FAO/SMIA - Cosechas y escaseces alimentarias No.3, Junio 1999 - Page 4

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RESUMEN : ESTADO DEL TIEMPO Y PERSPECTIVAS DE LAS COSECHAS

En el Africa septentrional, ha comenzado la recolección de los cereales de invierno. Las condiciones han sido variadas en toda la subregión. En Marruecos y Túnez, la producción de trigo debería descender este año debido a la insuficiencia de las precipitaciones y a la reducción de la superficie plantada. También se pronostica una fuerte disminución de la producción de cebada en Marruecos. En cambio, en Argelia y Egipto unas condiciones favorables beneficiaron tanto al trigo como a los cereales secundarios, y se pronostica un aumento de la producción. En Egipto ha comenzado la plantación del arroz de 1999.

En Africa occidental, hasta ahora las precipitaciones han sido irregulares, lo que aumenta el riesgo de pérdidas de cosechas. En conjunto, la cosecha principal de maíz es satisfactoria en el sur, y la plantación de mijo y sorgo está casi terminada en el norte. Las perspectivas de los alimentos son muy desfavorables en Sierra Leona debido a la persistencia de la inseguridad. El suministro de alimentos y las perspectivas de las cosechas han mejorado en Liberia debido a la paz y a los programas de rehabilitación, pero la situación alimentaria sigue siendo inestable. En los países sahelianos, está en marcha la plantación de los cereales secundarios, tras el comienzo de las lluvias en abril. La disponibilidad de semillas es en general suficiente gracias a las cosechas sin precedentes obtenidas en 1998 en los principales países productores.

En Africa central, ha comenzado la plantación de cereales secundarios en el Camerún y la República Centroafricana. La agricultura sigue limitada por los disturbios civiles en la República del Congo y la República Democrática del Congo, donde se está a punto de recoger otra mala cosecha de la temporada B.

En Africa oriental, las perspectivas iniciales para los cosechas son variadas. En Tanzanía y Uganda, se están recogiendo las cosechas de la temporada principal y se pronostica una producción entre normal y superior a lo normal, gracias a un tiempo favorable. En Kenya y Somalia, se prevé que la producción de cereales de la temporada principal de 1999 será mala debido a la escasez e irregularidad de las lluvias y a los daños causados por las orugas negras. En Etiopía, las perspectivas para los cultivos "belg" son desfavorables debido a la falta de lluvias. En el Sudán, la producción de trigo de 1999 es muy inferior a la media debido a una reducción de la superficie plantada. En Eritrea, han comenzado los preparativos de la tierra para los cultivos de la temporada principal, pero las lluvias cortas de marzo a mayo fueron deficientes.

En Africa austral, ha terminado la recolección de las cosechas de cereales de la temporada principal de 1999. Pese a unas lluvias abundantes recibidas al principio de la temporada, unas rachas secas y temperaturas elevadas registradas en algunos países a partir de febrero afectaron a los rendimientos más de lo previsto. Se estima que la producción total de cereales es inferior a la media, como el año pasado. Sin embargo, la producción varía considerablemente. Malawi, Mozambique y Zambia obtuvieron cosechas buenas, mientras que en Madagascar y Swazilandia se prevé que la producción estará cercana a la media. En Sudáfrica, se estima que la producción de cereales será inferior a la menguada cosecha del año pasado debido a las inundaciones y a la sequía. En Botswana, Lesotho y Namibia la producción de cereales es superior a la de 1998, pero inferior a la media. En Angola, pese al tiempo favorable reinante durante la campaña la producción de cereales es inferior a la del año pasado debido a la reanudación de la guerra civil.

En Asia, el tiempo seco registrado durante las dos primeras décadas de junio beneficiaron la recolección de la cosecha de trigo de invierno en las principales zonas productoras de China septentrional. Se necesitan, sin embargo, más lluvias para el arroz y el maíz que están despuntando en el sur. Las lluvias monzónicas se intensificaron en la India, y llegaron hasta Punjab/Haryana en el norte. Las lluvias favorecieron también la plantación temprana de los cultivos (kharif) de arroz y cereales secundarios. Se pronostica un monzón normal, el undécimo consecutivo. En el Pakistán, el tiempo favorable imperante desde mediados de febrero hasta abril mejoró las perspectivas de la cosecha tardía de trigo que está en fase de maduración, lo que indica una revisión al alza de la producción. En Bangladesh, unas lluvias torrenciales provocaron inundaciones en el sudeste, causando algunos daños a los cultivos. Las informaciones actuales dan a entender que el país recibirá fuertes precipitaciones monzónicas este año, como el año pasado, lo que suscita preocupaciones por la posibilidad de inundaciones generalizadas y pérdidas de cosechas. Unas lluvias generalizadas e intensas retrasaron también la plantación de arroz en el Japón, pero aumentaron los suministros de humedad en las partes meridionales y centrales. Un tiempo seco registrado en la península coreana está causando preocupación por los importantes cultivos alimentarios de la República Popular Democrática de Corea, donde las precipitaciones han sido en general inferiores a la media desde el comienzo del año. Mucho dependerá de las precipitaciones que caigan en los próximos dos meses para el arroz y el maíz en desarrollo. En Tailandia, las precipitaciones favorecieron el arroz y el maíz de la temporada principal, pero en las partes septentrionales de Viet Nam, se señalan algunos daños debido al ciclón tropical Maggie. En otras partes, en Filipinas, un tiempo más seco registrado en la segunda década de junio alivió las condiciones húmedas anteriores, mientras que en las principales zonas productoras de arroz de Indonesia se señala que los abastecimientos de riego son suficientes para la cosecha de la segunda temporada. Una sequía, la más grave en decenios, redujo drásticamente la producción de trigo en algunos países del Cercano Oriente. En Jordania, la producción de trigo de 1998/99 se calcula en menos del 13 por ciento de la de 1997/98. También se prevé una producción de trigo inferior a la media en el Iraq y Siria. En el Afganistán, la producción de cereales de 1999 debería disminuir debido a la escasez de precipitaciones y de cubierta de nieve registrada en el invierno pasado, y a la inseguridad y falta de insumos. Con respecto a los ocho países de la CEI en Asia: en Kazajstán, ha comenzado la plantación de la cosecha principal; los niveles de humedad han sido satisfactorios, pero se supone que la escasez de fondos y de crédito reducirá la superficie sembrada. En Uzbekistán, la superficie total sembrada se mantuvo inalterada, pero el aumento de los rendimientos obtenidos en las parcelas privadas podría acrecentar la producción de este año. En Turkmenistán, la producción de cereales aumentó de forma pronunciada en 1998, y para este año se pronostica sólo un aumento marginal. En Tayikistán, disminuyó la superficie sembrada con cereales (principalmente trigo), y ahora se pronostica que la producción disminuirá a 420 000 toneladas, frente a las 510 000 del año pasado. En Armenia, se prevé un descenso de la producción debido a un otoño e invierno secos que redujeron la superficie sembrada y causaron daños al trigo de invierno. En la República de Kirguistán, continúa la siembra de cultivos más rentables, y la producción de cereales podría descender a alrededor de 1,5 millones de toneladas. En Azerbaiyán, unas lluvias intensas favorecieron la producción, que probablemente se mantendrá en torno a un millón de toneladas, volumen semejante al del año pasado. En Georgia, la producción podría aumentar a 850 000 toneladas, frente a las 800 000 toneladas de 1998. En los países bálticos, Estonia, Letonia y Lituania, el trigo y el centeno de invierno se beneficiaron de un invierno benigno, y las perspectivas iniciales para los cereales de primavera son satisfactorias.

En América Central y el Caribe, unas lluvias tempranas favorecieron la plantación de los cultivos de cereales y frijoles de la primera temporada de 1999/2000. Se prevé que la superficie plantada será de nivel medio en la mayoría de los países, salvo en Honduras donde los precios bajos constituyen un desincentivo. Si las condiciones son normales, se espera una recuperación de la producción respecto a la del año pasado, afectada por el huracán "Mitch". En México, una racha seca prolongada afectó gravemente a los cultivos, al ganado y a los pastizales. En Cuba, un tiempo excepcionalmente seco afectó gravemente en los últimos meses a los cultivos alimentarios secundarios y a los pastizales, particularmente en las provincias orientales. En cambio, las condiciones atmosféricas favorecieron el desarrollo de los cultivos en Haití y la República Dominicana, donde se pronostica una producción media.

En América del Sur, ha terminado la recolección del maíz de 1999 en la mayoría de los países australes. Se pronostica provisionalmente una producción media, salvo en Chile, donde la producción es mala debido a una grave sequía. En los países andinos, ha comenzado la recolección del maíz y los cereales secundarios en Bolivia, Perú y Ecuador, y se pronostica una producción entre media y superior a la media. En los dos primeros países se prevé una producción de papa superior a la media. En Colombia, la plantación de los cereales secundarios y el arroz de 1999 está casi terminada. La producción de maíz debería disminuir debido al tiempo desfavorable registrado durante la siembra, mientras que la de arroz se prevé superior a la media. En Venezuela, se estima que la producción arrocera de 1999 será ligeramente inferior a la media.

En Europa, las últimas informaciones confirman una disminución de la producción de cereales en la CE, para situarse en 202,5 millones de toneladas, un 4 por ciento menos que en 1998. Ello se debe a la reducción de la superficie plantada y al tiempo desfavorable registrado en algunas partes. Las condiciones secas afectaron al trigo en una de las principales zonas productoras de España, y también en algunas partes de Portugal, mientras que la plantación de maíz actualmente en curso en el sudoeste de Francia se ha visto gravemente afectada por unas lluvias torrenciales. También se prevé una disminución de la producción de 1999 en algunos países de Europa oriental debido a una disminución de la superficie plantada y/o al mal tiempo. En la República Federal de Yugoslavia, las perspectivas para la producción de cereales de 1999 siguen siendo inciertas, pero es probable que la producción descienda. La plantación del trigo de invierno disminuyó, y es posible que la escasez de combustible y fertilizantes y la inseguridad hayan afectado a la siembra de primavera. En la provincia de Kosovo, la producción agrícola de 1999 será extremadamente escasa, debido a los conflictos registrados recientemente. En los cuatro países de la CEI que están en Europa, una primavera temprana y benigna permitió la siembra temprana de primavera y mejoró las condiciones para los cultivos de invierno. Se supone, sin embargo, que las heladas tardías caídas en mayo en algunas partes de Belarús, la Federación de Rusia y Ucrania, y los problemas económicos deprimirán los rendimientos. En Moldova, los problemas financieros y las oportunidades limitadas de comercialización deberían mantener la cosecha de 1999 cerca del nivel del año pasado (2,7 millones de toneladas. En la Federación de Rusia, el pronóstico inicial de la FAO relativo a la producción de cereales y legumbres se mantiene en 65 millones de toneladas, volumen ligeramente inferior a la media de los últimos cinco años, pero alrededor de 10 millones de toneladas más que el año pasado. En Ucrania, las perspectivas iniciales son buenas, ya que la situación de los cultivos es satisfactoria y la siembra de primavera está llegando a su término. La producción total de cereales y legumbres se pronostica provisionalmente en 32 millones de toneladas, un 10 por ciento más que el año pasado.

En América del Norte, se pronostica que la producción de trigo de los Estados Unidos descenderá en alrededor del 12 por ciento, a unos 61 millones de toneladas, debido a una reducción de la superficie sembrada con trigo de invierno, la menor desde 1972/73. La plantación de maíz está terminando en condiciones en general favorables. Sin embargo, se prevé que la superficie será inferior a la del año pasado, y se pronostica que la producción total de cereales secundarios descenderá en alrededor del 3 por ciento a 262 millones de toneladas. En Canadá, el tiempo húmedo y frío impidió la plantación del trigo en mayo. Pero podría avanzar rápidamente si mejoran las condiciones en las semanas venideras. La plantación de cereales secundarios dependerá también del tiempo que impere en las próximas semanas, aunque todo parece indicar que la superficie plantada disminuirá debido la siembra de cultivos no cerealeros.

En Oceanía, las perspectivas para las cosechas de invierno de 1999 en Australia son favorables, gracias a las lluvias generalizadas que llegaron al final de mayo. En 1999 se espera una producción favorable de alrededor de 21 millones de toneladas.


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