EXAMEN COMPLEMENTARIO DE LA REORGANIZACIÓN Y LA DOTACIÓN DE PERSONAL DE LA DIRECCIÓN DE FINANZAS

Objetivos, ALCANCE y metodología de la auditoría

240. Como se indicó en la introducción, en el bienio 2000-01 se llevó a cabo un examen de seguimiento de la reorganización y la dotación de plantilla de la Dirección de Finanzas (AFF) para determinar los cambios efectuados, de haberlos habido desde mi informe anterior [párrs. 197 a 209]. Además, como se anunció en la reunión de septiembre de 2000 del Comité Conjunto del Programa y de Finanzas, la Organización iba a efectuar un examen de la dotación de personal de la AFF. En el momento de escribir este informe, la empresa consultora contratada para que facilitara una opinión especializada todavía no había concluido su informe. Ello no obstante, mis colaboradores pudieron analizar los borradores preliminar y revisado del mismo.

La Organización de la AFF

241. A resultas de los cambios de organización efectuados en enero y julio de 1999, la Dirección de la AFF estaba integrada por las siguientes dependencias a principios del bienio 2000-01:

242. En el bienio 2000-01 no se efectuaron cambios de importancia en la organización, pero sí bastantes cambios de carácter temporal en las responsabilidades administrativas de los jefes de servicio o unidades/grupos. Según la FAO, esos cambios fueron necesarios para aprovechar los distintos niveles de competencias y abordar mejor la solución de los problemas existentes. Como ya señalé en mi informe anterior, esos cambios afectaron en particular a la Subdirección de Controles, cuyo personal fue desviado a otras dependencias con responsabilidades críticas, supervisión temporal de la Sección de Cuentas por Cobrar, por ejemplo.

Dotación de personal de la Dirección de Finanzas

Plantilla aprobada

243. Para el bienio 1998-99, la plantilla autorizada de la AFF era de 97 puestos, más siete puestos temporarios, establecidos cinco años antes, a raíz de la transferencia de la labor relativa al registro de la cuenta de anticipos y de personal del Departamento de Cooperación Técnica. Para el bienio 2000-01, la plantilla autorizada de la AFF fue reducida a 87 puestos, por haberse cancelado 10 puestos a resultas de la pérdida de los ingresos del PMA (6 correspondientes a ingresos de tesorería y 4 correspondientes a la pérdida prevista de ingresos de nómina). Además, los siete puestos de Cooperación Técnica suprimidos, cubiertos anteriormente por una asignación anual, no se incluyeron en el presupuesto. En mi informe anterior, había formulado observaciones sobre la reducción de la plantilla y aseverado que la centralización en la AFF de muchas funciones desempeñadas anteriormente por las Dependencias de Apoyo a la Gestión, conjugada con la necesidad de que la Dirección interviniese en el control, la seguridad y el análisis del sistema, hubiese requerido normalmente un aumento de la plantilla, en lugar de su disminución, por lo menos antes de la puesta en práctica actual del Oracle y en sus fases iniciales.

244. Debe observarse, empero, que cuando se aprobó el Programa de Labores y Presupuesto para 2000-01, se informó a la Conferencia de que “se estaban examinando posibles nuevas necesidades de reestructuración […]. Se trataba, en particular del fortalecimiento de la Dirección de Finanzas (AFF), que también se notificaría debidamente al Comité de Finanzas13. En septiembre de 2000, se presentó la decisión al respecto del Director General al Comité Conjunto del Programa y de Finanzas para su aprobación14. Se indicó lo siguiente: “Hay una combinación de varios factores debido a la cual resulta imprescindible que se revise la estructura de la AFF y se fortalezca actualmente. Tales son:

Habida cuenta de estos elementos, el Director General decidió abolir otro puesto de los servicios generales y establecer 11 puestos más del cuadro orgánico con carácter temporal durante un período de hasta tres años. Además, se llevaría a cabo un examen de la necesidad de personal de la AFF a fin de que “se disponga oportunamente de su resultado para tenerlos en cuenta en el PLP 2002-03”.

245. Como se pormenoriza en los párrafos siguientes se seleccionó una empresa consultora para que efectuara el examen de las necesidades de personal, pero sólo inició su labor en 2002. Para el bienio 2002-03, la plantilla aprobada ascendía a 96 puestos, tal como se detalla en el cuadro 15 infra, es decir, un puesto menos de los propuestos inicialmente.

Cuadro 15: Comparación entre la plantilla y el presupuesto de la AFF en tres bienios

 

1998-99

2000-01

2002-03

Puestos de Director

3

3

3

Puestos del cuadro orgánico

24

23

34

Puestos de los servicios generales

70

61

59

Temporeros

7

-

-

Total de la plantilla aprobada

104

87

96

Comparación con el bienio anterior

-17

+9

       

Plantilla real

246. En mi informe anterior, había formulado observaciones acerca de la insuficiencia de la plantilla real de la Dirección de la AFF. En el momento de redactar el informe, seguían vacantes 15 puestos (10 del cuadro orgánico y 5 de los servicios generales, respectivamente, utilizándose tres puestos de la segunda categoría para financiar a consultores). Para aliviar en parte la carga, la División utilizó más consultores a partir de 1999, lo cual no bastó para poner los recursos de la División a la altura de sus necesidades. Como se recapitula en el cuadro 16 infra, la situación no había variado hasta el momento de redactarse este informe. Sólo 79 de los 96 puestos de plantilla estaban cubiertos, en mayo de 2002, habiendo nueve y ocho vacantes de funcionarios de categoría de Director/cuadro orgánico y servicios generales, respectivamente. En cambio, había 18 consultores y 21 colaboradores temporeros. En total, en la AFF había 118 personas trabajando.

Cuadro 16: Comparaciones entre el personal presupuestado y el real

 

Puestos de D y cuadro orgánico

Puestos de servicios generales

Todos los puestos

Consul-tores

Tempo-reros

 

Presu-puestados

Reales

Presu-puestados

Reales

Presu-puestados

Reales

Total

Libro Mayor/Registro

8

5

9

5

17

10

1

1

12

Grupo para la Contabilidad Descentralizada

5

2

6

9

11

11

5

2

18

Grupo de contabilidad de proyectos

5

6

7

5

12

11

3

5

19

Subtotal AFFC

18

13

22

19

40

32

9

8

49

Sección de cuentas por cobrar

3

2

11

8

14

10

3

1

14

Sección de cuentas por pagar

2

1

6

7

8

8

1

6

15

Nóminas

2

1

3

3

5

4

0

0

4

Grupo de viajes

2

1

10

9

12

10

1

5

16

Tesorería

1

1

1

1

2

2

1

0

3

Subtotal AFFR

10

6

31

28

41

34

6

12

52

Subdirección de Controles

7

8

4

2

11

10

3

1

14

Oficina del Director

2

1

2

2

4

3

0

0

3

Total AFF

37

28

59

51

96

79

18

21

118

247. Ahora bien, debe observarse que finalmente se han cubierto dos cargos importantes. Como ya se mencionó, se nombró un Oficial de Finanzas Superior (P-5), el 1º de julio de 2002, como Jefe de la Subdirección de Tesorería. Ese mismo día, se efectuó otro nombramiento para cubrir el cargo clave del Director de la Dirección (D-2), que había estado desempeñando desde marzo de 1997 un consultor con carácter “temporal”. Como indiqué en mi informe anterior, no estoy de acuerdo con esta práctica de que haya consultores que trabajen sustituyendo a funcionarios permanentes y desempeñen de manera permanente funciones esenciales para la FAO.

Examen de la plantilla

248. Como se dijo anteriormente, se contrató a una empresa consultora para llevar a cabo un examen de la plantilla de la AFF y asesorar acerca de cuál sería su nivel adecuado. La selección se efectuó debidamente mediante un proceso competitivo. En total, el contrato, que fue firmado el 27 de diciembre de 2001 (FAO) y el 7 de enero de 2002 (empresa consultora) ascendió a 300.000 dólares EE.UU. (comprendida una pequeña modificación de 2.600 dólares EE.UU.) y abarcaba el examen de la plantilla de AFI y AFF.

249. La empresa consultora examinó detalladamente las necesidades de personal de la AFF. Observé que las observaciones formuladas a propósito de unidades o grupos concretos eran en gran medida similares a las que ya había formulado yo mismo. Por ejemplo, se observó lo siguiente:

250. Como se detalla en el cuadro 17 infra, la empresa consultora opinó que el número de funcionarios óptimo de AFF, habida cuenta de su mandato, era de 107 personas. La mayor reducción de plantilla concernía al PAG, pero sólo se podía alcanzar si la FAO lograba convencer a los donantes de que aceptaran normas simplificadas para las revisiones de los presupuestos de los proyectos. Una segunda mejora necesaria se refería al módulo de mantenimiento de presupuesto, que registraba los datos relativos a los presupuestos de los proyectos. De aplicarse con buenos resultados la mejora prevista, la tramitación de los presupuestos y las revisiones sucesivas se podrían hacer sin necesidad de que interviniese el PAG. En conjunto, esos cambios podrían dar lugar a una reducción limitada de la plantilla del PAG.

Cuadro 17: Comparación entre la plantilla real y la recomendada

Plantilla real

Plantilla recomendada

Diferencia

D/P

SG

Cons.

Temp.

Total

D/P

SG

Cons.

Temp.

Total

Libro mayor/Registro

5

5

1

1

12

5

5

1

1

12

0

DAG

2

9

5

2

18

4

8

4

1

17

-1

PAG

6

5

3

5

19

6

5

1

0

12

-7

Subtotal AFFC

13

19

9

8

49

15

18

6

2

41

-8

AR

2

8

3

1

14

2

8

1

0

11

-3

AP

1

7

1

6

15

2

8

1

2

13

-2

Nóminas

1

3

0

0

4

2

3

0

0

5

1

Viajes

1

9

1

5

16

1

9

1

5

16

0

Tesorería

1

1

1

0

3

2

5

1

0

8

5

Subtotal AFFR

6

28

6

12

52

9

33

4

7

53

1

Subdirección de controles

8

2

3

1

14

8

1

1

1

11

-3

Oficina del Director

1

2

0

0

3

1

1

0

0

2

-1

Total AFF

28

51

18

21

118

33

53

11

10

107

-11

251. En muchos casos, se propuso transferir funciones específicas. Por ejemplo, se recomendó que la conciliación bancaria, efectuada en gran parte por la Subdirección de Controles, fuese efectuada por una Dependencia de Tesorería reforzada (con los correspondientes aumento/disminución de tres puestos en cada dependencia). De igual modo, recomendaron la transferencia a la Dependencia de Tesorería de las funciones bancarias sobre el terreno llevadas a cabo actualmente por el DAG (que afectaría a un puesto). Para resolver las cuestiones restantes (mejorar los controles y sistemas contables sobre el terreno), el DAG debería, empero, contar con más funcionarios del cuadro orgánico.

252. La empresa consultora señaló también que si lo que se pretendía era disminuir la plantilla, la FAO tendría que replantear el mandato de la AFF. Las actividades de reasignación y reforma propuesta se referían, en particular, a funciones referentes a viajes (transferencia propuesta a la Dirección de Recursos Humanos), informaciones a los donantes (transferencia propuesta a Cooperación Técnica) y apoyo sobre el terreno (transferencia propuesta a MSS). Ahora bien, habría que aclarar más, mediante un análisis práctico y teórico, los costos y beneficios desde un punto de vista cuantitativo y cualitativo y las consecuencias de estas propuestas sobre los controles internos.

253. A propósito de varios aspectos de la gestión de los recursos humanos, la empresa consultora planteó las mismas cuestiones que yo había formulado anteriormente [párrs. 104 a 134 de mi informe anterior], esto es, los retrasos en el proceso de contratación, el abundante empleo de consultores y la inexistencia de un sistema de evaluación del desempeño profesional. A este respecto, se indicó lo siguiente:

También se comentó la insuficiencia de la capacitación, llegándose a la conclusión de que no se mantenía adecuadamente la competencia de los funcionarios actuales o nuevos.

254. A la vista de lo anterior, recomiendo que, basándose en el informe final de la empresa consultora, se prepare un plan de acción detallado acerca de cómo abordar los problemas no resueltos de la Dirección AFF, y que se supervise de cerca su aplicación mediante la redacción periódica de informes sobre su puesta en práctica.

EXAMEN COMPLEMENTARIO DE LA APLICACIÓN DEL PESA

Objetivos, alcance y metodología de la auditoría

255. Como se indica en la introducción, en el bienio 2000-01 se efectuó un examen de la aplicación del PESA. En ocho de los diez países visitados por mis colaboradores, el PESA o bien era ya operacional, o estaba formulado o en curso de formulación: tres de África, tres de Asia y dos de América Latina. Ahora bien, se hallaba en distintas fases en los diferentes países. La ampliación de la Fase I estaba en curso en sólo uno de ellos en el momento de la visita de mis colaboradores. En tres países, el Programa se encontraba en la Fase I. En otros dos, todavía no habían comenzado las actividades sobre el terreno y en los dos restantes el PESA se encontraba todavía en curso de formulación.

256. La auditoría consistió en un examen de los documentos existentes relativos al PESA en los países examinados. Se obtuvo otras informaciones de los Representantes de la FAO a partir de un cuestionario estándar enviado antes de que se llevasen a cabo las misiones y de entrevistas con personal del PESA en el curso de las visitas. En todos los países en los que el programa era operacional, se organizaron además entrevistas con funcionarios de los gobiernos anfitriones, donantes y otros interlocutores de la FAO. Además, las visitas a los sitios de los proyectos permitieron celebrar entrevistas con algunos beneficiarios. Ahora bien, habida cuenta de la asistencia de una evaluación externa, el tratamiento de la auditoría se limitó deliberadamente al seguimiento de mis observaciones y recomendaciones anteriores [párrs. 142 a 166 de mi informe anterior].

Antecedentes del PESA

257. El PESA, denominado en aquel entonces el “Programa especial para la producción alimentaria en apoyo de la seguridad alimentaria en los países de bajos ingresos y con déficit de alimentos”, fue suscrito por el Consejo de la FAO en su 106ª reunión, en junio de 1994. Como se recordaba en el PLP 2000-01, sus objetivos eran los siguientes: “ayudar a los países de bajos ingresos y con déficit de alimentos a aumentar la producción y la productividad de alimentos de manera sostenible; disminuir la variabilidad interanual de la producción; y mejorar el acceso a los alimentos y, como consecuencia: aumentar los ingresos netos de los pequeños campesinos, la generación de empleo rural y la reducción de la pobreza, teniendo debidamente en cuenta la justicia social y la sensibilidad respecto de las diferencias sociosexuales”. Todos los países miembros de la FAO que reúnan los criterios para ser considerados países de bajos ingresos y con déficit de alimentos pueden obtener asistencia en el marco del PESA. También se ha convenido en que el PESA puede ser ampliado a otros países, con fuentes de financiación distintas del presupuesto ordinario. En el momento de escribirse este informe, y según las informaciones que se pueden consultar en la Intranet de la FAO, el PESA era operacional en 68 países, 63 de los cuales eran países de bajos ingresos y con déficit de alimentos. Se formuló y estaba en espera de ser iniciado o en curso de formulación en otros 17 países.

Evaluación del PESA

258. Una de las recomendaciones recogidas en mi informe anterior se refería a la necesidad de efectuar una evaluación “en los 15 países en los que el PESA se ha lanzado inicialmente” a fin de determinar en particular los factores esenciales de su éxito. Esta recomendación fue suscrita por la Organización. Como se mencionó en el Informe acerca de la aplicación de las recomendaciones del Auditor Externo, que fue examinado por el Comité de Finanzas en su 97ª reunión, en septiembre de 200115, “el Director General, de conformidad con la solicitud de los Órganos Rectores, ha dado indicaciones a la Oficina del Programa, del Presupuesto y Evaluación (PBE) para llevar a cabo una evaluación del PESA utilizando un equipo de expertos independientes”.

259. La evaluación fue llevada a cabo en 2001 y a principios de 2002 por un equipo representativo de nueve consultores externos superiores. El equipo de evaluación visitó a los Representantes de la FAO y 12 países en los que el PESA era ya operacional: 6 de África, 3 de Asia y 3 de América Latina. Fueron seleccionados por el equipo de evaluación de una lista escogida preparada por la FAO de 18 países, en los que la labor se había desarrollado sobre el terreno durante por lo menos tres años y con por lo menos tres de los cuatro componentes del PESA. Salvo una excepción, todos los países analizados fueron distintos de los visitados por mis colaboradores en 2001 y 2002.

260. El informe del equipo de evaluación fue examinado por el Comité del Programa en su 87ª reunión, en mayo de 200216. Como indicó en su informe el Consejo, el Comité “se congratuló de esta importante evaluación, que a su juicio había sido plenamente independiente, exhaustiva y objetiva, y en la que se habían formulado críticas equilibradas y constructivas para reforzar el PESA”. Aunque el Comité reconoció que “la evaluación había sido costosa” (alrededor de 600.000 dólares EE.UU.), “propuso que sería útil efectuar evaluaciones exteriores independientes de otros programas seleccionados de la FAO”. También se congratuló “de la adhesión puesta de manifiesto por la dirección de poner en práctica las recomendaciones del equipo de evaluación para reforzar el PESA y su planteamiento”. Por último, “pidió un informe de seguimiento en su reunión de mayo de 2003 sobre los progresos realizados en la puesta en práctica del PESA y la introducción de los muchos cambios positivos que la dirección había mencionado en sus respuestas al informe”.

Diseño y ejecución del programa

Formulación del Programa

261. Como se detalla en las “Directrices para la formulación de la Fase I del PESA”, el proceso de formulación, que se inicia con la solicitud de un país de participar en el programa, se desenvuelve normalmente del modo siguiente:

262. Según las Directrices mencionadas anteriormente, el proceso de formulación debe basarse en tres principios fundamentales: la identificación del país con el programa, la participación en los interesados directos y la rapidez de la intervención. Otro factor clave del éxito del PESA fue la integración en las políticas nacionales de seguridad alimentaria. En todos los países visitados el Programa parecía ajustarse a las políticas nacionales vigentes. Como se señaló en el Informe de Evaluación, el éxito radicaba en que ya existieran o no políticas nacionales antes del PESA. Cuando existía una política nacional, normalmente los países adoptaban mayores iniciativas en la fase de formulación del programa, como sucedió, en realidad, en sólo dos de los países examinados por mis colaboradores.

Ejecución del Programa

263. Tal como se concibió originalmente el PESA tenía dos fases, Fase I y Fase II, denominadas también fase experimental y fase de expansión, respectivamente. La Fase I daba la posibilidad de demostrar y perfeccionar tecnologías y planteamientos ya ensayados y prometedores para aumentar la producción agrícola y los ingresos rurales, antes de aplicarlos a escala mucho mayor. Normalmente consistía en los cuatro componentes siguientes:

264. En el momento de escribirse este informe, ninguno de los países había empezado la Fase II. De hecho, considerando que el tiempo planeado inicialmente para la fase experimental era demasiado breve (dos o tres años) y el número de sitios de demostración demasiado pequeño para que pudiese tener un impacto de cierta importancia, en una fase temprana se reconoció que era necesario ampliar la Fase I. Se efectuó esta ampliación aumentado el número de actividades en los sitios existentes y aumentando el número de éstos.

265. Por lo que se refería a la puesta en práctica del PESA, las observaciones de mis colaboradores coincidían con las del equipo de evaluación.

Cooperación Sur-Sur

266. La iniciativa en materia de Cooperación Sur-Sur (CSS) se puso en marcha, en 1996 en el marco del PESA para fomentar una solidaridad eficaz entre los países en desarrollo y conseguir que los países receptores se beneficiasen de la experiencia y los conocimientos técnicos pertinentes de los países en desarrollo más adelantados en el terreno de la producción de alimentos. La asistencia técnica prestada consistió en una combinación de expertos y técnicos con gran experiencia práctica sobre el terreno en agricultura, que se esperaba que colaborasen directamente con los campesinos en las comunidades rurales que participaban en el PESA.

267. Sólo en dos de los países visitados estaba en marcha la iniciativa CSS.

OTROS ASUNTOS

Cancelaciones

268. El párrafo 4 del artículo 12 del Reglamento Financiero dispone que “el Director General podrá, previa investigación completa, autorizar que se pasen a pérdidas y ganancias las pérdidas del numerario, suministros, equipo y otros haberes que no sean las cuotas atrasadas. Se presentará al Auditor Externo, con las cuentas definitivas, un estado de todas esas pérdidas pasadas a pérdidas y ganancias durante el ejercicio”. Efectivamente, se me facilitó ese estado, el 4 de abril de 2002, en el que se recogían tres partidas canceladas por una cuantía total de 459.701 dólares EE.UU., relativas a lo siguiente:

Casos de fraude o presunto fraude

269. Conforme al punto 6 c) i) del Mandato Adicional de la Auditoría Externa, mis colaboradores pidieron, el 21 de marzo de 2002, información acerca de los casos de fraude o presunto fraude de que tuviese conocimiento la Organización correspondientes al bienio 2000-01. El 2 de mayo de 2002, se les facilitó una lista de cuatro casos, referentes a lo siguiente:

270. En cuanto al primer caso, se recuperaron los subsidios abonados irregularmente pero, habida cuenta del regreso inminente del funcionario a las Naciones Unidas, la FAO no adoptó ninguna medida disciplinaria, aunque informó a las instancias competentes de las Naciones Unidas de los hechos. En el segundo caso, se impuso al funcionario el 7 de agosto de 2001 la medida disciplinaria de despido por falta profesional. En el tercer caso, el funcionario fue despedido del servicio, el 20 de febrero de 2002, después de haber sido reclasificado a la categoría de los servicios generales. Se adoptaron medidas para recuperar la diferencia de salarios y remuneración conexa entre lo que había ganado desde su ascenso a la categoría del cuadro orgánico y lo que hubiese ganado hasta la fecha de separación en el servicio en el grado G-6. El ex funcionario había apelado contra esta decisión. En cuanto al último caso, se informó a mis colaboradores de que en mayo de 2002 se impuso la medida disciplinaria de despido por falta profesional a cinco de los funcionarios de que se trataba, y al sexto en julio de 2002.

271. En mi opinión, se adoptaron, conforme procedía, medidas y sanciones adecuadas. En último caso, en cambio, hubo demoras antes de que se adoptase medidas disciplinarias. El 25 de octubre de 2000, el encargado de tramitar las solicitudes por gastos médicos de la Organización informó de que había investigado la autenticidad de varias solicitudes de seis miembros que trabajaban en una misma Representación de la FAO. Una empresa auditora del país llevó a cabo una investigación, pero hasta marzo de 2002 no se señalaron a la atención de los funcionarios pertinentes sus conclusiones. Se informó a mis colaboradores de que los retrasos se debían a la necesidad de completar la investigación llevada a cabo en el país a fin de que las medidas disciplinarias pudieran fundarse en pruebas constatadas y aceptables.

272. Mis colaboradores pidieron también, el 21 de marzo de 2002, información complementaria acerca de los casos de fraude o presunto fraude recogidos en mi informe anterior. El 3 de mayo de 2002, se les informó de que se había recuperado la cantidad de 15.385,50 dólares EE.UU. relativos a llamadas telefónicas privadas imputadas a la Organización. Ahora bien, en cuanto a la falsificación de cheques por una cuantía de 74.480 dólares EE.UU. mencionada en el párrafo 211 de mi informe anterior, no hubo posibilidad de recuperar los fondos sustraídos, ante la insolvencia de las dos personas de que se trataba.

273. En los párrafos 214 y 215 de mi informe anterior, había indicado que se había concluido un acuerdo de mantenimiento con una empresa contratada exteriormente por la FAO, pero que la cuestión no estaba todavía sub júdice en el momento de escribir mi informe. El 5 de mayo de 2002, se informó a mis colaboradores de que el 4 de diciembre de 2001 se había emitido un laudo arbitral, pero que no se había notificado oficialmente a la FAO. A juicio de mis colaboradores, el caso bajo arbitraje debería haber sido expuesto en la Nota 23 de los estados financieros, relativa a las obligaciones eventuales. La Organización respondió que no podía hacerlo porque la cantidad de que se trataba no era cuantificable en el momento en que se prepararon las cuentas. En el momento de escribirse este informe, se informó a mis colaboradores de que la obligación, más los honorarios de los abogados, ascendía a 280.000 euros.

Medidas adoptadas en respuesta a informes previos

274. Como se indica en la introducción, normalmente las observaciones relativas a medidas adoptadas en respuesta a recomendaciones recogidas en informes anteriores han sido incorporadas a la sección a la que pertenecen. Así pues, en el presente párrafo nos referiremos únicamente a las no tratadas anteriormente.

AGRADECIMIENTOS

275. Deseo dejar constancia de mi agradecimiento por la cooperación y la asistencia prestadas por el Director General y los funcionarios de la FAO durante la comprobación de las cuentas.

 

François LOGEROT
Presidente Primero del Tribunal de Cuentas
de la República Francesa
Auditor Externo

2 de agosto de 2002

__________________________________

13 Véase el párrafo 92 del documento C99/Rep.

14 Véase el párrafo 23 del documento JM2000/3.

15 Véase el documento FC97/12.

16 Véase el documento PC87/4 a) titulado “Evaluación externa independiente del Programa Especial para la Seguridad Alimentaria (PESA)”.

 


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