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EL MUNDO FORESTAL

«Los bosques, fuente de vida», tema del XII Congreso Forestal Mundial

Está muy avanzada la preparación del XII Congreso Forestal Mundial, que tendrá lugar en Quebec (Canadá), del 21 al 28 de septiembre de 2003. El tema del Congreso, «Los bosques: fuente de vida», refleja nuestra dependencia de ese recurso vital y subraya los múltiples beneficios que proporcionan los bosques a todas las formas de vida del planeta. Los bosques sostienen la vida al aportar muchos bienes y servicios esenciales como alimentos, cobijo, energía, madera, conservación de suelos y aguas, hábitat para la vida silvestre, generación de ingresos, identidad cultural y bienestar espiritual. De hecho, uno de los principales retos en la actualidad es encontrar formas de equilibrar las demandas antagónicas y crecientes de quienes dependen de uno o más de esos aspectos para su supervivencia. Se espera que los debates del Congreso definirán una visión para el futuro buscando procedimientos más adecuados para equilibrar las muy diversas demandas de este recurso valioso.

El Congreso Forestal Mundial, organizado bajo los auspicios de la FAO y hospedado cada seis años por un país diferente, es la reunión internacional más nutrida y más importante de los agentes esenciales del sector forestal. Los participantes asisten a título personal, no oficial, para expresar sus propios puntos de vista.

El amplio y variado programa técnico del Congreso abordará cuestiones actuales y emergentes. Incluirá una serie de alocuciones principales, documentos encargados y voluntarios, talleres, sesiones de trabajo y exhibición de carteles, organizados en torno a temas concretos relacionados con el tema general. La lista definitiva de temas a tratar se confeccionará en consulta con un gran número de interesados y reflejará la diversidad cultural y los múltiples intereses de los participantes.

El programa técnico preliminar comprende tres amplias esferas:

El XII Congreso Forestal Mundial está abierto a todas aquellas personas interesadas en el futuro de los bosques y con un firme compromiso de mejorar la ordenación forestal sostenible en todo el mundo. Para garantizar el acceso del mayor número posible de participantes y conseguir una representación equilibrada de países desarrollados y en desarrollo, el comité organizador establecerá distintos procedimientos para facilitar la asistencia. También se podrá participar en el Congreso a través de los medios electrónicos, tanto antes como durante la celebración del acontecimiento, para que todos aquellos que no hayan podido asistir puedan hacer su aportación. El programa preliminar y la primera solicitud para la presentación de documentos y la reserva de espacio para las exposiciones se difundirán en enero de 2002.

Para más información, diríjase a:
Secretaría
Congreso Forestal Mundial 2003
800, Place d'Youville, 18e étage
Quebec (Quebec)
Canadá G1R 3P4
Tel.: 1 418-694-2424
Fax: 1 418-694-9922
Correo electrónico: [email protected]
www.wfc2003.org


Acerca del logotipo del Congreso

El logotipo del Congreso simboliza el nexo vital entre las personas, los bosques y el planeta. La hoja verde, sobre la que están situadas maderas de frondosas y de coníferas, simboliza el bosque. El tronco envuelve al mundo para expresar la naturaleza internacional del Congreso. La Tierra constituye el núcleo central del logotipo. El planeta está colocado en las manos de la figura humana para reforzar la función esencial de las personas en la gestión de este recurso fundamental para las generaciones actuales y futuras, y para expresar el mensaje de que la ordenación sostenible de los bosques es una responsabilidad compartida. Los brazos abiertos, las hojas abiertas y el movimiento de tronco representa el futuro. El círculo abierto simboliza la bienvenida y un enfoque abierto al diálogo y la discusión, dos elementos básicos del XII Congreso Forestal Mundial.

La Conferencia ministerial asume el compromiso de luchar contra los delitos forestales

La explotación ilegal de madera, el comercio ilegal conexo, la caza furtiva y la corrupción son consideradas cada vez más como una amenaza para los recursos forestales a todo lo largo y ancho del mundo. La Conferencia Ministerial de Asia Meridional sobre el cumplimiento de la legislación y el régimen de gobierno en el sector forestal se celebró para promover un compromiso político y un apoyo decididos en la lucha contra esos problemas a nivel nacional, regional e internacional. La Conferencia ministerial fue la culminación de una serie de consultas, conferencias e iniciativas nacionales anteriores sobre este tema en Asia meridional. En las reuniones anteriores se había reconocido la necesidad de actuar a nivel nacional y regional para conseguir un compromiso político del más alto nivel en todos los países.

La Conferencia, que se celebró en Bali (Indonesia) del 11 al 13 de septiembre de 2001, permitió reunir a 150 participantes de 20 países en representación de gobiernos, organizaciones internacionales, organizaciones no gubernamentales (ONG) y el sector privado. Fue organizada por el Banco Mundial y el Gobierno de Indonesia, con el apoyo del Instituto del Banco Mundial y los Gobiernos del Reino Unido y los Estados Unidos.

La Conferencia surgió de una iniciativa que puso en marcha el G-8 en 1998, el Programa de acción sobre los bosques, que concede una gran prioridad a la solución del problema de la explotación maderera ilegal.

La parte técnica de la reunión, de dos días de duración, comprendió nueve sesiones temáticas en las que ese examinó el cumplimiento de la legislación forestal en relación con el sistema de gobierno, la política forestal, la gestión de los bosques y las cuestiones operacionales. Durante el último día de la Conferencia se reunieron ministros y funcionarios de nivel ministerial de Camboya, China, Indonesia, la República Democrática Popular Lao, Filipinas, Tailandia y Viet Nam, así como del Congo y Ghana.

En la sesión de clausura, la reunión aprobó una Declaración Ministerial que compromete a los países participantes a intensificar las iniciativas nacionales, reforzar la colaboración bilateral, regional y multilateral para hacer frente a las violaciones de la legislación forestal y a los delitos forestales, y crear un equipo de tareas regional sobre el cumplimiento de la legislación y el régimen de gobierno del sector forestal con el fin de conseguir el logro de los objetivos de la Declaración. 


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