima que descenderá en China. Todo hace pensar que la utilización de este cereal como alimento para las aves en los países desarrollados se mantendrá en los niveles actuales. Se espera que en estos países el mijo sea utilizado preferentemente para ese fin porque resulta demasiado costoso para ser competitivo como ingrediente de los piensos, excepto como cereal pienso de producción local en los suelos ligeros de algunas zonas de los Estados Unidos.
Comercio
Es muy difícil hacer proyecciones sobre el comercio mundial de mijo, dado su escaso volumen, el desconocimiento del volumen no registrado y las incertidumbres existentes con respecto a la oferta y la demanda. Si existieran excedentes importantes en algunos países (por ejemplo, en el Africa occidental), aumentarían las oportunidades de efectuar transacciones comerciales en ellos. No obstante, es poco probable que tenga lugar una expansión importante del comercio, habida cuenta de las largas distancias y los elevados costos del transporte, así como la variabilidad del volumen comercializable. Por consiguiente, se prevé que hasta el año 2005 el comercio internacional de mijo se limitará a transacciones fronterizas entre países en desarrollo y compras reducidas pero periódicas por los países desarrollados, al igual que en el pasado.
Cuadro 7. Tasa prevista de crecimiento de la producción de mijo, 1992-94 a 2005.
|
|
Superficie (%/año) |
Rendimiento (%/año) |
Producción (%/año) |
Producción per cápita (%/año) |
Utilización |
||||
|
Total (%/año) |
Alimentación humana (%/año) |
Alimentación Pienso (%/año) |
|||||||
|
Países en desarrollo |
0,2 |
1/2 |
1,4 |
-0,5 |
1,4 |
1,3 |
4,2 |
||
|
|
Africa |
1,1 |
1,2 |
2,4 |
-0,7 |
2,6 |
2,5 |
7,4 |
|
|
|
Norte de Africa |
0,9 |
1,8 |
2,7 |
0,4 |
3,9 |
2,6 |
14,8 |
|
|
Africa occidental |
1,1 |
1,4 |
2,5 |
-0,9 |
2,5 |
2,5 |
5,4 |
||
|
Africa central |
-0,1 |
1,1 |
1,0 |
-2,1 |
1,2 |
1,7 |
7,9 |
||
|
Africa oriental |
1,8 |
0,4 |
2,3 |
-1,0 |
2,5 |
2,8 |
4,5 |
||
|
Africa austral |
6,6 |
-6,1 |
0,5 |
-3,0 |
2,8 |
3,0 |
0,0 |
||
|
Asia |
-0,9 |
1,5 |
0,6 |
-1,1 |
0,5 |
0,4 |
3,3 |
||
|
|
Cercano Oriente |
0,0 |
1,9 |
1,9 |
-0,7 |
1,7 |
0,4 |
4,2 |
|
|
Lejano Oriente |
-0,9 |
1,5 |
0,6 |
-1,0 |
0,5 |
0,4 |
3,3 |
||
|
América del Sur |
2,5 |
0,8 |
3,3 |
1,6 |
1,8 |
0,0 |
1,9 |
||
|
Países desarrollados |
-2,2 |
1,6 |
-0,6 |
-1,1 |
-1,0 |
-0,4 |
0,3 |
||
|
Total mundial |
0,1 |
1,2 |
1,3 |
-0,3 |
1,3 |
1,3 |
2,5 |
||
Fuente: FAO/ICRISAT
