El 13° Congreso de la Unión Internacional de Organizaciones de Investigación Forestal (IUFRO) se celebró en Viena (Austria), del 10 al 16 de septiembre de 1961, y en él participaron unos 360 forestales e investigadores que representaban 36 países y 120 instituciones de investigación.
Fue también en Viena en 1893 donde se celebró el primer congreso de la IUFRO, dos anos después de haberse creado la propia Unión. Este «regreso a los lares», por así decirlo, ofrecía por sí mismo suficiente interés. La sesión inaugural del Congreso se celebró en el Palacio de la Industria de Viena. Actuó como presidente del Congreso el Presidente de la Unión, Sr. James Macdonald, del Reino Unido, personalidad que ha dirigido los asuntos de la Unión desde el 12° Congreso, celebrado en Oxford en 1956.
Los primeros días se dedicaron a las tareas del Consejo Internacional, del Comité Permanente de la IUFRO y de las diversas secciones de investigación. Se presentaron y discutieron abundantes ponencias científicas y técnicas en los tres idiomas de trabajo (inglés, francés y alemán). Después de terminar cada jornada de trabajo, los congresistas participaron en una variadísima serie de actividades sociales y culturales, así como en jiras turísticas que, en la más pura tradición vienesa, servían de excelente distracción.
En la sesión de clausura del Congreso, el Profesor J. Speer, de la Escuela de Montes de la Universidad de Munich, fue elegido presidente entrante de la IUFRO y el Sr. V. L. Harper, del Servicio Forestal de los Estados Unidos, Vicepresidente. Se eligió también un nuevo Comité Permanente integrado por 25 miembros, dos más que en el anterior, 15 de los cuales eran nuevos en el Comité. Existen hoy 15 miembros procedentes de institutos de investigación europeos, cinco pertenecientes a institutos de Norteamérica; uno de la América Latina, otro del Cercano Oriente y un tercero de la U.R.S.S.; y dos de la región de Asia y el Pacífico.
Se nombraron también orientadores para las diversas secciones de investigación. Quedó creada la nuevo sección de «Historia de los bosques», con el cometida de estudiar la historia de los bosques naturales de todo el mundo y la influencia del hombre sobre ellos. Esta sección procurará coordinar la compilación de las historias forestales más útiles para los profesionales de la silvicultura.
Después de largas discusiones se decidió cambiar el nombre de la sección encargada de cuestiones de aprovechamiento y llamarla «Sección de productos forestales», asignándola un amplio cometido. Se convino en que sus sectores de actividad inmediata serían: (a) propiedades de la madera; (b) reacción de las maderas al fuego; (c) aserrado y labrado de la madera.
En casi todas las secciones de investigación se han creado grupos de trabajo especializados, varios de los cuales operan en proyectos conjuntos con la FAO, por ejemplo, en lo que se refiere a la bibliografía y a la terminología forestal, genética forestal, protección de bosques contra plagas y enfermedades, y ciencia de las operaciones forestales.
Después de las sesiones dedicadas a los debates, los participantes realizaron viajes de estudio. Tras una primera excursión conjunta de un día a Burgenland (Neusiedlersee) y a los Bosques de Viena, se siguieron tres itinerarios diferentes dedicados a silvicultura y cuestiones afines, protección de montes, técnicas de trabajo, ingeniaría forestal, explotación y aprovechamiento.
Estos viajes de estudio abarcaron prácticamente todos los puntos del país, brindándose la oportunidad de celebrar reuniones técnicas en diversos lugares durante la realización de los viajes.
El bosque desempeña un papel de importancia en la economía austríaca (el 40 por ciento de la superficie del país está cubierto de bosques) de manera que los viajes permitieron estudiar sobre el terreno una variedad de problemas técnicos, económicos, sociales e incluso políticos. Para estudiar lo relativo a la silvicultura y a la ordenación forestal se visitaron muchos tipos de bosques: hayedos y robledales en las llanuras y en las estribaciones de las montañas y después masas de abeto, alerce, Pinus cembro y P. mughus, entremezclados con masas naturales y artificiales de pino negro de Austria (P. nigra) y de la omnipresente picea. En especial, se juzgaron muy notables algunas soluciones originales para desarrollar la repoblación forestal en terrenos difíciles, tanto en las llanuras como en las zonas de alta montaña. Los participantes mostraron un considerable interés en la moderna maquinaria de gran precisión y en las técnicas adoptadas respecto del levantamiento de un inventario forestal nacional, así como en la mecanización de la silvicultura y de las operaciones de explotación.
La consecución de una mayor productividad forestal como resultado de la intervención del gobierno en la propiedad privada resultaba evidente en modo particular en Estiria, provincia en que precisamente se ha celebrado no hace mucho un viaje de estudios sobre silvicultura aplicada, organizado en nombre de la Comisión Forestal Europea de la FAO. Los ejemplos observados de ordenación agro-silva-pastoral, combinados con la corta selectiva, constituían excelentes lecciones prácticas. En las zonas de alta montaña se presenciaron otros ejemplos igualmente buenos de técnicas y obras de ordenación de cuencas hidrográficas, corrección de torrentes y protección contra aludes. Complemento inmejorable de estos viajes fueron las visitas a la Escuela de Guardas Forestales de Ort, cerca de Gmunden, a la Estación de Investigaciones Forestales de Mariabrunn y al «phytotron» de gran altura en Patscherkofel, todos ellos modelos en su género.
El Consejo Internacional de la Unión, antes de hacer constar en acta los elogiosos comentarios de todos los participantes dirigidos al Comité organizador del Congreso de Viena (presidido por el Dr. Rudolf Ender, el Dr. Hubert Dürr y el difunto Dr. Horky), aceptaron agradecidos la invitación de la República Federal de Alemania de actuar como país hospedante para el 14° Congreso de la IUFRO.
Estos congresos son de especial valor para alcanzar los objetivos últimos de la FAO. Algunos de los sectores respecto de los cuales el 13° Congreso aportó una utilísima información fueron los siguientes:
1. Ampliar la aplicación de los conocimientos actuales a los países subdesarrollados para incrementar la producción forestal y obtener en el tiempo más breve posible los beneficios que se derivan de la protección de suelos y aguas mediante el bosque;2. Forma de coordinar la investigación forestal en regiones en que los institutos de investigación son escasos, con objeto de que sus actividades contribuyan en el mayor grado posible al desarrollo económico de todos los países de la región; y
3. Forma de relacionar las investigaciones fundamentales a largo plazo con las labores de la FAO de forma que se abran nuevos horizontes y se creen nuevos recursos.
Esta es la clase de temas en que deben ocuparse conjuntamente la IUFRO y la FAO y no será posible solución alguna a los mismos, a menos de que exista una colaboración estrecha y sistemática entre ambas
Organizaciones.
A. M.
