Foro Global sobre Seguridad Alimentaria y Nutrición (Foro FSN)

Consultas

Enfoques agroecológicos y otras innovaciones en favor de la sostenibilidad de la agricultura y los sistemas alimentarios que mejoran la seguridad alimentaria y la nutrición - Consulta electrónica del HLPE

Durante su 44ª sesión plenaria celebrada del 9 al 13 de octubre de 2017, el CSA solicitó al Grupo de alto nivel de expertos en seguridad alimentaria y nutrición (HLPE, por sus siglas en inglés) redactar un informe sobre “Enfoques agroecológicos y otras innovaciones en favor de la sostenibilidad de la agricultura y los sistemas alimentarios que mejoran la seguridad alimentaria y la nutrición”, que se presentará en la 46ª sesión plenaria del CSA en octubre de 2019.

Como parte del proceso de redacción, el HLPE está organizando una consulta electrónica para recabar opiniones y comentarios sobre el alcance y elementos básicos del informe, descritos a continuación, según lo propuesto por el Comité Directivo del HLPE. 

 

Por favor tenga en cuenta que, de forma paralela a esta consulta, el HLPE desea recibir candidaturas de expertos interesados en incorporarse al equipo del proyecto para este informe. El Equipo de proyecto será seleccionado a finales de 2017 y desarrollará su labor hasta junio de 2019. La convocatoria para la presentación de candidaturas está abierta hasta el 15 de noviembre de 2017; visite la página web del HLPE http://www.fao.org/cfs/cfs-hlpe/es para obtener más información.  

Borrador de alcance del informe del HLPE propuesto 

por el Comité Directivo del HLPE

La innovación ha sido un motor importante para la transformación de la agricultura en las últimas décadas y será fundamental para satisfacer las necesidades de una población que aumenta rápidamente y hacer frente a la creciente presión sobre los recursos naturales (incluyendo la biodiversidad, la tierra y el agua) en un contexto de cambio climático. La agroecología y otros enfoques, prácticas y tecnologías innovadoras pueden desempeñar un papel crucial para fortalecer la agricultura y los sistemas alimentarios sostenibles a fin de luchar con éxito contra el hambre, la malnutrición y la pobreza y contribuir avanzar en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

Crear sistemas agrícolas y alimentarios sostenibles que mejoren la seguridad alimentaria y la nutrición (SAN) no sólo requerirá desarrollar nuevos conocimientos y tecnologías sino también: subsanar las carencias tecnológicas; facilitar el acceso y el uso efectivos de las tecnologías existentes; y desarrollar soluciones específicas para cada contexto, adaptadas a los sistemas alimentarios y a los ecosistemas locales.

Más allá de los aspectos técnicos, este informe evaluará la importancia de los enfoques ascendentes (bottom-up) y centrados en las personas, basándose en diferentes formas de conocimiento, así como en el papel de la buena gobernanza y las instituciones sólidas. Estudiará las condiciones propicias necesarias para fomentar las innovaciones científicas, técnicas, financieras, normativas e institucionales para mejorar la SAN.

Este informe estudiará la agroecología, descrita simultáneamente como una ciencia, un conjunto de prácticas y un movimiento social, como ejemplo de dichos enfoques integrales e innovadores que combinan ciencia y sistemas de conocimientos tradicionales, tecnologías y procesos ecológicos, y que involucran a todas las partes interesadas relevantes en mecanismos de gobernanza inclusivos, participativos e innovadores.

Este informe analizará también las limitaciones y riesgos potenciales de los enfoques innovadores para la SAN, la salud humana, los medios de subsistencia y el medio ambiente. Enfrentados a importantes desafíos medioambientales, económicos y sociales, los responsables de las políticas deben comprender cómo optimizar y ampliar las aportaciones de la agroecología y otros enfoques, prácticas y tecnologías innovadoras, abordando al mismo tiempo estos riesgos potenciales asociados.

El informe del HLPE abordará las siguientes cuestiones:

  • ¿Hasta qué punto pueden la agroecología y otros enfoques, prácticas y tecnologías innovadoras mejorar la eficiencia de los recursos, minimizar la huella ecológica, fortalecer la resiliencia, asegurar la equidad y responsabilidad social, y crear empleo decente -especialmente para los jóvenes- en la agricultura y los sistemas alimentarios?
  • ¿Cuáles son las controversias e incertidumbres relacionadas con las tecnologías y prácticas innovadoras? ¿Cuáles son sus riesgos asociados? ¿Cuáles son los obstáculos para la adopción de la agroecología y otros enfoques, tecnologías y prácticas innovadoras y cómo abordarlos? ¿Cuáles son sus consecuencias para la SAN en sus cuatro dimensiones (disponibilidad, acceso, utilización y estabilidad), la salud y el bienestar humanos, y el medio ambiente?
  • ¿Qué reglamentos y normas, qué instrumentos, procesos y mecanismos de gobernanza se necesitan para crear un entorno propicio para el desarrollo e implementación de la agroecología y otros enfoques, prácticas y tecnologías innovadoras que mejoren la seguridad alimentaria y la nutrición? ¿Cuáles son las consecuencias de las reglas comerciales y los derechos de propiedad intelectual en el desarrollo e implementación de dichas prácticas y tecnologías?
  • ¿Cómo evaluar y supervisar las posibles consecuencias en la SAN, ya sean positivas o negativas, de la agroecología y otros enfoques, prácticas y tecnologías innovadoras? ¿Qué criterios, indicadores, estadísticas y parámetros se requieren?

Esta actividad ya ha concluido. Por favor, póngase en contacto con [email protected] para mayor información.

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Caterina Batello

FAO/AGPME
Italy

FAO/AGPME thanks the HLPE for the opportunity to make comments on the draft scope of the upcoming report, Agroecological approaches and other innovations for sustainable agriculture and food systems that enhance food security and nutrition.

Framework

The HLPE report should begin by providing a conceptual framework for understanding “innovations for sustainable agriculture and food systems that enhance food security and nutrition”. This conceptual framework should be based on clear definitions of “innovations”, “sustainable agriculture and food systems” and – of course – “food security and nutrition” in all four of its dimensions. Such a conceptual framework does not exist and will be one of the important contributions of this report. It would have to include innovations throughout the food system and not only on the production side (also taking into account processing, transportation, marketing, food losses and waste, but also policies, governance, research, etc). It is to be welcomed that the draft scope recognizes not only scientific and technical, but also financial, political and institutional innovations for enhanced FSN. Perhaps social and cultural innovations should be added as they play an important role, for example in the conservation of sustainable use of biodiversity.

Agroecology

This framework needs to be consistent with the premise implicit in the title of the report: that “agroecological approaches” are a noteworthy example of “innovations for sustainable agriculture and food systems that enhance food security and nutrition”. Therefore the report will need to analyze agroecological innovations and explain why these are a noteworthy example of innovations for sustainable agriculture and food systems that enhance food security and nutrition.

Agroecology is widely recognized for being knowledge intensive. Agroecology underlines the importance of context-specific and continuously adapted knowledge to find solutions for complex and dynamic ecological and human systems. It is therefore a central tenet of agroecology that farmers’ knowledge and understanding of management of local natural resources and knowledge of local cultural and social systems form the foundations of agroecology. The dialogue between different actors (such as farmers and pastoralists, or food producers and consumers) is an important source of knowledge and innovation in agroecology, leading for example to innovations in market systems.

Agroecology has a long tradition of building on localized, traditional knowledge, bringing science to bear in ways that respect farmer knowledge, learning and innovation.  This may be through supporting farmers to conduct research themselves, or through introducing interactions with researchers to support on-farm research in collaboration with farmers. A number of interesting cases of this “co-creation” of knowledge for agroecology are highlighted in a special issue of Farming Matters (https://www.ileia.org/wp-content/uploads/2016/06/Farmingmatters32_1.pdf).   

Understanding the innovation systems of small-scale and family farmers and other food producers, most of which would be in line with agroecological approaches, is also necessary. See for example Susan H. Bragdon and Chelsea Smith (2015), Small-scale farmer innovation, (Quaker United Nations Office, Geneva) and QUNO (2015) Small-scale farmer innovation systems: A review of the current literature (Quaker United Nations Office, Geneva).

Agroecological approaches integrate concerns for social equity and justice as an integral part of food systems that deliver food security and nutrition for all, therefore the question of who creates the innovation, who controls it and who benefits from it are key.

Way forward

The report should lead to a set of policy recommendations on how to strengthen innovations for sustainable agriculture and food systems that enhance food security and nutrition, in particular, agroecological approaches. Pertinent questions would include: What research systems and public policies are needed to support such innovations? What data is required to show the impacts of such innovations in order to inform these policies? What legislative systems can protect collective knowledge resulting from co-creation processes? What are the roles of different actors in terms of strengthening such innovations? What role for international exchanges and cooperation in such endeavours? 

Paul von Hartmann

California Cannabis Ministry
United States of America
Dear FSN Associates and concerned global community,
 
Regarding Agroecological approaches and other innovations for sustainable agriculture and food systems that enhance food security and nutrition
 
Increasing solar UV-B radiation threatens the entire world with “global broiling." UV-B increases mercury and arsenic solubility, causes immune suppression, genetic mutation, cancer, hotter forest fires and reduced harvests. 
 
Atmospheric aerosol terpenes, that shield the Earth from the Sun's deadly rays, have been reduced by half in just the past sixty years. Environmental services critically needed for healing Earth's multiple, compounding systemic imbalances include, most importantly, biogenic, atmospheric aerosol terpene production. 
 
Cannabis agriculture offers solutions to all of these problems, and more. Cannabis hemp is the only crop that offers the environmental services and complete, organic vegetable nutrition needed by people and wildlife, at the same time it provides an abundance of cellulose and fiber.
 
Biodegradable plastics, high density carbon, safe & effective herbal therapeutics, and high grade fish food are just a few of the other essential commodities that can be made from Cannabis.
 
Oxygen production, carbon sequestration and terpene production are vital to repairing the Earth's atmosphere and purifying the hydrologic cycle. Cannabis is mankind's functional interface with the Natural Order. Time is the limiting factor in the equation of survival.
 
Please consider the rationale, founded in respect for Nature, presented in my book,
 
Cannabis vs. Climate Change
 
And my previous postings to the FSN forum 
Thank you for your consideration.
 
Sincerely yours,
 
Paul J. von Hartmann 
California Cannabis Ministry / Southern Oregon Ministry Alliance
 
5667 Hwy 66
Ashland, Oregon 97520
(541) 841-8636

 

Izabella Koziell

CGIAR
Sri Lanka

Dear Sir/Madam,

Thank you for the opportunity to provide input to this exercise. 

I am pleased to attach a compilation of responses, from across seven CGIAR centres, in response to your request for comments on the scope of the HLPE report on ‘Agroecological approaches’.  I have pulled these together on behalf of the centres.

Please do not hesitate to get in touch should you require further information on this very important topic.  The CGIAR has a lot to offer in this area.

With kind regards,

Izabella

Izabella Koziell 

Program Director

CGIAR Research Program on Water, Land and Ecosystems (WLE)

Ahmad Mahdavi

University of Tehran
Iran (Islamic Republic of)

Dear Sir/ Madam,

Please see below some of my views/ innovations for food safety and security, considering that I taught IPM/ agroecology for some years in the past perhaps I will respond for that in more detail in the future, only add here that as an entomologist I am observing big loss of insect populations/ pollinators, a collapse, only less than 1/300 of insect species are pests (all pests including crop, health, veterinary, etc.), edible insects are a good source of our future proteins, etc.

With land degradation and erosion, pollution, loss of biodiversity, climate change and many other problems arisen from decades long industrial agriculture now it is the time to take the agroecological approaches based on ecosystem based adaptations serious for food production. I live in mountains near the big one Damavand in Northeast of Tehran and believe that food insecurity is higher for people that live in mountain areas of the world. On the other hand I believe that food production in cities in controlled environments, vertical farming/ gardening and food sharing could help a lot for food security. As the pioneer of the idea: we have to shorten our food chain many years ago during teaching agroecology I strongly believe that humans do not need so much meat consumption and must increase number of plant species in their food table, already use only 12 species. According to my findings some years ago there are strong correlation between diversity of plant species we eat and induction/ diversification of the Cytochrome P-450s (MFOs) called also polysubstrate mono-oxygenases which are responsible for detoxification in human/ animals bodies. With big recent megamergers happened between food/ pesticide companies, already big toxic pollution in food and so less chance for involvement of regulatory agencies FAO need to take immediate action to prevent the harm. Finally looking at the SDG 12 which is all about Sustainable Consumption and Production (SCP) FAO must increase its role and activities to prevent so much food loss and waste, already about 1/3 of whole food production in the world. Please also see my first global message 10 years ago: how pesticides are handled in developing countries and a more recent one: More exposure of people in developing countries to toxic pesticides...etc.

Best regards,

Ahmad Mahdavi, professor emeritus at University of Tehran,

PhD, insect/ pesticides/ chemicals/ biocides environmental regulatory toxicologist,

UN-FAO focal point for Mountain Partnership in the University of Tehran,

UN Environment- CMS preventing poisoning group,

UN Environment focal point for Environmental Education in the University of Tehran.

Francis Guedes

Federal University of Santa Catarina-UFSC
Brazil

I think that, as a general outline, the most important issues are present in the scope proposal, but the report should also address groups of agroecological techniques and technologies of proven success. In agroecology, the necessary applicability to specific contexts is inextricably linked to general guidelines for the design of sustainable agroecosystems under environmental, economic and social aspects. In addition, the climatic similarities between different regions of the world bring the application of certain techniques and technologies that are feasible in these climatic conditions. For example, semi-arid regions, which are, as a rule, among the most affected by serious problems of poverty and lack of food.

Many experiences, already consolidated, were developed within the social movements, the academy, and the interaction between both, promoting increases in productivity and fertility and reducing production costs.

It should be borne in mind that actions in support of agroecology need to have effective democratization of land, wealth, knowledge and decisions, guaranteed and guided by strong state actions, with institutional and financial support in line with the needs productive, social and economic transformation. Thus, agrarian reform is the parent policy and needs to be accompanied by technical advice, research, rural extension, agricultural credit, price and outflow guarantees, agro-industrialization and logistics, with human and financial resources massive and high quality.

Not only participation, but the actual appropriation of actions and results by rural communities and social movements is an essential part of the process of amplification of agroecology. This is to prevent that, as we see, collective efforts are appropriated by groups of financial power involved in 

Sudarshana Fernando

Sri Lanka

Use of circular economy concepts to assist urban and peri-urban agricultural activities can be a great pathway to promote the agro ecological approach. Thirsty and hungry cities are acting as consumption hubs and facing an imminent challenge in managing both solid and liquid urban waste streams.  Urban waste is rich in major and micro nutrients and in addition can provide organic matter to the soil. This has a huge potential to allow reuse in agriculture where the health concerns are addressed. Transporting the waste derived agricultural inputs to rural agricultural areas is not always practical and economical because  bulky nature of the products will consume more space while rocketing the transport cost which at the end of the day is not attractive to rural farmers as a result of the associated high price tags.   There is huge potential for promoting urban and peri-urban agricultural resource recovery from urban waste streams while confirming agro ecological concepts. This will be win-win situation for farmers and city councils who are seeking  nutrients and want to sustainably dispose their waste respectively.

Additional benefits are  shorter value chains, transport distances and carbon foot prints  resulting in a reduced number of actors along the supply chain, reasonable prices, reduced food waste and losses, high quality fresh products to the consumers, etc. The City region food system concept can be used to promote the agro ecological approach hand in hand with  converting a challenge to an opportunity. 

 

Durlave Roy

Northern Agro Services Ltd
Bangladesh

 

          Human nutrition research issues  vs plant nutrition research issues

                   7 Nutrient Deficiencies That Are Incredibly Common

                                                                       Kbd Durlave Roy,Bangladesh

   a) Macro- and Micronutrient deficiencies and imbalances  

   b) A plant needs organic fertilizer to grow in a balanced way

Spinach, Beans-   dietary sources of iron -Iron deficiency is very common in human body.

Seaweed, Potatoes- dietary sources of iodine-Iodine is one of the most common nutrient deficiencies in the world.

Soybean- dietary sources of vitamin D- Vitamin D deficiency is very common

Rice- dietary sources of Vitamin B12 - Vitamin B12 deficiency is very common

Okra  - Dietary sources of calcium- Low calcium intake is very common

Sweet Potatoes, Carrots- Dietary sources of beta-carotene (pro-vitamin A)- Vitamin A deficiency is very common in many developing countries.

Banana- Dietary sources of magnesium- Many people are eating very little magnesium.

So,Spinach, Beans, Potatoes, Sweet Potatoes, Carrots ,Soybean, Rice, Okra, Banana

Plant needs organic fertilizer to grow in a balanced way and meet up Macro- and Micronutrient deficiencies and imbalances .

 

Meike Henseleit

Germany

I think the research questions depict quite well some of the biggest challenges in terms of food security, sustainability, social participation and environmental protection. Additionally, an important point is the public acceptance of new technologies and practices as well as the willingness to change lifestyles by reducing the meat consumption, for example. Without public acceptance, innovative approaches and  new technologies barely will be successful.  

Alberto Sanz Cobeña

Universidad Politecnica de Madrid
Spain

Dear madam/sir,

Few considerations to the proposed draft:

  • Regional based analysis (“context-specific solutions”) could be better addressed within case-studies from different regions, climatic types, vulnerabilities against climate change. Crteria should be defined.
  • Several terms might need better description (refinement). For instance, “resource efficiency” if this is in terms of outcomes, it would be necessary to define the unit (calories, kg of biomass, proteins, economic value…). Additionally, intensities of the responses (in terms of production and services) could be calculated (e.g. scaling up yields to GHG emissions, N losses, etc.). This would be linked to the last bullet point (indicators). When “resilience” is mentioned, is this general, resilience to global change, climate change, socio-economic changes…general?
  • “Decent jobs, in particular for youth”. Gender perspective needs to be included here.
  • It is mentioned “risks”. It would be necessary to put focus on which type of risks.
  • Barriers need to be linked with opportunities
  • Impacts: side effects (agronomical, social, economic, and environmental) of agroecological practices should be included in any assessment.

Best wishes,

Alberto

--

ALBERTO SANZ COBEÑA

Universidad Politecnica de Madrid

http://orcid.org/0000-0003-2119-5620

https://www.researchgate.net/profile/Alberto_Sanz-Cobena

http://scholar.google.es/citations?user=FXLsAMoAAAAJ&hl=es&oi=sra

Red Remedia

http://redremedia.wordpress.com/

Annie Saborío Mora

Costa Rica

El cambio climático que vive toda la Tierra, constituye una de las más grandes amenazas para sus ecosistemas y su humanidad. Este se expresa en sequías, inundaciones, huracanes y otros fenómenos que atentan contra aspectos básicos de la existencia humana como su alimentación, la vivienda, la vida y la estabilidad y subsistencia de muchas poblaciones, especialmente de aquellas que por su bajo nivel de desarrollo están más expuestas y vulnerables a los fenómenos climáticos que implican riesgos a desastres socio ambientales.

Este fenómeno es producto, en gran parte, de las acciones humanas, en las múltiples formas de satisfacción de sus necesidades, generadoras de gases en la atmósfera con un efecto en la elevación de las temperaturas conocido como efecto invernadero.

La sociedad humana con sus actividades económicas y sociales, ha acelerado el calentamiento natural de la tierra de una manera gradual como producto de los patrones energéticos utilizados, los sistemas de producción empleados, y las formas de consumo asumidas por el conjunto de la sociedad actual.

Es un fenómeno global que afecta al conjunto de los ecosistemas y sociedades existentes sobre la tierra. De esta manera, nuestros países están incluidos en este proceso, hacen parte de él y en consecuencia deben dar respuestas concretas y efectivas, principalmente como una manera de sobrevivencia y de preservación de valores básicos de bienestar social, convivencia democrática y satisfacción plena de las necesidades de sus habitantes, incluyendo en ello la preservación de la vida de los ecosistemas que les dan sustento.

Una respuesta coherente y decidida de nuestros países ante este fenómeno que afecta al conjunto de su vida económica y social, podría ser una oportunidad para realizar cambios sustanciales en los sistemas de producción, en los estilos de vida y consumo que acerquen al conjunto de la población a una relación más armónica y coherente con las lógicas de los ecosistemas naturales, lo que podría significar la construcción de una sociedad más próspera y sostenible.

El incremento de la temperatura media de la Tierra ha causado que la cubierta de nieve y hielo haya disminuido y que el nivel del mar haya subido, acompañado de un aumento de las corrientes cálidas del fenómeno del Niño. Ello se ha traducido en cambios drásticos en el patrón de lluvias, con sequías prolongadas en unas regiones y fuertes inundaciones en otras.

A nivel ambiental, los cambios en temperaturas y precipitación implican cambios en la eficacia de los procesos naturales y en el ciclo del agua. En el largo plazo se esperan efectos fisiológicos en las plantas, por el incremento de la evapotranspiración de las hojas, el calor excesivo provocará mayor deshidratación foliar, y en los bosques predominarán las especies espinosas o de hoja pequeña, como los cactus, más eficientes en el uso del agua, favoreciendo un cambio en la composición de los bosques.

Con relación al suelo, la reducción de humedad edáfica al incrementar la evaporación diaria trae como resultado menos agua disponible para las plantas y para consumo humano, incrementando con esto las situaciones de sequía agrícola. A ello se agrega que los procesos de degradación de suelos ponen en riesgo grandes áreas de producción agropecuaria, la sostenibilidad de los bosques debido a la presión sobre los recursos, la disponibilidad de la calidad del agua debido al incremento de la sedimentación de ríos y embalses.

En determinadas regiones, la reducción de la escorrentía tiene efectos en la reducción del caudal de los ríos, el incremento del estrés hídrico y situaciones importantes de escasez de agua proyectadas en escenarios de mediano y largo plazo. También como efecto de la reducción de la escorrentía, se puede presentar una disminución de la generación eléctrica, que constituye, en la actualidad, la principal fuente de energía renovable, como es el caso de Costa Rica.

Los ecosistemas naturales por efecto del cambio climático, se podrían degradar con modificaciones en la estructura, composición y dinámica de los ecosistemas provocando con ello el desplazamiento o desaparición de especies animales y vegetales a nivel local, silvestres y domesticadas, que no logren acomodarse a los cambios de temperatura y patrones de lluvias. Esto deteriorará las fuentes de alimentos, recursos de bienes comerciales de las familias rurales, incrementando el riesgo de agravar los niveles de pobreza, malnutrición y hambre.

El aumento de la temperatura del mar, la erosión costera y la eutrofización[1] de las aguas, tiene efectos directos en el blanqueamiento y muerte de los arrecifes de coral, en la reducción de la pesca, el desplazamiento obligado de algunas poblaciones costeras a territorios más elevados y la salinización de algunas fuentes de agua dulce y suelos agrícolas.

Por efecto del cambio climático se tendrán consecuencias negativas importantes en la infraestructura social, económica, productiva y ambiental, con efectos significativos en las dinámicas económicas por los daños que causan.

La salud humana es particularmente sensible a los cambios en los patrones del tiempo y otros aspectos asociados al cambio climático. La dispersión de enfermedades transmitidas por mosquitos y los brotes de enfermedades infecciosas y de otro orden, las asociadas a la falta de alimentos, el calor y el acceso al agua, con efectos negativos en el bienestar de la población y en su capacidad productiva.

De gran importancia, para el conjunto de la sociedad y especialmente para el medio rural, es el efecto negativo del cambio climático en las infraestructuras de diferentes tipos, como consecuencia de los eventos climáticos extremos tales como: derrumbes, destrucción de redes eléctricas, acueductos y alcantarillados, viviendas, centros de comercio y bienes públicos de convivencia ciudadana y los sistemas de comunicación.

Adicionalmente se debe considerar y evaluar la resiliencia de los ecosistemas naturales terrestres al cambio climático y los efectos que pueda ejercer tanto sobre la fauna y flora como sobre la idoneidad de las zonas y tierras tradicionalmente asociadas a las actividades agrícolas y a la productividad de cultivos específicos, junto a las medidas de adaptación y previsión del impacto que puedan tener en los medios de producción y subsistencia de las comunidades rurales y agrodependientes.

Con lo anterior, se está afirmando el carácter integral que deben de tener las políticas públicas y la organización institucional respectiva para enfrentar los retos planteados por el cambio climático, no sólo para asegurar la producción, distribución y consumo de alimentos, sino además las condiciones del hábitat humano y natural y la preservación de la vida sobre el planeta.

De esta manera, las políticas públicas deben ser formuladas en esos términos, sistémicas y holísticas, fundamentadas en evidencia científica que aclare el panorama de riesgos y medidas en materia de adaptación y resiliencia que deben formularse y lo que es más importante, tomando en consideración la viabilidad de su aplicación, no sólo considerando la eficiencia institucional, que es muy importante, sino la activa y comprometida participación de la población rural, tanto en su diseño como en su aplicación.

Esto implica necesariamente adoptar enfoques institucionales nuevos, que sean capaces de identificar, valorizar y potenciar los recursos endógenos de los territorios rurales, principalmente la activación de su propia población, su formación y empoderamiento en plataformas de diálogo y negociación que posibiliten una nueva generación de políticas de carácter ascendente, que puedan ser incluidas en las iniciativas nacionales de carácter estratégico.

Tales políticas, deberán trascender de políticas gubernamentales a políticas de Estado, que puedan darle una visión y permanencia de largo plazo al desarrollo de la ruralidad de nuestros países, considerando las diferencias de los diferentes territorios, y con ello, superar el cortoplacismo que ha imperado en muchos de ellos.

Es entonces, un cambio institucional transcendente, en el cual las políticas públicas y la acción institucional transiten del centralismo, la imposición y el clientelismo, hacia la descentralización territorial, la participación ciudadana, sustentadas en evidencia y en el diálogo social, el fortalecimiento de los sujetos sociales y la dinamización de las potencialidades de los territorios rurales histórica y socialmente excluidos.

 Dicho cambio debe orientarse hacia la territorialidad y los retos específicos de cara a las medidas de adaptabilidad y resiliencia que este enfoque enmarca, considerando que los efectos del calentamiento global y el cambio climático generará profundos cambios en las condiciones hidrológicas y climáticas, en donde algunos territorios perderán áreas  aptas  o dedicadas para los cultivos que son su base económica y de subsistencia mientras otros presentarán condiciones socioeconómicas y ambientales que les permitirán enfrentar los impactos con mayores fortalezas.

Una nueva institucionalidad bajo esta visión territorial del desarrollo rural, posibilitará afrontar el tema alimentario y productivo desde una óptica de vulnerabilidad y fortalezas ante el cambio climático, en la medida en que abordarán sus consecuencias con la capacidad de analizar sus vulnerabilidad y potencialidades con base en los acervos de información y datos científicos y los recursos naturales, ecológicos, sociales y culturales existentes en los mismos territorios rurales, con un acompañamiento estratégico de parte del Estado y no con una postura sustitutiva, centralista, poco eficiente y eficaz, como ha sido una buena parte de la experiencia histórica de nuestros países.

Cambiar el abordaje por parte del Estado, del desarrollo de  los asentamientos campesinos( como se les ha denominado durante muchos años) ,delimitados con una visión segregada, independiente uno de otro, a una visión de desarrollo de los territorios rurales definidos y considerados como  unidades geográficas que desarrollen las actividades rurales derivadas del aprovechamiento de sus recursos naturales, ecología,  forma de organización,  cultura,  clima, y  costumbres, entre otros, permitirá la apropiación de una estrategia de adaptación al cambio climático y una previsión para el aprovechamiento eficiente de sus recursos naturales, económicos, sociales y culturales que coadyuven al desarrollo de estos territorios rurales, condición absolutamente necesaria para asegurar la seguridad alimentaria de las regiones más deprimidas y por ende las naciones.  

San José, Costa Rica

29 noviembre 2017

[1] Acumulación de nutrientes orgánicos e inorgánicos