AUSTRALIA (16 de septiembre)
Las perspectivas para las cosechas de trigo y cereales secundarios de invierno de 1999 son satisfactorias hasta ahora, y las informaciones actuales señalan una producción total de alrededor de 31 millones de toneladas, cerca de 1 millón de toneladas más que el año pasado. La superficie sembrada con trigo aumentó marginalmente este año a cerca de 12 millones de hectáreas. Aunque la sequía retrasó al comienzo las plantaciones, las condiciones de crecimiento mejoraron posteriormente y ahora se prevé otra cosecha buena, de 22 millones de toneladas, un 4 por ciento más que el año pasado, siempre y cuando el estado del tiempo siga siendo favorable hasta la cosecha que comenzará en octubre. En cambio, la superficie sembrada con cebada y avena disminuyó del 10 y el 6 por ciento, respectivamente, y se prevén cosechas algo menores. La cosecha de arroz de 1999 está casi terminada y, gracias a unas condiciones de crecimiento favorables reinantes durante toda la campaña, se pronostica que la producción alcanzará a 1 350 000 toneladas, volumen ligeramente superior al de la temporada anterior y cercano al nivel récord establecido en 1997.
PAPUA NUEVA GUINEA (9 de septiembre)
Unas lluvias fuertes caídas al final de agosto y unas mareas altas causaron inundaciones en las zonas costeras de la provincia central y en algunas zonas meridionales, afectando a unas 30 000 personas. Sufrieron daños los huertos familiares, los abastecimientos de agua y las viviendas, pero ha sido difícil realizar una evaluación precisa de la situación a causa del mal estado de los caminos en las zonas afectadas, que ha limitado el movimiento de los equipos de evaluación de los daños y del socorro necesario.
El país ha recibido lluvias entre normales y superiores a lo normal durante el período vegetativo. Esto benefició a los cultivos, principalmente raíces y tubérculos, y las perspectivas de la cosecha son favorables hasta ahora. Sin embargo, es probable que la situación del suministro de alimentos sea difícil para los grupos vulnerables de la población y para aquéllos que perderán sus cosechas como consecuencia de la sequía.