El documento me parece muy interesante, interdisciplinar y claro con relación a la diagnosis de la realidad y los futuros camiños que se puede adoptar en el enfrentamiento de los muchos problemas de malnutrición con los cuales hemos convivido en los distintos paises. Mis aportes se van en terminos de pensar especialmente los items 2 - Mecanismos institucionales para mejorar la nutrición, los subitems 2.1 Entornos favorables, 2.2 Mejor gobernanza en favor de la nutrición, especialmente a lo que se refiere a la creación de "Políticas coherentes aprobadas por los gobiernos con metas explícitas y estrategias ".
Me gustaría tener sus ojos voltados para el tema de Alimentación Escolar. Es una politica que demanda de la sociedad, la sensibilidad, voluntad politica y los aportes técnicos para su institucionalización.
Los programas de alimentación escolar son considerados herramientas de protección social y son recomendados como uno de los componentes claves de las acciones de seguridad alimentaria y nutricional y de educación, en especial para reducir a la evasión escolar, garantizar el aprendizaje y rendimiento escolar, prevenir la desnutrición y obesidad, romper el ciclo del hambre, y, además de todo, promover el acceso y la adopción de hábitos alimentarios saludables.
Es un tema transversal, que además de involucrar las diversas áreas de actuación politica, como educación, agricultura, ambiente, desarrollo social, demanda la articulación y participación de los gobiernos, parlamentarios, sociedad civil, organismos no governamentales y organizaciones internacionales de cada país.
Actualmente, coordino un proyecto en nivel de Latinoamerica y Caribe que actúa desde el año de 2009 contribuyendo en el desarrollo de políticas públicas locales de alimentación escolar enfocadas en el derecho humano a la alimentación, a la oferta de alimentación adecuada, sana, sistemática, universal y sostenible.
Tiene por referencia la experiencia de alimentación escolar desarrollada en Brasil, por el “Programa Nacional de Alimentação Escolar” (PNAE), que es implementado por el Fundo Nacional de Desenvolvimento da Educação (FNDE)/ Ministério da Educação, hace más de 50 años. El programa de Brasil es una excelente referencia para los países porque es antiguo como política social, es grande, es universal, sistemático, basado en marcos legales que orientan su calidad y estrategia y se organiza a partir de una metodología que le permite alcanzar a casi 45 millones de estudiantes al día, respectando la diversidad local. En este medio siglo de existencia, el PNAE ha ampliado sus objetivos para abarcar desde el suministro de alimentos hasta la educación alimentaria y nutricional.
El objetivo general del proyecto es fortalecer los programas de alimentación escolar por medio de acciones y actividades desarrolladas a nivel regional y nacional. Es ejecutado en 13 países de América Latina y Caribe - Antígua e Barbuda, Bolívia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, Jamaica, Nicarágua, Paraguay, Peru e República Dominicana y Santa Lucia, promoviendo la coordinación intra-gubernamental, la intersectorialidad de las políticas, la capacitación de los actores involucrados, la cultura de la educación alimentaria y nutricional y la compra directa de la agricultura familiar para la alimentación escolar.
El proyecto trabaja directamente con las instituciones gubernamentales, como Ministerios de Educación, Salud y Agricultura. La visión más amplia del tema y algunos cambios se han promovido a partir de esta intersectorialidad y de la formación/capacitación técnica que los técnicos de los ministerios reciben por parte del proyecto, tomando como referencia los muchos temas que dicen respecto a la alimentación escolar.
La estrategia de intervención del proyecto está enfocada en:
A . Fortalecimiento y articulación de las políticas de alimentación escolar, con énfasis en la promoción de debates, reflexiones y documentos que institucionalicen las políticas locales de alimentación escolar, a partir del apoyo y de la participación de ministros, vice-ministros, secretarios, sociedad civil, comunidad escolar, consejeros y parlamentares;
B. Desarrollo y fortalecimiento de capacidades humanas para la ejecución de las políticas locales, teniendo como principal eje la capacitación de las personas que están, de alguna manera, involucradas en el escenario de la política de alimentación escolar, como: gestores, administradores, técnicos, nutricionistas, profesores, coordinadores locales de educación, entre otros.
C. Perfeccionamiento de las condiciones físicas de las escuelas, estimulando la mejoría de la calidad de los espacios de preparación, almacenamiento y distribución de los alimentos a los estudiantes;
D. Generación y difusión de conocimiento e información por medio de estudios, sistematizaciones de experiencias y publicaciones de materiales técnicos y didácticos al respecto de la temática;
E. Consolidación de una red de información, de construcción de conocimientos e de integración de personas que discutan e promuevan el tema Alimentación Escolar en la Región.
La alimentación en la escuela es una estrategia de enfrentamiento del hambre y de la desnutrición, incluso del bajo peso, obesidad, malos hábitos alimenticios, falta de conocimientos sobre los alimentos y sus consecuencias para la vida humana, el precio de los alimentos, la falta de agua potable, la necesidad de su uso de una manera racional y sostenible, falta de alimentos, producción y comercialización de alimentos y otros temas relacionados con la vida social.
Para avanzar en esa perspectiva, es importante considerar la estrategia de educación alimentaria y nutricional de los estudiantes en la escuela.
Del punto de vista pedagógico, para que el proceso de educación alimentaria sea efectivo y alcance los resultados, algunas reflexiones y acciones son fundamentales para fortalecer la inserción del tema alimentación escolar en la práctica cotidiana de la escuela, entre ellas:
a) La alimentación escolar debe estar presente todos los días lectivos en la escuela con calidad con calidad y adecuación nutricional;
b) Los temas y debates sobre alimentación deben garantizar que todas las dimensiones de esa acción humana sean abordadas: la dimensión económica, social, cultural, religiosa, psicológica, pedagógica, nutricional, artística, gastronómica, entre otras, dinamizando así el currículo escolar;
c) Es importante que el tema alimentación componga el currículo de las escuelas, direccionando actividades entre los docentes y demás profesionales en la escuela, promoviendo actividades integradoras de la acción escolar;
d) Las prácticas de educación alimentaria y nutricional no solamente acontecen en las clases. Esa educación debe acontecer en los varios niveles de la política en varios ámbitos de los sistemas de enseñanza. E por lo tanto, deben alcanzar además de los estudiantes, los profesores, profesores, cocineras, agricultores familiares, nutricionistas, coordinadores pedagógicos y también los padres y madres de familia.
Hemos logrado muchos cambios en las politicas de alimentación escolar de los países, especialmente en sus aspectos normativos, de capacitaciones de los actores claves, de calidad, de cobertura, de oportunidades de educación alimentaria por medio de huertos escolares y, sobre todo, en el cambio de paradigma de alimentación escolar para todos - no como politicas direccionada solo a los vulnerables, si no como politica de garantizar el derecho humano a la alimentación adecuada a toda la poblacion escolar.
El documento me parece muy interesante, interdisciplinar y claro con relación a la diagnosis de la realidad y los futuros camiños que se puede adoptar en el enfrentamiento de los muchos problemas de malnutrición con los cuales hemos convivido en los distintos paises. Mis aportes se van en terminos de pensar especialmente los items 2 - Mecanismos institucionales para mejorar la nutrición, los subitems 2.1 Entornos favorables, 2.2 Mejor gobernanza en favor de la nutrición, especialmente a lo que se refiere a la creación de "Políticas coherentes aprobadas por los gobiernos con metas explícitas y estrategias ".
Me gustaría tener sus ojos voltados para el tema de Alimentación Escolar. Es una politica que demanda de la sociedad, la sensibilidad, voluntad politica y los aportes técnicos para su institucionalización.
Los programas de alimentación escolar son considerados herramientas de protección social y son recomendados como uno de los componentes claves de las acciones de seguridad alimentaria y nutricional y de educación, en especial para reducir a la evasión escolar, garantizar el aprendizaje y rendimiento escolar, prevenir la desnutrición y obesidad, romper el ciclo del hambre, y, además de todo, promover el acceso y la adopción de hábitos alimentarios saludables.
Es un tema transversal, que además de involucrar las diversas áreas de actuación politica, como educación, agricultura, ambiente, desarrollo social, demanda la articulación y participación de los gobiernos, parlamentarios, sociedad civil, organismos no governamentales y organizaciones internacionales de cada país.
Actualmente, coordino un proyecto en nivel de Latinoamerica y Caribe que actúa desde el año de 2009 contribuyendo en el desarrollo de políticas públicas locales de alimentación escolar enfocadas en el derecho humano a la alimentación, a la oferta de alimentación adecuada, sana, sistemática, universal y sostenible.
Tiene por referencia la experiencia de alimentación escolar desarrollada en Brasil, por el “Programa Nacional de Alimentação Escolar” (PNAE), que es implementado por el Fundo Nacional de Desenvolvimento da Educação (FNDE)/ Ministério da Educação, hace más de 50 años. El programa de Brasil es una excelente referencia para los países porque es antiguo como política social, es grande, es universal, sistemático, basado en marcos legales que orientan su calidad y estrategia y se organiza a partir de una metodología que le permite alcanzar a casi 45 millones de estudiantes al día, respectando la diversidad local. En este medio siglo de existencia, el PNAE ha ampliado sus objetivos para abarcar desde el suministro de alimentos hasta la educación alimentaria y nutricional.
El objetivo general del proyecto es fortalecer los programas de alimentación escolar por medio de acciones y actividades desarrolladas a nivel regional y nacional. Es ejecutado en 13 países de América Latina y Caribe - Antígua e Barbuda, Bolívia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, Jamaica, Nicarágua, Paraguay, Peru e República Dominicana y Santa Lucia, promoviendo la coordinación intra-gubernamental, la intersectorialidad de las políticas, la capacitación de los actores involucrados, la cultura de la educación alimentaria y nutricional y la compra directa de la agricultura familiar para la alimentación escolar.
El proyecto trabaja directamente con las instituciones gubernamentales, como Ministerios de Educación, Salud y Agricultura. La visión más amplia del tema y algunos cambios se han promovido a partir de esta intersectorialidad y de la formación/capacitación técnica que los técnicos de los ministerios reciben por parte del proyecto, tomando como referencia los muchos temas que dicen respecto a la alimentación escolar.
La estrategia de intervención del proyecto está enfocada en:
A . Fortalecimiento y articulación de las políticas de alimentación escolar, con énfasis en la promoción de debates, reflexiones y documentos que institucionalicen las políticas locales de alimentación escolar, a partir del apoyo y de la participación de ministros, vice-ministros, secretarios, sociedad civil, comunidad escolar, consejeros y parlamentares;
B. Desarrollo y fortalecimiento de capacidades humanas para la ejecución de las políticas locales, teniendo como principal eje la capacitación de las personas que están, de alguna manera, involucradas en el escenario de la política de alimentación escolar, como: gestores, administradores, técnicos, nutricionistas, profesores, coordinadores locales de educación, entre otros.
C. Perfeccionamiento de las condiciones físicas de las escuelas, estimulando la mejoría de la calidad de los espacios de preparación, almacenamiento y distribución de los alimentos a los estudiantes;
D. Generación y difusión de conocimiento e información por medio de estudios, sistematizaciones de experiencias y publicaciones de materiales técnicos y didácticos al respecto de la temática;
E. Consolidación de una red de información, de construcción de conocimientos e de integración de personas que discutan e promuevan el tema Alimentación Escolar en la Región.
La alimentación en la escuela es una estrategia de enfrentamiento del hambre y de la desnutrición, incluso del bajo peso, obesidad, malos hábitos alimenticios, falta de conocimientos sobre los alimentos y sus consecuencias para la vida humana, el precio de los alimentos, la falta de agua potable, la necesidad de su uso de una manera racional y sostenible, falta de alimentos, producción y comercialización de alimentos y otros temas relacionados con la vida social.
Para avanzar en esa perspectiva, es importante considerar la estrategia de educación alimentaria y nutricional de los estudiantes en la escuela.
Del punto de vista pedagógico, para que el proceso de educación alimentaria sea efectivo y alcance los resultados, algunas reflexiones y acciones son fundamentales para fortalecer la inserción del tema alimentación escolar en la práctica cotidiana de la escuela, entre ellas:
a) La alimentación escolar debe estar presente todos los días lectivos en la escuela con calidad con calidad y adecuación nutricional;
b) Los temas y debates sobre alimentación deben garantizar que todas las dimensiones de esa acción humana sean abordadas: la dimensión económica, social, cultural, religiosa, psicológica, pedagógica, nutricional, artística, gastronómica, entre otras, dinamizando así el currículo escolar;
c) Es importante que el tema alimentación componga el currículo de las escuelas, direccionando actividades entre los docentes y demás profesionales en la escuela, promoviendo actividades integradoras de la acción escolar;
d) Las prácticas de educación alimentaria y nutricional no solamente acontecen en las clases. Esa educación debe acontecer en los varios niveles de la política en varios ámbitos de los sistemas de enseñanza. E por lo tanto, deben alcanzar además de los estudiantes, los profesores, profesores, cocineras, agricultores familiares, nutricionistas, coordinadores pedagógicos y también los padres y madres de familia.
Hemos logrado muchos cambios en las politicas de alimentación escolar de los países, especialmente en sus aspectos normativos, de capacitaciones de los actores claves, de calidad, de cobertura, de oportunidades de educación alimentaria por medio de huertos escolares y, sobre todo, en el cambio de paradigma de alimentación escolar para todos - no como politicas direccionada solo a los vulnerables, si no como politica de garantizar el derecho humano a la alimentación adecuada a toda la poblacion escolar.