CE (10 de febrero)
En la CE, se prevé un aumento de la superficie sembrada con trigo para la cosecha del 2000. La condiciones imperantes en el otoño para la siembra fueron en general favorables y se calcula que la superficie plantada con trigo aumentará en alrededor de un 5 por ciento. El aumento se producirá a expensas de las semillas oleaginosas, debido a la gran cantidad de existencias de dicho producto y a la disminución de la ayuda dada al productor para su producción en el 2000 en el marco del primer año de la reforma del Programa 2000. Entre los productores principales, en Francia la superficie total sembrada con trigo debería aumentar en alrededor del 2 por ciento, mientras que en Alemania podría aumentar hasta como en un 10 por ciento. También se prevé que aumentará algo la superficie de trigo en el Reino Unido. Con respecto a las cosechas de cereales secundarios de la Comunidad en el 2000, las primeras informaciones indican alguna reducción de la superficie dedicada a la cebada y al centeno pero un ligero aumento de la superficie sembrada con maíz.
ALBANIA (11 de febrero)
Unas condiciones atmosféricas en general favorables para la plantación de los cereales de otoño hacen pensar que sería posible alguna recuperación de la producción de cereales en el 2000 después que el mal tiempo imperante durante los períodos de siembra tanto de otoño como de primavera redujo la superficie total sembrada con cereales y la producción de 1999. Sin embargo, el potencial de producción sigue siendo limitado por la falta de crédito que es el problema principal para aumentar la utilización de fertilizantes y otros insumos.
El PMA sigue prestando asistencia alimentaria a unas 600 000 personas que han quedado vulnerables a raíz de la crisis balcánica. En colaboración con otros asociados en la ejecución, el PMA ha dado comienzo a tres iniciativas de alimentos por trabajo (APT) a la vez que continúa distribuyendo alimentos a personas empobrecidas económicamente a las que la crisis de refugiados ha afectado negativamente.
BELARUS (3 de febrero)
Los informes oficiales indican que la superficie sembrada con cereales de invierno es de 1 155 millones de hectáreas, nivel superior al objetivo. La sembrada con trigo aumentó de un 4 por ciento a 240 000 hectáreas. Se señala que la situación de los cereales y legumbres de invierno es satisfactoria, y que se han aplicado más fertilizantes. El gobierno espera que el aumento de la utilización de fertilizantes y unas condiciones atmosféricas mejores se traduzcan en una producción de cereales y legumbres de al menos 5 millones de toneladas en el 2000. Los precios de compra oficiales para la carne y la leche aumentarán de forma pronunciada en enero y febrero para permitir que las fincas puedan financiar la siembra de primavera.
La producción de cereales y legumbres de 1999 se estima oficialmente en 3,7 millones de toneladas, casi un 40 por ciento menos que el nivel medio quinquenal, y un 25 por ciento menos que la mala cosecha de 1998. Esta producción mínima es el resultado combinado de los graves problemas económicos y del mal tiempo. Podría ser también que la notificación sobre la producción sea insuficiente dado el grado de interferencia en el mercado que ejerce el gobierno y la consiguiente escasez de la mayoría de los artículos en la cadena oficial de distribución. La producción agrícola ha descendido de forma pronunciada desde 1997 debido en parte a la mala situación financiera de las fincas estatales no reformadas. Los importantes créditos y subvenciones del gobierno, unidos a los precios estatales fijados para la producción en un clima de inflación galopante, han socavado gravemente la situación financiera de las fincas.
Tras la segunda mala cosecha de cereales consecutiva, el país necesita importar cereales para el consumo humano y para pienso. Es probable que las necesidades alimentarias puedan cubrirse, pero las dificultades para conseguir divisas podrían limitar el volumen de la compra de cereales forrajeros. Según estimaciones provisionales, las importaciones totales de cereales aumentarán en 500 000 toneladas a 1,2 millones de toneladas. El 1 de enero del 2000, el rublo de Belarús cambió de nombre y el nuevo equivale a 1000 de los antiguos.
BOSNIA Y HERZEGOVINA (1 de febrero)
La superficie sembrada con cultivos de invierno (principalmente trigo) se ha estabilizado en torno a las 100 000 hectáreas. Las perspectivas iniciales para los cultivos de invierno del 2000 son satisfactorias. Según las informaciones más recientes, la producción de cereales de 1999 (1,1 millones de toneladas) fue alrededor de un 4 por ciento inferior a la del año anterior, debido principalmente al mal tiempo y a la disminución de los rendimientos del trigo. La economía se vio perjudicada por los disturbios civiles registrados en la región, pero todo parece indicar que la cosecha y la situación general del suministro de alimentos no han sufrido trastornos mayores.
BULGARIA (11 de febrero)
En Bulgaria, la superficie sembrada con trigo de invierno se calcula en 1,1 millones de hectáreas, casi un 20 por ciento más que el año anterior, y ligeramente superior a la superficie prevista de 1 millones de hectáreas. Se señala que el tiempo reinante durante el período de siembra y en lo que va del invierno ha sido en general favorable.
CROACIA (2 de febrero)
Según los informes, la superficie sembrada con cereales de invierno aumentó después de la mala cosecha obtenida el año pasado, pero los problemas económicos continuarán dificultando... la producción. La cosecha de cereales de 1999 descendió de un 12 por ciento a 2,8 millones de toneladas. Los buenos rendimientos del maíz compensan sólo parcialmente el descenso del 46 por ciento de la producción de trigo, que se sitúa en 470 000 toneladas. Los problemas económicos, que redujeron la superficie plantada con cereales de invierno, se vieron exacerbados por el mal tiempo.
En conjunto, es probable que la situación del suministro de cereales sea satisfactoria en 1999/2000, ya que hay una cantidad considerable de existencias de trigo. Además de que la cosecha de 1999 ha sido escasa, los agricultores encuentran dificultad en obtener que los molineros y elaboradores paguen las ventas.
ESLOVENIA (11 de febrero)
Todo parece indicar que la producción de cereales del 2000 se recuperará respecto a la cosecha del año pasado que resultó menguada a causa del mal tiempo. Se informa que la plantación de cereales de invierno de la presente campaña se ha terminado en el período óptimo y que las condiciones atmosféricas para el arraigo de los cultivos fueron favorables.
ESTONIA (4 de febrero)
Según los informes, la superficie sembrada con cereales de invierno se mantuvo estable y las perspectivas iniciales para la cosecha del 2000 son satisfactorias. La producción de cereales de 1999 se estima oficialmente en 625 000 toneladas, alrededor de un 10 por ciento menos que en 1998 en vista de la reducción de la superficie sembrada. En 1999/2000, las importaciones de cereales se pronostican en cerca de 200 000 toneladas.
EX REPUBLICA YUGOSLAVA DE MACEDONIA (11 de febrero)
En esta fase inicial no se prevén cambios significativos en la producción de cereales del 2000. Se señala que las condiciones atmosféricas para los cultivos de invierno han sido en general favorables. Se estima que en la campaña en general favorable de 1999 la producción total ha alcanzado alrededor de 750 000 toneladas. El problema principal para la producción continúa siendo el acceso al crédito para los insumos, especialmente para los agricultores permanentes que no disponen de fuentes de ingresos secundarias.
Queda todavía en el país un total de aproximadamente 15 000 refugiados de Kosovo registrados, de los cuales unos 12 000 se alojan en familias y el resto en centros comunitarios. El PMA está distribuyendo la ración básica completa a todos los refugiados registrados.
FEDERACION DE RUSIA (15 de febrero)
Las perspectivas iniciales para los cereales y legumbres de invierno del 2000 son satisfactorias. La superficie sembrada con cultivos de invierno (13,9 millones de hectáreas) incluye alrededor de 12,6 millones de hectáreas de cereales y legumbres. Esta cifra es inferior al objetivo, y alrededor de 600 000 hectáreas menos que el año anterior, pero la situación de los cultivos es notablemente mejor. A medida que disminuye la superficie total de cereales y legumbres crece la proporción correspondiente a los cereales y legumbres de invierno, pero aún así en 1999 representó menos del 30 por ciento. Las perspectivas para la producción total indican que se ha arado sólo el 60 por ciento de la superficie que se plantará en primavera, lo que significa que será mayor la labor agrícola que deberá realizarse en esa estación...período. También se señala que escasean un tanto las semillas. Como aspecto positivo cabe señalar que por primera vez en cuatro años el sector en conjunto ha producido beneficios que se pueden contabilizar en 6 mil millones de rublos, frente a la pérdida de 36 mil millones de rublos sufrida en 1998. Esto se debe, en parte al aumento de la demanda de productos alimenticios internos, incentivada por la fuerte devaluación del rublo en 1998 que encareció los alimentos importados. El gobierno espera que la producción de cereales y legumbres alcanzará los 75 millones de toneladas, es decir 15-20 millones de toneladas más que la estimación oficial correspondiente a 1999 (54,7 millones de toneladas), y un volumen suficiente para satisfacer las necesidades internas y reponer algo las existencias.
La FAO calcula en 60 millones de toneladas la producción de cereales y legumbres de 1999, alrededor de 5 millones de toneladas más que la producción reducida por la sequía de 1998, pero todavía inferior a la media. La estimación de la FAO es mayor que la estimación oficial debido a que en los informes oficiales y extraoficiales hay una subestimación de por lo menos 5 millones de toneladas y, posiblemente, de hasta un 15-20 por ciento. La FAO calcula ahora la producción de trigo en 34 millones de toneladas, 4 millones de toneladas más que en 1998. Sin embargo, la proporción del trigo destinado al consumo humano (62 por ciento) fue inferior a la de 1998 (76 por ciento). La FAO considera que la producción de cereales secundarios ha aumentado de 2,5 millones de toneladas a 24,6 millones de toneladas, mientras que la de arroz en un 6 por ciento a 444 000. La producción de legumbres se calcula en torno a 1 millón de toneladas.
A pesar de que la producción ha sido algo mayor, en general la situación alimentaria sigue siendo difícil sin que exista la posibilidad de reconstituir las existencias rebajadas en 1998/99. En total, las necesidades del consumo humano deberían cubrirse, pero es probable que la disponibilidad de piensos siga estando limitada, lo cual indica la posibilidad de que las cabañas y la producción pecuaria disminuyan ulteriormente. Las restricciones impuestas por las autoridades regionales al movimiento de cereales y legumbres están agravando la situación. Los precios de los cereales, que se habían mantenido estables hasta el comienzo del año, también están aumentando como efecto del incremento del 15 por ciento del costo del transporte ferroviario de los cereales y legumbres desde Kazajstán, un proveedor importante.
Según las estimaciones, en 1999/2000 la utilización total de cereales disminuirá de 3 millones de toneladas a 71 millones de toneladas, incluidos 21 millones de toneladas destinados al consumo humano, 0,5 millones de toneladas para exportar a las repúblicas vecinas, y el resto para semilla, pienso, pérdidas, manufactura y (una parte mínima) para existencias al final de la temporada. Frente a esta necesidad, la disponibilidad interna de cereales (producción y existencias) se calcula en 65 millones de toneladas, con lo que queda una necesidad mínima de importación de 6 millones de toneladas. Las promesas de ayuda alimentaria efectuadas en lo que va de la campaña comercial 1999/2000 se han limitado a 300 000 toneladas de trigo (más otras 200 000 toneladas de trigo y productos elaborados para distribuciones selectivas). Además, las promesas de ayuda alimentaria ajustadas, arrastradas desde 1998/99, ascienden a 2,8 millones de toneladas, lo cual deja un saldo de poco menos de 3 millones de toneladas para cubrir con importaciones comerciales. En 1996/97 y 1997/98 se importó comercialmente un volumen mayor de cereales. La capacidad de importaciones comerciales ha mejorado desde la crisis financiera de agosto de 1998 y el país cuenta con un saldo considerable de excedentes comerciales.
La situación crítica de las aproximadamente 300 000 personas desplazadas en Chechenia o los países vecinos continúa empeorando, siendo desesperante para los que viven en los campamentos de refugiados. Muchos carecen de vivienda, alimentos, ropa, calefacción y suministros médicos en cantidad suficiente. En las montañas, el frío riguroso del invierno y las condiciones precarias de la vivienda dan lugar a enfermedades. El gobierno de Ingushetia, pequeño país de 300 000 habitantes que alberga en torno a 200 000 refugiados, ha pedido asistencia internacional particularmente dar alimentos y viviendas a los refugiados. La difícil situación de seguridad está impidiendo el transporte y la distribución de la asistencia.
La seguridad ayuda alimentaria de la población civil atrapada en Chechenia y, particularmente, en Grozny, la capital, está empeorando rápidamente y las perspectivas para los cereales y legumbres de invierno y los cultivos forrajeros son nada prometedoras. Se informa que sólo una pequeña parte de la superficie de labrantío está sembrada con cultivos de invierno o arada. La situación de la agricultura es crítica, debido a los graves daños causados al ganado y a la industria de la uva.
HUNGRIA (6 de febrero)
Según los informes, un tiempo favorable ha promovido el aumento de la superficie plantada con trigo en el otoño pasado, que se estima provisionalmente en torno a 1 millón de hectáreas, alrededor de un 35 más del nivel reducido del año anterior. Sin embargo, se señala que las grandes inundaciones de enero han afectado a varios miles de hectáreas de cultivos de invierno, lo cual probablemente tendrá un efecto significativo en el potencial de rendimiento de esos cultivos.
LETONIA (4 de febrero)
Las perspectivas iniciales para los cereales de invierno siguen siendo satisfactorias. Teniendo en cuenta el aumento de los precios de los cereales en los países vecinos, la superficie sembrada con cereales de invierno podría recuperarse. Se estima que la producción de cereales de 1999 descenderá en un 5 por ciento a 925 000 toneladas como efecto de la reducción del 11 por ciento de la superficie sembrada. No se alienta el comercio de cereales y los agricultores dejan los cereales forrajeros en las fincas o los venden a las fábricas. Las importaciones de cereales se limitan a alrededor de 70 000 toneladas al año, principalmente de trigo panificable.
LITUANIA (4 de febrero)
Todo indica que este año la superficie sembrada con cereales de invierno podría recuperarse. Hasta ahora las condiciones de crecimiento han sido satisfactorias. Se estima que la producción de cereales de 1999 ha descendido en casi el 25 por ciento a 2,1 millones de toneladas, como efecto de la reducción de la superficie y de los rendimientos. Pese a la disminución de la producción, es probable que la situación del suministro de alimentos siga siendo satisfactoria en vista de la gran cantidad de existencias remanentes de cereales.
MOLDOVA (4 de febrero)
Las perspectivas para las cosechas de invierno del 2000 son inciertas. Es probable que la sequía haya impedido el arraigo de los cultivos y es posible que en primavera tenga que resembrarse una proporción significativa de la superficie.
Se prevé que la producción total de cereales de 1999 descenderá a 2,1 millones de toneladas (de los 2,5 millones de toneladas en 1998) como efecto de la reducción del 11 por ciento de la superficie sembrada con trigo y de la sequía que afectó a los cereales de primavera. Como no hay exportaciones, la menguada cosecha de este año sería casi suficiente para satisfacer las necesidades alimentarias internas, y no se prevén grandes importaciones comerciales en la campaña comercial 1999/2000 (julio/junio). Ahora bien, el gobierno está haciendo algunas compras de cereales panificables y se está exportando una cantidad considerable no registrada.
POLONIA (11 de febrero)
En Polonia, a diferencia de otras partes de la región, se señala que las siembras totales de cereales de invierno han disminuido en un 4 por ciento a 5,1 millones de hectáreas. Las estimaciones oficiales provisionales cifran la superficie de trigo de invierno en alrededor de 1,8 millones de hectáreas, y la de centeno en 2,2 millones de hectáreas.
REPUBLICA CHECA (11 de febrero)
Según estimaciones oficiales, la superficie sembrada con cereales de invierno para la cosecha del 2000 ha aumentado en alrededor de un 15 por ciento, situándose en alrededor de 1,1 millones de hectáreas. La superficie sembrada con trigo es la que más ha aumentado con respecto al año anterior (alrededor de un 23 por ciento), situándose en más de 900 000 hectáreas.
REPUBLICA ESLOVACA (11 de febrero)
En la República Eslovaca, unas condiciones atmosféricas favorables para el período de siembra de los cereales de invierno apuntan a una recuperación de la superficie y de la producción de los cereales de invierno en el 2000 con respecto a la cosecha menguada del año pasado.
RUMANIA (11 de febrero)
En Rumania, todo parece indicar que la superficie sembrada con trigo de invierno ha vuelto a disminuir debido a las dificultades financieras de los agricultores y a la depresión del mercado interno de cereales. Al final del período normal de siembra del otoño pasado, se informaba que la superficie sembrada con trigo de invierno era de sólo 1 millón de hectáreas, mientras que la de cebada se cifraba en alrededor de 200 000 hectáreas. Tras la menguada cosecha obtenida en 1999, existe actualmente la preocupación de que escaseen los suministros de trigo antes de que comience la cosecha de verano del 2000. Si la producción de la cosecha del 2000 vuelve a disminuir, en el 2000/2001 se tendrán que efectuar importaciones significativas.
UCRANIA (4 de febrero)
La superficie sembrada con cultivos de invierno en el sector público alcanzó los 7,3 millones de hectáreas, cifra marginalmente inferior a la del año anterior. Sin embargo, dado que el arraigo de los cultivos se vio dificultado por la siembra tardía y los suelos secos, es posible que en la primavera tengan que resembrarse hasta 1,5 millones de hectáreas de los 7 millones de hectáreas sembradas con cereales de invierno. Esto es el doble de la superficie afectada por la destrucción invernal en 1999, y perjudicará el resultado de la cosecha. Las fuertes nevadas caídas en enero contribuyeron a reponer las reservas de humedad. Según los primeros indicios, las plantaciones de primavera podrían aumentar algo.
La FAO calcula la producción total de cereales y legumbres de 1999 en 27 millones de toneladas, alrededor de 2 millones de toneladas menos que la escasa cosecha de 29 millones de toneladas del año pasado. Este magro resultado se debe principalmente a las condiciones calurosas y secas imperantes en junio y julio, que exacerbaron los efectos de las dificultades económicas, la escasez de insumos, la intensa infestación de malas hierbas y las heladas intempestivas caídas en mayo. La FAO estima la producción de trigo en 15 millones de toneladas, alrededor de 2 millones de toneladas menos que el año pasado, y la de cereales secundarios en 11,3 millones de toneladas, frente a los 11,4 millones de toneladas del año anterior. Muchas regiones establecieron controles al libre movimiento de cereales y legumbres, y los esfuerzos desplegados por el gobierno y las autoridades regionales para cobrar las deudas de las fincas han redundado en una subestimación de los rendimientos efectivos. La validez de las estimaciones de la cosecha de este año también puede resultar afectada por los persistentes rumores sobre la devaluación del hryvnia después de las elecciones y por la divulgación de las iniciativas gubernamentales encaminadas a regularizar las exportaciones de cereales y legumbres. Por estas razones, la estimación de la FAO supera en alrededor de un 10 por ciento a las estimaciones oficiales (24,4 millones de toneladas, incluidos 13,5 millones de toneladas de trigo y 10,2 millones de toneladas de cereales secundarios).
Debida a una segunda mala cosecha consecutiva y a las cuantiosas exportaciones (5,8 millones de toneladas en 1998/99 y 2,7 millones de toneladas en el primer semestre de la actual campaña comercial), es posible que algunas zonas del país, deficitarias de cereales y legumbres, necesiten importar cereales. Para asegurar la disponibilidad de una cantidad suficiente de trigo, el gobierno ha aprobado una ley por la que se eximen de impuestos las importaciones de hasta 1,5 millones de toneladas de cereales, siempre y cuando se efectúen antes del 1 de septiembre del 2000. Las importaciones se financiarán con cargo a los recursos regionales. Es probable que debido a las existencias ocultas de cereales y a consideraciones de orden financiero las importaciones sean muy inferiores a ese nivel. Hay indicios de que se cubrirán las necesidades alimentarias de 1999/2000, pero la disponibilidad de piensos seguirá siendo limitada. Pese a la difícil situación interna, se ha seguido exportando porque corren rumores de que el gobierno se propone aplicar un derecho de exportación del 30 por ciento sobre los cereales (ya ha impuesto un 23 por ciento sobre la exportación del girasol). La FAO pronostica provisionalmente las exportaciones de cereales de 1999/2000 en 3,2 millones de toneladas, incluidos 2,1 millones de toneladas de trigo.
YUGOSLAVIA, REP. FED. DE (SERBIA Y MONTENEGRO)* (3 de febrero)
La escasez de insumos y de capital de explotación y los retrasos de la recolección de la cosecha de 1999 han impedido que se alcanzara el ambicioso objetivo de siembra de la cosecha de invierno, fijado en 1,1 millones de hectáreas. Según los informes actuales, la superficie sembrada con cultivos de invierno podría mantenerse cercana al nivel de alrededor de 840 000 hectáreas del año pasado. Los informes más recientes indican que se han sembrado 730 000 hectáreas de trigo, el cereal de invierno más importante, lo que representa un aumento de sólo el 3 por ciento respecto al año pasado. Hasta ahora, las condiciones de crecimiento han sido en general satisfactorias, pero es probable que la inflación galopante y la escasez de insumos mantengan los rendimientos en un nivel bajo. La escasez de combustible y de fertilizantes, debida a los daños sufridos durante los conflictos del año pasado, han determinado un aumento pronunciado de los precios de dichos productos.
En 1999, una cosecha récord de maíz de 7,5 millones de toneladas compensó la mala cosecha de trigo de sólo 2,1 millones de toneladas, y la producción total se estima oficialmente en poco más de 10 millones de toneladas, alrededor de un 14 por ciento más que el nivel medio. En 1999/2000 el país tiene un excedente exportable de hasta 1 millón de toneladas de maíz.
El país se encuentra en un estado de grave crisis económica a raíz del conflicto con Kosovo y de varios años de sanciones económicas. Hay 1,1 millones de refugiados, personas desplazadas en el interior del país y personas marginadas económica y socialmente, que necesitan asistencia alimentaria selectiva durante el invierno. Las necesidades alimentarias de estas poblaciones se incluyeron en el reciente llamamiento unificado de las Naciones Unidas en favor de Europa sudoriental. Frente a la petición del PMA de 188 000 toneladas de ayuda alimentaria, hasta el momento se han prometido menos de 30 000 toneladas.
Una misión de evaluación de cultivos de la FAO visitó la provincia de Kosovo a principios de enero y calculó que la superficie plantada con trigo de invierno era de 79 000 hectáreas, un 36 por ciento más que la de 1998 pero alrededor de un 10 por ciento menos que la superficie que se sembraba normalmente antes de los disturbios civiles de los últimos dos años.
El PMA continúa prestando asistencia alimentaria a alrededor de 600 000 personas que viven en la provincia de Kosovo; otras organizaciones ayudan a alrededor de 400 000 personas. Es probable, sin embargo, que durante la primavera y comienzos del verano (abril-junio) disminuya el número de kosovares que necesitan ayuda alimentaria, ya que mejoran las oportunidades (tanto oficiales como extraoficiales) de comercio y de empleo y los ingresos de las familias. Se prevé que la mayoría de las PDI regresarán a sus hogares al final del invierno; los que no regresen serán reclasificados como casos sociales a corto plazo ya que su necesidad principal consistirá en acceder a oportunidades de empleo u otras oportunidades generadoras de ingresos. Según la rapidez y la proporción con que se recuperen los sectores no agropecuarios de la economía, a partir de abril el número total de beneficiarios debería reducirse a 620 000.