Tras una peque�a revisi�n al alza, la producci�n mundial de cereales en 2000 se estima provisio-nalmente en 1 852 millones de toneladas (incluido el arroz en equivalente de elaborado), 1,8 por ciento menos que el a�o anterior y un volumen inferior tambi�n a la media de los �ltimos cinco a�os. El pron�stico de la utilizaci�n mundial de cereales en 2000/01 tambi�n se ha ajustado al alza desde el in-forme anterior, en 14 millones de toneladas, situ�n-dose en 1 909 millones de toneladas. Por consi-guiente, el d�ficit de producci�n se cifra ahora en 51 millones de toneladas. Sin embargo, pese a las perspectivas de una gran merma de las existencias, en los mercados internacionales los precios del trigo y de los cereales secundarios han aumentado poco en los �ltimos tres meses, a causa principalmente de la abundancia de suministros que poseen los pa�ses exportadores.
1998/98
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1999/2000
estim. |
2000/01
pron�st. | |
(. . . millones de toneladas . . .)
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Producci�n 1/
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1 900
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1 885
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1 852
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Trigo
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599
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591
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586
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Cereales secundarios
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911
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886
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869
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Arroz (elabor.)
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390
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408
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397
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Suministros 2/
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2 574
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2 585
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2 543
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Utilizaci�n
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1 872
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1 898
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1 909
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Comercio 3/
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219
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235
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236
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Existencias finales 4/
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700
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691
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640
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Todo parece indicar que la producci�n de trigo de 2001 en el hemisferio norte, ya plantado en su mayor parte, podr�a en el mejor de los casos man-tenerse cercana al nivel bajo de 2000. En Am�rica del Norte, las plantaciones de trigo de invierno des-cendieron nuevamente en 2000 en los Estados Uni-dos debido principalmente a las condiciones secas imperantes durante el per�odo de siembra, mientras que en Canad� se prev� que la superficie de trigo que se plantar� en primavera se mantendr� pr�cti-camente inalterada. En Asia, las informaciones ini-ciales se�alan una merma de las cosechas de trigo en China, la India y el Pakist�n. En Europa, se pre-v� una disminuci�n de la superficie de trigo en la CE, debido al mal tiempo imperante durante el pe-r�odo de siembra en algunas partes y a una pro-bable desviaci�n de la tierra al cultivo de cereales forrajeros y semillas oleaginosas. En otras partes de Europa, sin embargo, cabr�a esperar alguna recuperaci�n tras la producci�n reducida a causa de la sequ�a de 2000. En la Federaci�n de Rusia y Ucrania, las plantaciones han aumentado significa-tivamente y las condiciones han sido satisfactorias. En Africa del Norte, las condiciones para los cultivos de trigo de invierno han sido en general favorables hasta ahora, y la producci�n podr�a recuperarse algo del bajo nivel del a�o pasado. En el hemisferio sur, la plantaci�n de trigo para la cosecha de 2001 comenzar� a partir de abril.
Con respecto a los cereales secundarios de 2001, ya se han plantado en algunos de los principales pa�ses productores del hemisferio sur. En Africa austral, pese a unas condiciones de crecimiento favorables registradas en lo que va de la campa�a, la producci�n podr�a disminuir este a�o debido a una reducci�n de la superficie. En Am�rica del Sur, las condiciones de crecimiento han sido en general favorables. En la Argentina la superficie plantada disminuy�, pero aument� en el Brasil. En el hemis-ferio norte, la plantaci�n de los cereales secun-darios comienza alrededor de abril. En el hemisferio sur y la zona ecuatorial, la campa�a principal de arroz de 2001 est� muy avanzada, y la recolecci�n de la cosecha deber�a comenzar en torno a marzo. En el hemisferio norte, la plantaci�n de la campa�a de 2001 no comenzar� hasta abril/mayo.
La producci�n mundial de trigo en 2000 se estima provisionalmente en 586 millones de toneladas, 4 millones de toneladas m�s de lo que se hab�a pronosticado en noviembre, pero a�n as� alrededor de un 1 por ciento menos que en 1999 y poco menos de la media de los �ltimos cinco a�os. La revisi�n de este a�o se debe principalmente a los ajustes al alza realizados a las estimaciones finales correspondientes a algunos pa�ses asi�ticos, y a Canad� y la CE. La producci�n mundial de cereales secundarios en 2000 se cifra ahora en 869 millones de toneladas, pr�cticamente inalterada respecto al pron�stico de noviembre, 2 por ciento menos que el nivel de 1999 y 2 por ciento menos de la media de los �ltimos cinco a�os. Las revisiones m�s recientes implicaron una ulterior reducci�n significativa de la producci�n estimada en los Estados Unidos, y revisiones a la baja para algunos pa�ses africanos, que se vieron compensadas por revisiones al alza para algunos pa�ses de Asia, Am�rica del Sur y la CE. En el hemisferio norte, todav�a se est� recogiendo la cosecha de arroz de 2000 en algunos pa�ses de Asia, con algunos retrasos causados por inundaciones en Laos, Tailandia, Bangladesh y Camboya. La producci�n mundial de arroz se estima ahora provisionalmente en 594 millones de toneladas, volumen marginalmente superior al pro-n�stico de noviembre. En este nivel, la producci�n mundial ser�a inferior en alrededor de 17 millones de toneladas a la estimaci�n revisada para 1999, lo que representa la merma m�s significativa en tres decenios. Varios factores han contribuido a esta im-portante contracci�n, desde las cat�strofes natu-rales y los bajos precios vigentes en las campa�as pasada y actual hasta las pol�ticas gubernamentales dirigidas a reducir la oferta excedentaria.
El pron�stico m�s reciente relativo al comercio mundial de cereales en 2000/01 (julio/junio) se cifra ahora en 236 millones de toneladas, alrededor de 2 millones de toneladas menos de lo que se inform� en noviembre pero, ello no obstante, un nivel alto sin precedentes y superior en m�s de un mill�n de toneladas al volumen del a�o anterior. El pron�stico relativo al comercio mundial de trigo y harina de trigo (en equivalente en grano) en 2000/01 se ha rebajado a 108 millones de toneladas, 1,5 millones de toneladas menos que el pron�stico de noviembre y un volumen ligeramente inferior a la estimaci�n correspondiente al a�o anterior. Por el contrario, el pron�stico del comercio mundial de cereales secundarios en 2000/01 se ha aumentado en 500 000 toneladas desde el �ltimo informe, a 105 millones de toneladas. Esto representar�a un nivel r�cord del comercio de cereales secundarios, superior en 1,8 millones de toneladas, o sea casi 2 por ciento, al nivel del a�o anterior. El pron�stico del comercio de arroz en 2001 se ha ajustado a la baja (en 80 000 toneladas) respecto al �ltimo informe, situ�ndose en 23,2 millones de toneladas. En este nivel, exceder�a en alrededor del 3,5 por ciento del volumen estimado en 2000.
Es probable que las importaciones totales de cereales de los pa�ses en desarrollo alcancen en 2000/01 los 168 millones de toneladas, lo que representar�a un nivel superior a la media pero ligeramente inferior al volumen sin precedentes de la campa�a anterior. En valor, el coste de las importaciones de cereales de los pa�ses en desarrollo deber�a ascender en 2000/01 a un total de 23 mil millones de d�lares EE.UU., casi 2 mil millones de d�lares, o sea 9 por ciento, m�s que en 1999/2000. Las importaciones totales de los pa�ses de bajos ingresos y con d�ficit de alimentos (PBIDA) en 2000/01 se pronostican ahora en torno a los 70 millones de toneladas, menos que en el informe anterior y un nivel inferior en m�s de un mill�n de toneladas al nivel estimado del a�o anterior. Seg�n los pron�sticos actuales, los gastos totales de las importaciones de cereales de los PBIDA como grupo podr�an alcanzar los 9,5 mil millones de d�lares EE.UU., 8 por ciento m�s que en 1999/2000. El incremento se deber�a principal-mente a los precios relativamente m�s fuertes de la presente campa�a.
Las estimaciones de las existencias y la utiliza-ci�n mundiales de cereales en los dos �ltimos de-cenios se han ajustado en funci�n de unas revisio-nes importantes de la oferta y la demanda de cerea-les de China. El examen de los equilibrios hist�ricos entre la oferta y la demanda de China arroj� como resultado que las existencias y la utilizaci�n de pien-sos hab�an aumentado mucho pero que hab�a dis-minuido el consumo humano per c�pita con res-pecto a estimaciones anteriores. Sin embargo, es importante destacar que aunque los cambios pare-cen grandes en t�rminos absolutos, en las variables hist�ricas de la oferta y el consumo representan s�lo ajustes estad�sticos y, por lo tanto, inciden poco o nada en los mercados mundiales de cereales.
A t�tulo de ejemplo, mientras las estimaciones correspondientes a las existencias mundiales de cereales han aumentado, en consonancia con las revisiones en China, la merma de las existencias mundiales de cereales actualmente pronosticada para la presente campa�a se mantiene igual a la presentada en la publicaci�n de noviembre de Perspectivas Alimentarias.
La revisi�n al alza de las existencias en China se debe principalmente al aumento de las estimacio-nes de las existencias privadas (principalmente a nivel de las explotaciones agr�colas) as� como de las p�blicas. Debe subrayarse que las revisiones m�s recientes ofrecen un cuadro m�s exacto de la situaci�n interna de la demanda de cereales en China y contribuyen a explicar el hecho de que se hayan seguido exportando grandes cantidades de cereales y que los precios internos sean bajos, teniendo en cuenta la considerable reducci�n de la producci�n de cereales en 2000.
Otro aspecto de las revisiones en China es el de la disminuci�n de las estimaciones correspondientes al consumo humano de cereales per c�pita. Un an�lisis de la utilizaci�n interna de cereales en China revela que las cifras relativas al consumo humano per c�pita son m�s bajas de lo que se hab�a calculado anteriormente, mientras que las de los cereales empleados para pienso son mucho m�s altas, especialmente en los �ltimos a�os. Dada su vasta poblaci�n, los cambios registrados en las estimaciones del consumo de alimentos per c�pita en China tiene notables repercusiones en la utilizaci�n per c�pita de cereales destinados al consumo humano en los planos mundial y regional. Por ejemplo, la disminuci�n de m�s de 200 kg a poco menos de 190 kg del consumo de alimentos per c�pita en China, determin� una merma de alrededor de 5 kg en la media correspondiente a los pa�ses en desarrollo como grupo. En conjunto, sin embargo, a causa de que la revisi�n de la utilizaci�n de cereales en China afecta principalmente a la redistribuci�n entre las categor�as de alimentos y piensos, el total revisado de la utilizaci�n mundial de cereales se ha visto s�lo ligeramente afectado.
En conjunto, los precios internacionales del trigo continuaron subiendo ligeramente a fines de 2000 y principios de 2001. Sin embargo, los aumentos fueron limitados en vista de la disminuci�n de las actividades de compra durante el per�odo de vacaciones de fin de a�o y de la llegada de los suministros de la nueva cosecha en el hemisferio sur. En enero, el trigo No.2 de los Estados Unidos (rojo duro de invierno, fob) se cotiz� en 134 d�lares EE.UU. por tonelada, por t�rmino medio, alrededor de 3 d�lares EE.UU. m�s por tonelada que en octubre de 2000, y tanto como 23 d�lares EE.UU. m�s por tonelada, o sea 17 por ciento, que el a�o anterior. Sin embargo, como las existencias exportables son todav�a cuantiosas, y las perspectivas para las cosechas de 2001 se consideran en general satisfactorias, los mercados de futuros siguen estando bajo una presi�n a la baja y los futuros sobre trigo m�s cercanos terminaron en enero ligeramente m�s d�biles que el mes anterior. Tambi�n subieron en general entre octubre y enero los precios internacionales del ma�z. En enero, los precios de exportaci�n del ma�z de los Estados Unidos marcaron un promedio de 95 d�lares EE.UU. por tonelada, 10 d�lares EE.UU. m�s por tonelada que en octubre y 2 d�lares EE.UU. m�s por tonelada que un a�o antes. Sin embargo, la gran cantidad de suministros de los principales exportadores contin�a influyendo en el mercado y el precio medio para la primera mitad de la actual campa�a comercial fue inferior al del per�odo comparable de la �ltima campa�a. En el mercado de futuros, los contratos de futuros de ma�z m�s cercanos estuvieron nuevamente bajo presi�n en enero, debido a una probable continua-ci�n de las ventas de China. Los precios de expor-taci�n del arroz reanudaron su tendencia a la baja hasta noviembre y diciembre de 2000, despu�s de un breve repunte registrado en octubre, cuando se recuperaron temporalmente debido a los problemas atmosf�ricos que impidieron las actividades de exportaci�n en Viet Nam. El �ndice de los precios de exportaci�n de la FAO marc� un promedio de 95 puntos en enero de 2001, frente a los 97 puntos registrados en octubre de 2000. Salvo alguna crisis imprevista, es probable que los precios reanuden la tendencia a la baja en las pr�ximas semanas debido principalmente a la llegada, en febrero y marzo, de las nuevas cosechas de arroz de los exportadores del hemisferio sur y de Viet Nam.