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Economía de los productos y servicios forestales no madereros en Polonia y Eslovaquia

C. Upton

En el sector forestal de machos países de Europa oriental, la transición económica ha creado una situación en que resulta necesario establecer un equilibrio entre la protección ambiental, el uso público de los bosques y la necesidad de que éstos contribuyan al desarrollo rural y al crecimiento económico en general. Tomando los ejemplos de Polonia y Eslovaquia, el presente articulo muestra cómo una cuidadosa valoración económica de los productos y servicios no madereros puede resultar valiosa a tal efecto.

Christopher Upton trabaja con SGS Silviconsult Ltd. en Oxford, Reino Unido.

En general, el análisis económico de las actividades de desarrollo forestal plantea dos problemas principales. En primer lugar, muchos de los beneficios de los bosques resultan difíciles de evaluar; en segundo, es frecuente que dichos beneficios empiecen a percibirse muchos años después de haber realizado los gastos. Esto, y el hecho de que los costos son casi siempre más fáciles de calcular que los beneficios, significa que, en general, los rendimientos del sector forestal aparecen bajos.

La transición de una planificación centralizada a una economía de mercado en gran parte de Europa oriental ha requerido que los países tengan que calcular la eficacia en relación con el costo de las actividades forestales, tanto en términos de beneficios comerciales para el explotador forestal como de ventajas para la sociedad nacional. Al establecer estas últimas, hay que incluir una evaluación de los beneficios obtenidos de los productos y servicios no madereros.

La estructura de la propiedad de la tierra y de los bosques influye en la forma en que este conjunto de consideraciones puede traducirse en una política forestal y luego aplicarse. En Polonia, mas del 80 por ciento de los recursos forestales es de propiedad estatal y está administrado por el Estado, que también reglamenta la legislación forestal y, en consecuencia, puede garantizar directamente que los bosques proporcionen un nivel suficiente de productos y servicios no madereros. En Eslovaquia, casi el 60 por ciento de la superficie forestal es de propiedad privada y el servicio forestal, como regulador eficaz, garantiza que la sociedad cuente con el nivel necesario de productos y servicios forestales no madereros. Algunos de los instrumentos que pueden utilizarse para fomentar una ordenación forestal sostenible con fines múltiples son las actividades de extensión forestal y los incentivos (subvenciones, crédito preferencial, exenciones fiscales, etc.). La economía puede ayudar a calcular hasta qué punto son necesarios dichos incentivos.

CUADRO 1. Polonia y Eslovaquia: datos y características forestales básicos



Polonia

Eslovaquia

(millones de ha)

Superficie forestal

8,7

1,8

- Propiedad del Estado

6,8 (79%)

0,8 (42%)

- Propiedad Privada

1,8 (21 %)

1,0 (58%)

- Frondosas

1,9 (22%)

1,0 (58%)

- Coníferas

6,6 (78%)

0,8 (42%)

69% de pino albar

30% de hayas y 27% de píceas


(millones de m3)

Extracción anual actual

17,0

4,2

Características forestales



· 800000 ha de bosques gravemente dañadas por la contaminación ambiental



· 980000 ha moderada y gravemente dañadas por la contaminación ambiental

· 60% de tierra forestal en terrenos con pendientes de más del 40%

· 117000 ha en cuencas hidrográficas que abastecen de agua a zonas urbanas

Tanto en Polonia como en Eslovaquia se discute acaloradamente sobre el equilibrio que debe existir entre un nivel adecuado de producción comercial maderera y la capacidad de los bosques para facilitar suficientes productos y servicios forestales no madereros. La producción maderera debe ser comercial a fin de conseguir los fondos para realizar inversiones que mejoren la situación de los bosques. Además, en ambos países, los sectores de la industria maderera emplean un considerable número de trabajadores y generan divisas. En Polonia, los fabricantes de productos madereros realizan ventas anuales por casi 2000 millones de dólares EE.UU. y emplean a más de 180000 personas. En Eslovaquia, la industria de la madera exporta el 40 por ciento de su producción por una valor de más de 250 millones de dólares en ventas al exterior y el sector forestal emplea a más de 50000 personas. Ambos países hacen gran hincapié en la función especial que desempeñan los bosques en la sociedad así como en el beneficio ambiental de mantener una cubierta forestal. La capacidad de los bosques para proporcionar un nivel suficiente de productos y servicios forestales no madereros constituye una consideración importante.

Los oficiales forestales son custodios de un patrimonio y al mismo tiempo, administradores de la industria de la madera. La nueva ley forestal de Polonia establece que en la ordenación forestal se debe tener en cuenta sobre todo la «conservación de los bosques y sus efectos favorables sobre el clima, el aire, el agua, el suelo, las condiciones de vida y la salud de los seres humanos así como el equilibrio natural» (Ley sobre Bosques, 30 de agosto de 1991). El Principio 1 de la política forestal eslovaca establece que los bosques «representan un elemento de formación de paisaje y de estabilización ecológica del territorio. El mantenimiento, protección y mejoramiento de los bosques constituye una meta fundamental de la política forestal de Eslovaquia» (La estrategia y el concepto de desarrollo de los Bosques en Eslovaquia, junio de 1993).

Tanto en Polonia como en Eslovaquia está garantizado el acceso público a todas las zonas forestales de propiedad del Estado para la recolección de bayas silvestres y de hongos, así como con fines recreativos. La política forestal de Eslovaquia establece el acceso público como un «importante principio democrático que permite a cada ciudadano disfrutar de los bosques para fines recreativos y terapéuticos.» En las secciones 26 y 27 de la Ley sobre Bosques de Polonia se garantiza el acceso a todos los bosques del Estado.

En el Cuadro 2 se indica la importancia relativa de los principales productos y servicios forestales no madereros para Polonia y Eslovaquia. Aunque existen muchas similitudes, hay también importantes diferencias. La principal similitud es que los productos y servicios no madereros tienen gran importancia en cada uno de los países. Cabe afirmar que en ambos países la producción de productos y servicios no madereros es al menos tan importante como la producción de madera.

La principal diferencia se refiere a la topografía, ya que en Eslovaquia es más montañosa que en Polonia el 60 por ciento de las tierras forestales se encuentran en terrenos escarpados con una pendiente de más del 40 por ciento y es más significativa la función que desempeña el bosque en lo que respecta al suelo, el agua y la protección contra los aludes. Como se explica más adelante, esto tiene un importante efecto en cuanto a la forma de analizar la economía de los productos y servicios forestales no madereros.

LOS PRODUCTOS Y SERVICIOS NO MADEREROS EN EL ANALISIS ECONOMICO

Existen básicamente tres opciones posibles para incluir los beneficios de los productos y servicios no madereros como parte del análisis económico: no hacer nada, cuantificar la mayor parte posible de beneficios, y cuantificar todos los beneficios obtenidos de los productos y servicios no madereros como una función de los beneficios obtenidos de la madera. Si se opta por no hacer nada, cabría siempre suponer que los proyectos forestales son una buena inversión pública siempre que la tasa real de rendimiento financiero supere un determinado punto limite. En el caso de Eslovaquia y Polonia puede utilizarse como orientación para el sector forestal un porcentaje que va del 2 al 5 por ciento. A continuación se analizan con mayor detalle las otras dos opciones.

CUADRO 2. Importancia relativa de los productos y servicios forestales no madereros en Polonia y Eslovaquia

Productos y servicios no madereros

Polonia

Eslovaquia

Caza

(2)

(2)

Protección del suelo

(1)

(2)

Protección del agua

(1)

(2)

Protección contra los aludes

(0)

(1)

Actividades recreativas (esparcimiento)

(2)

(2)

Recolección de productos no madereros

(2)

(2)

Biodiversidad

(1)

(1)

Absorción de carbono

(2)

(2)

Nota:

(2) importancia global considerable.
(1) importancia considerable en algunas zonas.
(0) sin importancia especial.

Definiciones:

Caza: incluye el valor de la venta de la carne, los trofeos y otros ingresos procedentes de las actividades deportivas.

Protección del suelo: se refiere al impacto sobre la fertilidad del suelo en lo que respecta al mantenimiento de la productividad, diversidad y estructura del ecosistema, y sobre la pérdida de suelo provocada por el entarquinamiento, la inestabilidad de las comentes de agua, etc.

Protección del agua: incluye el impacto sobre la cantidad y calidad del agua. Los efectos sobre la cantidad de agua se miden por la incidencia de las inundaciones (intensidad y distribución de los escurrimientos), y la calidad por la disponibilidad del agua para el consumo humano, la agricultura y la industria.

Protección contra los aludes: se refiere a los efectos de los aludes de nieve sobre los bosques así como de la actividad humana y económica. Incluye asimismo la erosión en gran escala provocada por el fango y los corrimientos de tierra.

Actividades recreativas (esparcimiento): incluye los efectos sobre todas las actividades al aire libre y sobre el turismo (especialmente las excursiones a pie y el esquí) en lo que respecta a la estructura forestal, por ejemplo el tamaño de la tala el efecto paisajístico, las nuevas plantaciones y los caminos forestales, la absorción del ruido y de la contaminación local, etc.

Recolección de productos forestales no madereros: incluye el impacto sobre la disponibilidad pública de bayas silvestres, hongos, etc.

Absorción de carbono: mide la capacidad de los recursos forestales capaces de absorver el carbono (retención de carbono), y el efecto de las emisiones de gas termoactivo sobre los bosques (especialmente SO2 y NOx).

Cuantificar la mayor cantidad posible de beneficios

Según esta opción, habría que investigar el valor de los beneficios concretos. Por ejemplo, se puede determinar el valor de los bosques como lugar de esparcimiento utilizando el método de los gastos de viaje, su valor como lugar para practicar la caza por las ventas de carne anuales y el valor deportivo por la cantidad que los cazadores están dispuestos a pagar en otros países, etc. Todas las tasas de rendimiento que superan un determinado umbral se aceptan entonces debido a que algunos beneficios son demasiado difíciles de calcular. El Gobierno del Reino Unido permite una tasa de tala de los bosques del 3 por ciento, si no se incluye ningún beneficios no comercial, y del 6 por ciento si se tienen en cuenta los beneficios no comerciales cuantificables. En Francia el Gobierno va a adoptar una tasa del 3 al S por ciento para las inversiones del sector público en su próximo plan quinquenal.

Este método presenta dos importantes desventajas potenciales cuando se aplica en la práctica: (i) a menos que se utilice la investigación para producir niveles generales de beneficios, cada análisis requiere su propia investigación, y (ii) cuando los beneficios no cuantificables son considerables, el análisis puede dar un resultado que no llegue al umbral, aun cuando la inversión sea económicamente sólida. Esto sucede, sobre todo, cuando las cuestiones relacionadas con el suelo, el agua y la protección contra los aludes y la biodiversidad adquieren suma importancia.

Sin embargo, este sistema se adapta bien a la situación de Polonia donde pueden realizarse estimaciones razonables de los principales productos y servicios no madereros, entre los que se encuentran:

· la caza;
· las actividades de esparcimiento;
· la recolección de productos no madereros;
· el papel que desempeña el bosque en la absorción de carbono.

Caza: los valores de la caza pueden calcularse a partir de los registros de la venta de carne y del valor total de las actividades deportivas (venta de licencias, trofeos, etc.). En Polonia, la caza constituye una importante actividad económica. Las primeras leyes polacas sobre caza se promulgaron en 1775; en 1926, se fundó la Unión Polaca de Caza (PZL) y en 1927, se promulgaron las reglamentaciones de caza más avanzadas de Europa. Actualmente la PZL cuenta con unos 100000 miembros pertenecientes a 2500 clubes de caza. En las zonas forestales se caza el alce, el gamo rojo, el gamo, el corzo y el jabalí. Los planes de caza presentados por el club de caza tienen que ser aprobados por el servicio forestal, y Polonia es conocida además en toda Europa por contar con algunos de los mejores centros de caza siendo cada vez más importantes la venta de «excursiones cinegéticas» a los extranjeros.

Si bien no existe ninguna cuenta consolidada donde aparezca el valor de la caza en los bosques polacos, el valor de la carne por sí sola, sobre la base de la población de animales de caza existentes en 1991 y suponiendo una tasa de eliminación selectiva adecuada, sería de casi 35 millones de dólares EE.UU. al año, equivalente a unos 5 dólares EE.UU. por ha de bosque.

Para estimar el valor total de la caza, al valor de la carne deberá sumarse también el excedente del consumidor procedente de los gastos deportivos, trofeos, etc. No sería equivocado duplicar el valor anual por hectárea para la carne de caza. Incluso a los precios actuales muy desvalorizados, un gamo rojo o un alce se venderá a un precio de hasta 1500 dólares EE.UU. y un jabalí entre 100 y 1000 dólares EE.UU., según el tamaño de los colmillos. Por otra parte, la caza proporciona oportunidades y crea una actividad económica no despreciable en otros sectores, derivada del suministro del material necesario, incluidos fusiles, municiones, vestidos, binoculares, etc.

Actividades de esparcimiento: los valores recreativos (de esparcimiento) se calculan utilizando el método de los gastos de viaje. Como se ha mencionado anteriormente, la cubierta forestal de Polonia tiene una gran importancia desde el punto de vista social, y el valor de los bosques depende de la utilidad recreativa y de esparcimiento. Los valores recreativos dependen del papel socioeconómico y cultural de las tierras forestales así como de la densidad demográfica y la madurez de las masas forestales. Las estimaciones para Polonia oscilan entre 2 dólares EE.UU. por ha al año para el pino joven, hasta 45 dólares por ha al año para las masas mixtas de árboles maduros de madera dura. Cuando las masas boscosas se venden a compradores con fines recreativos privados a los que se permite construir sencillas casas de verano, los precios ascienden a más de 4250 dólares EE.UU. por ha.

En 1990 se realizó un estudio exhaustivo para calcular el excedente del consumidor que en el Reino Unido se da al sector forestal en función de sus usos recreativos y de esparcimiento (Benson y Willis, 1990). En este estudio se utilizó la «metodología de los gastos de viaje», en la que se supone que el valor recreativo que las personas obtienen de visitar un bosque debe ser al menos igual a lo que les ha costado llegar a él, lo cual es muy probable que sea una estimación insuficiente del valor total recreativo para el usuario. Los resultados de este estudio dieron un excedente medio del consumidor para todos los tipos de bosques de 89 dólares EE.UU. por ha y año. El valor oscilaba entre 6 dólares por ha para las coníferas de tierras altas y 784 dólares por ha para las frondosas de las llanuras. En Suecia se ha estimado una cifra media para el país de 6 dólares EE.UU. por ha (Wibe, 1992). Como estaba previsto, la menor densidad de población y la mayor proporción de bosques existentes en Suecia en comparación con el Reino Unido da unos valores por ha más bajos para el excedente del consumidor.

FIGURA 1 Esbozo de la metodología utilizada cuando se cuantifican todos los beneficios no derivados de la madera como función de los beneficios derivados de la madera

El valor correspondiente a Polonia deberá reflejar la densidad demográfica relativamente alta de ese país, el fácil acceso a la mayor parte de los bosques con fines recreativos y de esparcimiento así como la clara importancia que tienen los bosques en la sociedad polaca.

Además, los beneficios recreativos pueden elevarse con el tiempo en términos reales en la misma medida que el precio de la madera. Los datos procedentes del Reino Unido demuestran que las actividades recreativas al aire libre han aumentado a un ritmo del 2 por ciento anual. A medida que los ingresos per cápita reales comiencen a aumentar en Polonia, cabe esperar un aumento equivalente de los valores recreativos y de esparcimiento. En cualquier análisis se tendrá en cuenta probablemente una tasa real de incremento del 1 por ciento anual a partir del año 2000; no obstante, si se utilizan las comparaciones con otros países se deberán tener en cuenta las diferencias relativas a los ingresos por habitante y al poder adquisitivo.

Recolección de productos no madereros: el valor de las bayas silvestres, los hongos, etc. se calcula a partir del valor de las ventas actuales más estudios de las recolecciones realizados por personas privados. La recolección de bayas silvestres, hongos, etc. por explotadores comerciales se paga en virtud de un contrato con el Servicio Forestal. Durante 1991, el Servicio Forestal Polaco ganó un superávit de esos productos no madereros de 0,5 dólares EE.UU. por ha. Se estima que la recolección privada de productos no madereros es tres veces superior a la de carácter comercial, lo que da un valor total medio de 2 dólares EE.UU. anuales por ha.

El bosque en la absorción de carbono. En las condiciones climáticas de las zonas templadas del norte de Europa, la repoblación forestal produce aumentos netos de retención de carbono durante un período de unos 100 años a partir de la plantación de las coníferas y de las frondosas de rápido crecimiento, y de unos 200 años en el caso de todas las demás frondosas. Posteriormente, esta retención de carbono se ve compensada por la descomposición y no se produce ningún nuevo aumento en su almacenamiento.

CUADRO 3. Nivel de beneficio público por tipo de suelo y vegetación como función de los ingresas procedentes de la madera en Eslovaquia

Tipo de vegetación

Emplaz.

Altitud
(m.s.n.m)

Tipo de suelo

extremo

ácido

buena nutrición

superior a la media

con humus

con humedad

X

Z

Y

M

K

N

I

S

F

C

W

B

H

D

A

J

L

U

V

Pino enano
(Pinas mugo)

8

por encima de1500

-

10,0

-

-

5,0

-

-

-

-

-

-

-

-

-

-

-

-

-

-

Pícea

7

1250-1550

-

5,0

5,0

2,0

2,0

4,0

-

2,0

2,0

-

-

-

-

-

4,0

-

-

-

2,0

Pícea/ haya/abeto

6

900-1300

3,0

-

-

0,7

-

2,0

-

0,7

0,7

-

1,0

0,7

-

-

-

0,4

-

-

-

Abeto/haya

5

500-1000

3,0

3,0

3,0

0,4

0,4

1,0

0,4

0,4

0,4

1,0

1,0

0,4

0,4

0,4

1,0

0,4

1,0

0,4

0,4

Haya

4

400-800

3,0

3,0

3,0

0,4

0,4

1,0

0,4

0,4

0,4

1,0

1,0

0,4

0,4

0,4

1,0

0,4

-

-

0,4

Roble/haya

3

300-700

3,0

3,0

3,0

0,4

0,4

1,0

0,4

0,4

0,4

1,0

1,0

0,4

0,4

0,4

1,0

0,4

1,0

0,4

0,4

Haya/roble

2

200-500

3,0

3,0

n/a

0,4

0,4

1,0

0,4

0,4

-

1,0

1,0

0,4

0,4

0,4

1,0

0,4

0,4

-

0,4

Roble

1

por debajo de 300

3,0

3,0

n/a

0,4

0,4

1,0

0,4

0,4

-

1,0

-

0,4

0,4

0,4

1,0

0,4

0,4

0,4

0,4

Clave:

X - sin suelo.

K - medianamente pobre

F - de pendientes empinadas.

A - con rocas.

Z - extrema acidez.

(composición de grano más pesado).

W - drenaje deficiente.

J - con desechos.

Y - cubierta de suelo muy fina.

N - pedregoso, rocoso.

C - se seca fácilmente, susceptible a la sequía.

L - llanura.

M - pobre (composición do grano

I - compacto.

B - normal, medio.

U - valle.

muy ligero).

S - medianamente rico.

H - buena cubierta de suelo.

V - húmedo.



D - buena cubierta de suelo.

- no existe ese tipo de emplazamiento.

Fuente: Instituto de Investigación Forestal, Zvolen.

FIGURA 2 Análisis económico de proyectos forestales

La razón para incluir la retención de carbono como parte de la economía de los productos y servicios forestales no madereros es que Polonia, junto a otros muchos países, ha concordado estabilizar, al menos, las emisiones de dióxido de carbono para principios del próximo siglo. Se acepta en general que los «sumideros» de carbono (como los bosques) tienen un efecto opuesto a una emisión permisible.

Para calcular el valor que supone fijar una tonelada de dióxido de carbono, se han sugerido dos sistemas: (i) el del daño evitado, en el que se estima que el valor de una tonelada de dióxido de carbono es igual al daño que habría producido si no se hubiera retenido el carbono, y (ii) el sistema de la compensación, en el que se establece que el valor de la retención del carbono es igual al costo de anular las emisiones de dióxido de carbono mediante la inversión en tecnología para reducir dicho gas.

Utilizando el sistema del daño evitado, las estimaciones de los daños provocados por el calentamiento de la atmósfera se han calculado sobre la base de las pérdidas estimadas en el PNB (Walter y Ayres, 1992). En el caso de un «daño medio» se obtiene una cifra de 13 dólares EE.UU. aproximadamente por tonelada de carbono. Las estimaciones de daño evitado oscilan entre 20 y 40 dólares EE.UU. (en precios de 1991). Los trabajos realizados en el Reino Unido utilizando el sistema de la compensación (Andersen, 1990) indican una cifra de 28 dólares EE.UU. por tonelada de carbono, cantidad que se encuentra dentro de los límites del sistema de daño evitado. Dada la situación de las investigaciones actuales, no sería descabellado fijar una cifra de 30 dólares EE.UU. por tonelada de carbón neto retenido.

Cuantificar todos los beneficios

Según este sistema, es necesario cuantificar todos los beneficios de los productos y servicios no madereros como función de los beneficios obtenidos de la madera; para esto deberían realizarse investigaciones básicas para establecer, con respecto a una zona (o zonas) forestal determinada, cuáles son los beneficios importantes, cómo se ven afectados por las actividades forestales en curso y cómo pueden ser cuantificados en términos físicos y monetarios. Se elaboran entonces datos del programa de investigación, que pueden utilizarse para expresar el valor de los beneficios no derivados de la madera en relación con los ingresos forestales comerciales para una determinada zona y proyecto. Se elaboran varios «coeficientes» generales para adscribirlos a beneficios concretos, que pueden utilizarse para evaluar los proyectos forestales de una determinada región. El programa de investigación en curso proporciona una información de retorno mediante la cual estos coeficientes pueden actualizarse periódicamente a medida que los valores relativos cambian con el tiempo. A medida que aumenta el programa de investigación, se pueden utilizar estimaciones corregidas de distintas zonas forestales. Al evaluar los efectos de la contaminación ambiental sobre los valores forestales, Nilsson (1992) da una visión general de lo que podrían ser estos valores para los bosques europeos. Sus conclusiones se basan en un amplio análisis de los resultados de las investigaciones publicadas.

En principio, se podrían elaborar para cada país un conjunto de «coeficientes» tipo, que se utilizarían para analizar los proyectos forestales. El procedimiento se asemeja al de utilizar un coeficiente de conversión estándar para convertir los costos financieros de la mano de obra en sus valores económicos, o realizar un ajuste para los bienes comercializados; o bien aplicar una tasa de interés límite que sustituya al costo de oportunidad del capital. Se puede discutir la exactitud del margen pero no la premisa básica de que los beneficios establecidos cualitativamente deben tener un cierto valor cuantitativo. Una segunda premisa es que, una vez que se hayan establecido los multiplicadores de base, calcular la diferencia relativa entre los beneficios procedentes de una gestión forestal comercial y los otros beneficios es más fácil que calcular el nivel real de los otros beneficios propiamente dichos. La utilización de dicha metodología para evaluar un proyecto constituye un proceso de cinco etapas principales que se ilustran en la Figura 1.

Hay dos factores que pueden aducirse en defensa de la aplicación de este sistema en Eslovaquia. Primero, que muchos de los beneficios económicos, especialmente la protección del suelo y del agua, son difíciles de cuantificar; segundo, que la investigación básica para cuantificar esas funciones forestales se inició en los años cincuenta. Esta investigación se publicó a finales de los años setenta (Papánek, 1978) y se utilizó como contribución a la adopción de decisiones, para perfeccionar las prácticas de ordenación forestal. Con estos estudios empíricos se pretendía medir los beneficios de los productos y servicios no forestales en términos físicos, y asignarles un valor monetario.

El objetivo de la investigación es proporcionar un marco consistente y de base empírica a través del cual los responsables de la ordenación forestal puedan tener en cuenta las funciones no relacionadas con la producción de madera de los bosques en sus planes y operaciones. La utilización práctica de esta investigación se ha visto limitada en el pasado por los rígidos procedimientos de planificación, y actualmente se ve dificultada por la falta de recursos.

En el Cuadro 3 se hace un resumen de algunos resultados para los distintos ecotipos forestales de Eslovaquia, calculados por el Instituto de Investigación Forestal de Zvolen. Los coeficientes se han obtenido para una matriz de tipo forestal (por especies dominantes y altitudes) frente a los principales tipos de suelo. Estos coeficientes representan el valor no comercial total del bosque en relación con su valor comercial, medido en producción de madera. Por ejemplo, el valor de los bosques de pino enano de tierras altas cultivados en suelos ácidos, según los beneficios obtenidos de los productos y servicios no madereros, es cinco veces mayor que el valor de la madera que se obtiene en dichos bosques. Por el contrario, los bosques de hayas situados entre 400 y 800 metros por encima del nivel del mar en suelos similares tienen un valor, en función de los beneficios derivados de los productos no madereros, que asciende a un 40 por ciento del valor de la madera. Los coeficientes establecen una relación entre los valores no comerciales y los valores comerciales, y no pueden compararse entre sí antes de que se hayan convertido en valores monetarios. Por ejemplo, no se puede decir que el valor de la protección del suelo en los bosques de pinos enanos de tierras altas sea superior al de los bosques de hayas de llanura ya que estos valores se refieren al de la madera producida en tales bosques, valor que será menor para el pino enano que para el haya. El Instituto de Investigaciones Forestales hizo una clasificación de los beneficios no madereros, desglosándolos en 22 funciones diferentes que, en general, corresponden a la lista que figura en el Cuadro 2.

La investigación se ha utilizado también para elaborar orientaciones mediante las que se establecen las normas técnicas y de gestión aplicables a las operaciones forestales realizadas en Eslovaquia. Se ha perfeccionado un sistema de clasificación para las distintas actividades, que se relaciona seguidamente con las puntuaciones máximas concedidas a sitios especiales y en las que se tienen en cuenta la capacidad de los bosques para proporcionar productos y servicios no madereros. Este sistema es similar al adoptado para muchos procedimientos de supervisión de bosques, con el que se intenta juzgar la idoneidad de las actividades forestales en términos ambientales para lugares concretos.

CONCLUSION

Tanto en Polonia como en Eslovaquia se da la gran oportunidad de utilizar las inversiones realizadas en el pasado en investigación básica y desarrollar aptitudes profesionales entre las que se incluye la economía de los productos y servicios no madereros, a fin de definir las normas y disposiciones para la gestión de la propiedad nacional forestal. Ambos países muestran un nivel muy alto de planificación y ordenación forestales. En muchos casos las disposiciones con respecto a la ordenación y a las políticas tienen el respaldo de una investigación detallada realizada durante largos períodos de tiempo. Sin embargo, ante las exigencias de una economía de planificación centralizada, no siempre era posible llevar a la práctica las recomendaciones derivadas de los resultados de la investigación.

La Figura 2 ilustra los distintos niveles a los que suelen analizarse las actividades forestales. La mayor parte se analiza utilizando los datos del nivel 1, que es donde se dispone de la mayor cantidad de datos. El nivel 1 corresponde con mayor exactitud a los beneficios que reciben de los bosques las personas privadas. Al hacerse cargo de los intereses y necesidades públicas, los servicios forestales se ven obligados a ampliar su análisis a fin de abarcar al menos los niveles 2 y 3. A niveles más altos, los datos se hacen más difíciles de obtener y las decisiones obedecen cada vez más a evaluaciones subjetivas. Como se ha demostrado en el presente artículo, la sólida base técnica de los servicios forestales de Polonia y Eslovaquia permite realizar este tipo de análisis.

Bibliografía

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Benson, J.F. y Willis, K.G. 1990. The aggregate value of the non-priced recreation benefits of the Forestry Commission estate. Reino Unido, Forestry Commission.

Nilsson, S. 1992. Sustainability of European forest resources - a case study. Laxenburg, Austria, IIASA.

Papánek F. 1978. Teória a prax funkene integrovaného lesného hospodárstva. [Teoría y práctica de funciones para la ordenación forestal]. Lesnícke stúdie 29. Bratislava, Eslovaquia, Príroda.

Walter, J. y Ayres, R. 1992. Global warming: damages and costs, and Global warming: abatement policies and costs. Laxenburg, Austria, IIASA.

Wibe, S. 1992. Markets and intervention failures: Sweden. París, OCDE.


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